El nuevo revés de Charlène de Mónaco: tiene que volver a operarse

No llegan buenas noticias, desde luego, desde Sudáfrica, donde persisten los problemas de salud de la princesa Charléne de Mónaco. La esposa de Alberto de Mónaco contrajo una infección otorrinolaringológica hace unos meses que no termina de curarse. De hecho, tal y como ha informado en un comunicado el propio palacio, Charléne tiene que volver a operarse. La operación está prevista para ese mismo viernes, con cuatro horas de duración bajo anestesia general, tal y como se puede leer. De momento, no se han dado más detalles del procedimiento, qué equipo médico se ocupará de la intervención o el centro donde se llevará a cabo.

Lo que sí se matiza en este comunicado es que tanto el príncipe Alberto como sus hijos, Jacques y Gabriella, estarán en Sudáfrica durante su periodo de convalecencia. Sin duda una buena noticia para la princesa Charléne, que tendrá a los mejores 'enfermeros' en una etapa que se prevé no demasiado sencilla. Han pasado ya varias semanas desde que estuvo con ellos por última vez, por lo que su presencia en su casa sudafricana será un soplo de aire fresco para ella, que en repetidas ocasiones ha lamentado a través de las redes sociales estar alejada de ellos y de su marido.

Ella misma explicaba hace poco en Channel 24 que sufre una infección de oídos, nariz y garganta causada tras una intervención dental que se realizó en Mónaco antes de viajar a su país de origen. Un detalle que nos faltaba por conocer para entender bien el alcance de su dolencia. La cuñada de Carolina de Mónaco se habría sometido a una elevación del seno maxilar para colocar un injerto con el fin de poner un implante, lo que le produjo una grave infección. Aunque era una intervención delicada y la infección posterior entraba dentro de las posibles secuelas, no se dio cuenta de la complicación hasta que empezaron a dolerle mucho los oídos, ya en Sudáfrica, y tuvo que visitar a un especialista.

Desde entonces, sigue un tratamiento y ha sufrido diversas complicaciones. El motivo por el que no regresa a casa es estrictamente médico: “La presión de mi oído no se estabiliza, lo que significa que no puedo volar por encima de los 20.000 pies”. Estaba previsto, en un principio, que Charléne volviera a casa en octubre, retomando con ello su agenda institucional, completamente paralizada actualmente. Pero no sabemos aún si esta nueva complicación hará que tenga que atrasar aún más su vuelta a casa y, con ella, su reencuentro con los suyos.

No sabemos si el comunicado calmará un poco los insistentes rumores de un distanciamento entre la princesa Charlène y el príncipe Alberto, pero lo cierto es que, por muchas explicaciones que se han dado sobre su salud, por muchos desmentidos que se han hecho a través de comunicados o gestos en redes, los comentarios han seguido ahí. De hecho, han sido varios los medios europeos que han llevado a portada no solo la estancia de la Princesa en Sudáfrica, con el consiguiente distanciamiento físico de su marido, sino que algunos incluso han asegurado que estaban preparando la separación.

Han sido precisamente las redes sociales las que han servido de plataforma para Charlène en estas semanas, tanto para expresar cuánto echa de menos a su familia como para hacer cierto trabajo institucional, especialmente en lo que se refiere a la campaña para defender la protección de los rinocerontes, precisamente el motivo que la llevó a Sudáfrica y gracias al que vimos la imagen más guerrera de la princesa, hace solo unos días. Y serán, seguramente, el mismo medio por el que tengamos las próximas noticias de la exnadadora y las esperadas imágenes del reencuentro con sus hijos.