Masako de Japón rompe su propia norma: el cambio notable en el armario de la emperatriz

Que una royal elija el azul eléctrico para uno de sus looks no suele ser noticia. Pero sí en el caso de la emperatriz Masako de Japón, que ha roto su propia norma estilística durante la visita de Estado que está realizando al país nipón Lula da Silva, presidente brasileño, junto a su esposa. En la bienvenida oficial, la esposa de Naruhito ha sorprendido con su look, un diseño que supone un cambio bastante notable en su armario.

Hablamos de un dos piezas de vestido y chaqueta, con un corte recto y muy sobrio, largo midi y muy fiel al estilo de la emperatriz. El diseño presenta, eso sí, algunos detalles diferenciadores, como el encaje en los laterales de la blazer, a juego con la parte superior del vestido, y la abertura en la parte trasera. No han faltado las perlas, a las que sigue siendo leal.

Hasta ahí nada que sea diferente en los atuendos que normalmente luce Masako, sino fuera por el color, de una tonalidad que no estamos nada acostumbrados a ver en ella. Un color azul muy vivo, completamente alejado de los neutros que inundan su armario, y que se convertía en el centro de atención durante la bienvenida oficial al presidente brasileño.

El motivo es que Masako nunca utiliza un color tan llamativo. La emperatriz ha hecho de los neutros sus grandes aliados, dando especial relevancia a los tonos blancos, que protagonizan prácticamente todas sus fotografías de los últimos años. Hemos hecho un repaso a sus últimas apariciones públicas y entontramos solo dos excepciones en las que cambió los colores claros por un azul oscuro, ambas para las dos celebraciones públicas de los dos últimos cumpleaños de su marido.

No podemos negar que el armario de la emperatriz de Japón no suele estar en las listas de los más llamativos de las royals. En él encontramos cortes siempre muy clásicos, con el mismo tipo de trajes y vestidos y una gama de color neutra, siempre dentro de su zona de confort. Da igual que sea en citas de gala, más casuales o incluso con el traje tradicional japonés: los tonos claros siempre son los reyes.

Pero ahora, parece que Masako ha querido salir de esa zona segura y 'arriesgarse', al menos en lo que se refiere al tono. El motivo para hacer romper su propia normal solo ella lo sabe, pero el giro en el estilismo es bastante significativo.

Porque Masako no es de las royas que, como es costumbre, hacen guiños al país a través de su ropa. Diseñadores de la tierra o colores que encontramos en la bandera de la nación correspondiente son algunas de las formas en las que reinas -o princesas en menos medida- homenajean a sus anfitriones. Ni siquiera en ocasiones especiales, la emperatriz cambia sus habituales tonos.

Solo hizo un pequeño amago el año pasado, cuando realizaba, junto a Naruhito, una visita de Estado a Reino Unido. Solo al aterrizar pudimos ver un look bicolor, con algunos detalles en azul pastel sobre su traje blanco. Tampoco el año anterior, en Indonesia, se movió un ápice de su habitual línea estilística, en la que imperan los looks monocolor.

Un estilo absolutamente sobrio que comparte con su hija, la princesa Aiko, y el resto de mujeres de la familia imperial. El motivo, simplemente, es que obedece a la cultura japonesa y a la antigüedad del trono del crisantemo. La pregunta es si Masako se está rebelando ante este clasicismo. Y la respuesta es este dos piezas de un color con el que rompe las normas.