Así ha sido el descafeinado 'duelo de estilo' entre Matilde de Bélgica y Brigitte Macron
Han coincidido por primera vez en un viaje de Estado que lleva estos días al matrimonio francés al país belga. La primera puesta en escena ha dejado un sabor agridulce
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Esta mañana se han conocido Brigitte Macron y la reina Matilde de Bélgica. Nunca habían coincidido antes y las expectativas eran máximas por ver cómo se desenvolvían juntas. El encuentro se producía en el marco de un viaje oficial que el presidente francés, Emmanuel Macron, realiza junto a su esposa para reforzar los lazos de ambas patrias que siempre han estado unidas, también gracias al idioma. Durante la corta estancia que los Macron disfrutarán en el país -llegaron el lunes y ya se van el martes- visitarán una ciudad clave: Molenbeek, el lugar donde residían los terroristas que atentaron contra París en 2015.
Tras ese traumático suceso, esta visita trata de poner el énfasis en lo que les une. La relación entre los dirigentes de ambas naciones es bastante cordial, tanto que fue el propio rey Felipe de Bélgica el que cursó directamente la invitación al presidente francés. Los reyes han recibido a los Macron y posteriormente la comitiva ha partido rumbo al Palacio Real de Bruselas, donde han dado una breve rueda de prensa. Allí se ha producido el esperado duelo de estilo entre ambas damas.
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Matilde, consciente de que se fotografiaba con una figura mediática de la talla de Macron, apostó todo al rojo, color que te obliga a centrar la mirada en ella de forma casi involuntaria. El traje, que se ceñía de forma discreta a la cintura, defendía un corte plisado y una falda voluminosa. Como complementos eligió una diadema también rojiza y un bolso beis que casaba con sus guantes y altos zapatos. Como conclusión, gustaba pero no deslumbraba.
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Asimismo, la ‘primera dama’ francesa parecía no complicarse demasiado y se decantaba por un sencillo pero muy acertado abrigo en tonalidad grisácea y botones rojos que combinaba con un vestido con cuello de tortuga. Abajo, unos salones del mismo tono mientras que de su brazo colgaba un bolso Louis Vuitton cuyo precio es de 2.930 euros.
Una cita algo falta de fuerza
Resultado sobrio pero intachable por parte de Brigitte, aunque muy lejos de los últimos looks que ofreció durante la celebración del Armisticio hace apenas una semana o la reciente confluencia con la reina Letizia en París.
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Este ha sido el primero de los dos grandes encuentros ‘reales’ de la semana en Europa, ya que el próximo miércoles será la presidenta de Singapur, Halimah Yacob, quien visite en Holanda a la reina Máxima hasta el viernes 23 de noviembre. Allí, en Ámsterdam, se tomará otra instantánea para el recuerdo.
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Esta mañana se han conocido Brigitte Macron y la reina Matilde de Bélgica. Nunca habían coincidido antes y las expectativas eran máximas por ver cómo se desenvolvían juntas. El encuentro se producía en el marco de un viaje oficial que el presidente francés, Emmanuel Macron, realiza junto a su esposa para reforzar los lazos de ambas patrias que siempre han estado unidas, también gracias al idioma. Durante la corta estancia que los Macron disfrutarán en el país -llegaron el lunes y ya se van el martes- visitarán una ciudad clave: Molenbeek, el lugar donde residían los terroristas que atentaron contra París en 2015.