Sofía Hellqvist cumple 35: de nuera incómoda a ojito derecho de los reyes
La esposa de Carlos Felipe cumple este 6 de diciembre 35 años convertida en un miembro de la familia real muy respetado por los ciudadanos y feliz madre de familia
Mucho ha cambiado la imagen de Sofía Hellqvist desde que el príncipe Carlos Felipe de Suecia la presentara como su prometida, hasta ahora. Y es que ha pasado de ser camarera, modelo de ropa interior y estrella de realities a un respetado miembro de la Corona sueca. Una princesa muy apreciada por el pueblo, pero también por los reyes Carlos Gustavo y Silvia, a los que Sofía ha convencido a base de su discreción y el trabajo que ha hecho durante todos estos años, volcada especialmente en la lucha contra el bullying, uno de los temas que más preocupan a su marido por las dificultades que tuvo él durante su infancia.
No podemos negar que Sofía no lo tuvo precisamente fácil para ganarse el corazón tanto de los suecos como de sus suegros. Y es que el noviazgo de la pareja supuso todo un choque, debido al pasado de la princesa, y no solo en el seno de los Bernadotte. Las críticas estuvieron muy extendidas y a ella le afectaron mucho, algo de lo que habló sin tapujos en un programa de televisión, como parte de una campaña, precisamente contra el bullying. "Cuando se hizo pública mi relación con el príncipe, me encontré en medio de una tormenta de odio. Todo el mundo tenía malas opiniones de mí como persona, sobre mi relación o sobre cualquier cosa. No entendía la necesidad de las personas de criticarme constantemente, además en todos los aspectos de mi vida".
Aunque estuvieron saliendo durante cuatro años, no se formalizó la relación hasta 2012, cuando acudieron juntos al bautizo de su sobrina Estelle, la hija mayor de la princesa Victoria. Anunciaron su compromiso en 2014, superando y haciéndose fuertes ante las críticas. En 2015 se dieron el 'sí, quiero', dando la bienvenida a su primer hijo, Alexander, diez meses después y ampliando la familia en el verano de 2017, con la llegada de Gabriel, de los que presume siempre que puede a través de sus redes sociales.
Pero aunque la imagen de Sofía ha cambiado mucho desde aquel 2011, cuando empezó a tenerse noticia de la relación, hasta ahora, no todo ha sido un camino de rosas, especialmente por lo que respecta a la relación con sus cuñadas, un tema muy recurrente en Suecia, del que se habla a menudo y no precisamente para bien. Y es que están muy extendidos los rumores que apuntan a que su relación con Victoria y Magdalena no es la mejor, algo que se empeñan en desmentir una y otra vez, como hace unos meses, cuando la princesa Victoria quiso que fuera Sofía quien la acompañara durante su visita a Dalarna, la provincia en la que nació, o en los diferentes eventos familiares oficiales.
Uno de los detalles que más 'mosquea' a los suecos y que revelaría la verdadera relación de Sofía con su familia política es que rara vez la vemos con joyas pertenecientes a la colección real. Es muy habitual que, en actos de gala, luzca la tiara que sus suegros le regalaron para su boda, además de sus propios pendientes y collares. Algo que muchos ven, simplemente, como una declaración de intenciones de Sofía para mostrarse como una mujer independiente y libre y que no necesita ni los privilegios ni las joyas a los que tiene acceso con su estatus de princesa. Un gesto que muy probablemente volveremos a ver en su próxima cita importante, la entrega de los Premios Nobel, una fecha marcada en rojo en el calendario sueco y en la que compartirá protagonismo con el resto de la familia real.
Mucho ha cambiado la imagen de Sofía Hellqvist desde que el príncipe Carlos Felipe de Suecia la presentara como su prometida, hasta ahora. Y es que ha pasado de ser camarera, modelo de ropa interior y estrella de realities a un respetado miembro de la Corona sueca. Una princesa muy apreciada por el pueblo, pero también por los reyes Carlos Gustavo y Silvia, a los que Sofía ha convencido a base de su discreción y el trabajo que ha hecho durante todos estos años, volcada especialmente en la lucha contra el bullying, uno de los temas que más preocupan a su marido por las dificultades que tuvo él durante su infancia.