Carlos Telmo, el hombre tras la boda de Fran Rivera y Lourdes Montes

Tiene aspecto de dandy a la andaluza, dice siempre lo que quiere decir y el sábado pasado no estaba pendiente de reventones de exclusivas o de amenazas de revistas que querían proteger unas jugosas fotografías. Carlos Telmo, amigo de toda la vida de la familia Ordóñez, quería que los invitados que acudieron a la boda de Francisco Rivera y Lourdes Montes lo pasasen lo mejor posible. Él fue el encargado del protocolo de toda la celebración, de acompañar a los invitados hasta su mesa y vigilar que todo quedase perfecto. “Me crié con Carmen y Belén Ordóñez y esta era una boda muy especial para mí. Estoy contento de haberla organizado principalmente por eso, porque era algo muy sentimental”.

Lo curioso es que él estuvo también tras la boda del torero con Eugenia Martínez de Irujo, celebrada el 23 de octubre de 1998 en la Catedral de Sevilla. Aquel enlace, que llegó a ser retransmitido (no sin polémicas de todo tipo y color) por Televisión Española, fue bastante “diferente” a este. También para el propio Telmo. “En la boda de Eugenia, yo era el portavoz de la Casa de Alba, cargo que ejercía por entonces. Acredité a casi 500 periodistas y, excepto de la decoración, me acabé encargando de todo”. Para él, que prácticamente creció jugando en la Finca El Recreo donde se ha llevado a cabo la celebración del enlace, la boda del diestro con Lourdes Montes ha sido mucho más cercana, más familiar, a pesar de que, paradójicamente, esa cercanía haya sido la que ha acabado ‘reventando’ la exclusiva de la revista ¡Hola!.“En la otra boda, la de Fran con Eugenia, hubo unos 1.500 invitados y en esta muchos menos. De los amigos de su madre estábamos sólo cuatro o cinco personas”.

La pregunta lleva asaltando a los medios de comunicación durante toda la semana y es inevitable hacerla: si la boda era tan íntima, ¿quién fue el que filtró las fotografías a través de las redes sociales? “Somos ya mayorcitos. No entiendo que se advirtiese que no se debían hacer fotos y se hicieran. Pese a todo, Fran estaba muy feliz”, asegura. Además, nada de calificar como polémicos o discutibles los 'looks' con chisteras Alicia en el país de las maravillas o sombreros que parecen salidos de una carrera de galgos inglesa. Telmo los defiende por una sencilla razón: “A mí la chistera me quedaba genial, aunque a otros les sentaba como un tiro, la verdad. Estoy feliz por habérmela puesto por primera vez en mi vida”, afirma.

Un experto en bodas

Telmo, además de amigo, ha sido el organizador de varias bodas con sabor andaluz. Por ejemplo, la de Carla Goyanes, la de Finito de Córdoba con Arancha del Sol, la de Fernández Tapias con Nuria March o la próxima de Miguel Ángel Perera con Verónica Gutiérrez, hija del Niño de la Capea. “Yo me encargo de supervisarlo todo”, asegura con satisfacción. Sin embargo, los encargos nupciales le llegaron inesperadamente y también gracias a Fran Rivera. “Después de la boda de Fran y Eugenia, de repente parecía que lo sabía todo acerca de las bodas y empezó a llegarme un encargo tras otro”.

Además, se muestra orgulloso de su labor. “Cuanta más mano meto en las bodas, mejor. Los novios suelen estar muy perdidos casi siempre”. Telmo dirige parte de su crítica hacia las bodas de ahora focalizándola en muchos novios, que parecen perderse en cientos de detalles que acaban siendo insignificantes. “Nuestras madres y abuelas se casaban sin tanta cosa y eran muy felices también”, asegura un hombre que afirma no haber organizado aún la boda de sus sueños porque, hasta ahora, los novios “no suelen hacerme mucho caso”. La de Fran Rivera y Lourdes Montes es el último eslabón en la carrera de este hombre que ha trabajado para Canal Sur Radio y es toda una personalidad en la vida social andaluza. Con chistera o sin chistera, las bodas organizadas por Carlos Telmo, como bien saben varios toreros, permanecen en la retina de sus invitados, aunque en el caso de Lourdes y Fran, las fotografías que se colaron en las redes sociales hayan menguado el impacto de su estudiada organización.