Francisco Ortiz von Bismarck: “Me reclamó Hacienda de Suiza, pero eso ya está resuelto”

Francisco Ortiz von Bismarck vive ajeno a todo el mundanal ruido de Marbella. Es la fusión perfecta de la estricta seriedad alemana y el burbujeo ocurrente de su padre con tintes de niño de Harvard. Aunque se crió en Marbella y sus dos hijos, Luís y Francisco, son marbellíes, nacidos en la clínica Quirón, Fran se considera ciudadano del mundo y se toma la vida de otra manera diferente a la que lo hicieron sus progenitores, Gunila von Bismarck y Luis Ortiz.

Hace pocos meses la Hacienda suiza reclamó su presencia a través del Boletín Oficial del país por no poder contactar con él y un semanario local publicó que estaba siendo buscado por la Administración. “La publicación de esa noticia fue tan innecesaria como alarmista”, indica Francisco a Vanitatis. “Es cierto que se me instaba a presentarme en un plazo de 10 días o a facilitar una persona de contacto en Suiza que pudiera representarme ante la administración fiscal, pero es que eso allí es una formalidad corriente”, matiza. “Lo que pasa es que un medio suizo copió el listado y al aparecer en él un apellido Von Bismarck, que es muy mediático, y decidieron hacer una noticia de nada, sin sentido y creando una alarma innecesaria”, expone.

Francisco Ortiz afirma que ya no tiene ningún problema con la Administración suiza: “El tema está zanjado y cerrado”. No obstante no quiere entrar en detalles de cuáles eran esos asuntos. Pero sí indicar que “en Suiza se procede así, si no logran contactar contigo por correo certificado publican un anuncio en el boletín oficial del país. Nada más salir la publicación con mi nombre mis abogados contactaron con la Administración de Suiza y resolvieron el asunto de inmediato. De hecho, antes de que el semanario publicara aquella información estaba todo resuelto”, señala Von Bismarck a Vanitatis.

Ya piensan en ir a por una 'Gunillita'

Francisco Ortiz se encuentra estos días en Marbella con sus padres, Luís Ortiz y Gunilla Von Bismarck. Con él están su esposa, la letrada Elisabet Dutú, y sus dos hijos. “La verdad es que desde que están los niños la vida me ha cambiado 180 grados. Luisito, el pequeño, solo tiene un año y medio. Ahora está durmiendo la siesta, pero en cuanto se levante ya solo puedo tener ojos para él. Los dos son clones de su abuelo”. Francisco, el mayor, ha cumplido tres años y es el niño de los ojos de la aragonesa “Lis”, que ha sido el gran amor de Francisco desde el primer día que le vio sus zapatos rojos. “¿A por la niña? Jajaja. Vamos a esperar un año antes de de ir por una 'Gunillita'(risas). Ahora la idea es volver a Zurich. Allí los niños están mas relajados con su niñera y todos volvemos a nuestro rutinario día a día”.

Siempre que pueden se escapa a Monzón (Huesca), un pueblo de 16.500 habitantes donde los suegros de Fran tienen la empresa familiar, dedicada al transportes y al material de construcción. Allí los niños, junto a su tía Alejandra, “se lo pasan pipa”, sobre todo en invierno, que suben a la estación de esquí para iniciarlos.

Empresario tecnológico

Los que le conocen siempre dicen que Francisco “es un cerebrito”. A sus padres siempre se les llena la boca con “lo listo y guapo que es su niño”. Entre los logros empresariales de este joven se encuentra formar parte del equipo que creó la red social Tuenti. Ahora está más dedicado a aplicaciones móvil y en ciernes presentará una que espera sea una revolución. “De todo intento aprender, tanto de mis éxitos, como Tuenti, como de mis fracasos, como fueron Glass (en la que también invirtió Pau Gasol) y Youzee”.

Ahora está con dos nuevos proyectos: IzzyChat y Dupli. “Ahora creo que voy por buen camino. Dupli creo que va ser una aplicación muy innovadora. Es la primera plataforma de VOD (video on demand) personal, privada y social para todos tus videos de todas tus cámaras (iPhone, Gopro, etc...). Sirve para guardar tus videos personales en la nube, compartirlos en formato original con quien quieras y por supuesto reproducirlos en alta calidad desde cualquier dispositivo al instante. Ya lo he probado mandando videos de mis hijos a mi madre y la verdad es que es espectacular”. De hecho, Gunilla maneja las nuevas tecnologías gracias a su hijo Fran. “¡Qué remedio! Nos dice cuando nos ve”.