Margot Robbie, de 'sex symbol' a patinadora con sobrepeso por exigencias del guion

Margot Robbie, la actriz considerada poseedora de una piernas interminables hasta que se demostró que en 'El lobo de Wall Street' había más retoque fotográfico que realiza, ha vuelto a trucar su cuerpo por exigencias del guión.

Eso sí, ha pasado de ser una sensual intérprete de aplaudidas y piropeadas curvas, a ser una 'fofisana' con unos kilos de más en su nuevo proyecto cinematográfico 'I, Tonya', donde da vida a Tonya Harding, una patinadora olímpica que dio el salto a la popularidad no solo por sus éxitos y medallas, sino por agredir a una compañera, Nancy Kerrigan, en 1994.

De esta guisa ha sido 'cazada' la actriz, con varios kilos de más en su cuerpo, aunque se trata de mero atrezo, que nadie se asuste, porque sus curvas siguen intactas mediante un riguroso régimen y una estricta tabla de ejercicios para no perder tonificación. Este milagro se ha obrado mediante un traje especial que lleva bajo la ropa y que le hace parecer una mujer 20 kilos más voluminosa.

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