La nueva vida de soltera de Martina Klein

Ha sido un año difícil para Martina Klein, pero todo vuelve a su sitio. Fue la primera separación sonada del año. La modelo de origen argentino y Álex de la Nuez no sorprendían a todos con su ruptura. Finiquitaban una relación de diez años ante el asombre de la mayoría que apostaban por su ‘amor sin fin’. Medio año después del anuncio, las heridas poco a poco van cicatrizando. Martina ha abierto su corazón a Vanitatis.com para contar su estado anímico.

“Estoy bien. La verdad que ahora mismo mejor. He tenido momentos muy malos. Mi hijo me está ayudando mucho”, ha reconocido. De hecho, tras la ruptura la modelo podría haber vuelto a Barcelona, donde viven sus padres, pero decidió quedarse en Madrid. “Estamos aquí para estar al lado del padre, lo puede ver siempre que quiere”, dice.

Lo cierto es que la joven no quiere hablar mucho de la ruptura, pero admite que ha pasado página: “Los horarios de mi hijo marcan ahora mi vida, el colegio, las comidas. Esto me ayuda a estar activa y ocupada, a parte del trabajo"”. El pequeño Pablito estuvo al corriente de la separación de sus padres, aunque no ha sufrido por ello. “El niño está bien. No le falta cariño”, dice Klein.

La top española es imagen de varias firmas. Hace pocos días viajó a Barcelona para vestirse de novia. Martina lució con elegancia en la Pasarela de Novia España los diseños de Raimón Bundó. A pesar del estilismo, la modelo no está por la labor de dar ‘el sí quiero’. “Nunca he estado más lejos del traje de novia. Significa tan poco a nivel emocional para mí vestirme de blanco. Es sólo un trabajo”, reconoce. Por cuestiones laborales, se ha vestido muchas veces de novia, aunque nunca de verdad. Y es que no se ha casado jamás: “Ha habido momentos más románticos en mi vida que han coincidido con desfiles de novia. Ahora no”.

Martina tiene en mente dos objetivos prioritarios: su hijo y el trabajo que afortunadamente no le falta. Klein está a punto de firmar un suculento contrato que la llevará a lo más alto de la popularidad. Precisamente durante estos meses de crisis personal ha podido experimentar con varias ofertas. Martina ha presentado el programa Celebrities en La Sexta, espacio ya desaparecido. “Era mi primer programa como presentadora. Me ha servido un montón y me ha dejado buen sabor de boca. La cadena y la productora han quedado satisfechas”, dice. La baja audiencia y la contraprogramación ha sido arma arrojadiza para el espacio. Ella piensa que “han dejado morir al programa cambiándolo tanto de horarios, domingo, sábado. Seguro que saldrán más cosas”.