El fin de semana de Felipe VI sin Letizia: esquí, amigos, un plan nocturno y una misteriosa reserva

Parece que se ha convertido en toda una costumbre para el monarca y no nos extraña. Cualquier excusa es buena para pasar el fin de semana disfrutando de tu deporte favorito y es, precisamente, lo que ha hecho él. Felipe VI ha disfrutado de una escapada a los Pirineos. Concretamente el rey se desplazaba a Baqueira con algunos amigos para disfrutar de unos días en los que ha habido mucho esquí, claro está, pero también tiempo para un plan nocturno con misterio incluido.

Era el diario ilerdense 'Segre' el que informaba primero de este viaje del monarca a la zona, tan visitada por toda la familia real desde hace décadas. Incluso, existe una casa en el Val d'Aran, cedida por los empresarios de la zona, para uso y disfrute del clan Borbón. Una forma de asegurarse las visitas reales, que han seguido en los últimos años representadas por las infantas Elena y Cristina y sus hijos, especialmente por parte de Victoria Federica.

En cambio, del núcleo de los Borbón-Ortiz, es don Felipe el único que ha seguido visitando Baqueira, aunque con algunos intervalos. Curiosamente, fue hace exactamente un año cuando esquió en la zona, pero llevaba cuatro años sin hacerlo. Un dato que no se liberó de las suspicacias, puesto que su regreso a estas pistas leridanas fue poco después de que se viera a Iñaki Urdangarin en el mismo sitio junto a Ainhoa Armentia.

Casualidad o no, e influido por las imágenes de su excuñado en la zona o no, parece que el plan fue muy del gusto del monarca, que no ha dudado en repetirlo, exactamente el mismo fin de semana que lo hizo en 2023 y muy parecido. No faltaron, obviamente, muchas horas dedicadas al esquí, el que es su deporte favorito junto con la vela, pero tampoco la buena comida y la buena compañía.

El grupo de amigos con los que iba el Rey no ha sido identificado de momento, pero en otras ocasiones sus 'partners in crime' han sido nombres como Pedro López de Quesada o Beltrán Gómez-Acebo. Pero, fueran quienes fueran, lo cierto es que todos pudieron disfrutar también de un plan nocturno en uno de los restaurantes de la zona.

Fue, concretamente, en El Fogón del Valle, situado en Vielha, el lugar que el grupo de amigos escogió para cenar el viernes por la noche. La responsable del mismo, Tatiana Wandurraga, explicó al mismo medio que desconocía que la reserva que se había hecho era para el monarca, una práctica habitual en este tipo de salidas más privadas: "No supimos que era el Rey hasta que entró por la puerta", explicó, además de dar testimonio gráfico de la visita en sus redes sociales.

Ya el sábado, don Felipe dedicó la jornada a esquiar tanto en la zona de Baqueira como en la de Beret, donde también hizo una parada para comer. Como suele ser normal, su presencia generó una gran expectación, tanto en las pistas, donde no consiguió pasar desapercibido para muchos de los aficionados al deporte y para la escasa prensa presente, como durante la comida.

Así, un año más, el monarca ha querido pasar un fin de semana con amigos y sin la compañía de doña Letizia, algo habitual cuando se trata de esquiar, ya que no es precisamente el deporte que más le gusta practicar a la Reina. Sea en Baqueira, su última parada, en Formigal, Sierra Nevada o Astún, donde precisamente la princesa Leonor hacía sus maniobras de alto rendimiento invernal hace unas semanas, el plan siempre es con su grupo de amigos de confianza y no con su esposa.