¿Eres un Marco Polo? Botsuana, Kotor y Transilvania son tus próximos destinos

Si eres de los que acabas de desembarcar y ya estás pensando en coger un tren, aunque luego vayas en avión, Botsuana en África, Transilvania en Rumanía y Kotor en Montenegro son tus próximas paradas. Lejos, muy lejos, del turismo al por mayor. Según el ranking 'Best in Travel' de Lonely Planet, estamos ante el mejor país, la mejor región y la mejor ciudad para descubrir en 2016. Nos vamos a vivir nuestro propio Fitur.

Transilvania, solo nombrarla ya es viajar

Esta región pone la miel en los labios al viajero transfronterizo más allá de la geografía. Al que le gusta colarse en las leyendas, penetrar la niebla y merodear por los castillos; a ese. No busques aquí infraestructura turística al uso ni nada que se le parezca porque esto es otra cosa, y eso precisamente lo amarás. Todo es encantadoramente rural, entre las maravillosas y perfectamente conservadas ciudades de Sighisoara, Brasov y Sibiu (juega a ver cuál te gusta más). Y todo muy muy alemán, avatares de la historia. Lo notarás en sus iglesias medievales fortificadas; a destacar las de Viscri y Biertan.

En ocasiones te parecerá que estás en un cuadro de El Bosco, cuando salgan a tu paso carros de heno tirados por caballos o rebaños de cabras. Y no te sacarás de la cabeza a Drácula, que aquí no es ficción sino realidad. Bram Stoker se inspiró en el señor feudal de los Cárpatos Vlad Tepes, alias el Empalador, todo un héroe nacional, para crear a su conde. Hay una estatua junto al ayuntamiento de Sighisoara. No te la pierdas.

Plan: tienes vuelos de Madrid a Bucarest en Rumbo a partir de 58 euros y directamente a Sibiu desde 304 euros. Para pernoctar, en medio de la ciudadela de Sighisoara te espera el Fronius Residence (13 Scolii Street), para que continúes dentro del relato medieval. Desde 95 euros.

Qué traerte: tapices, cerámica y figuras de madera querrán hacerse un sitio en tu maleta.

Kotor, el mini-Dubrovnik en el 'fiordo' del sur

Montenegro ya es exótico en sí y hasta remoto, aunque esté en el sureste de nuestra Europa, allá en los Balcanes, que siempre son un confín. Pero Kotor es, además, un secreto, a refugio en una pequeña bahía de la costa dálmata que se conoce, para mayor leyenda, como las Bocas de Kotor, por su forma cerrada, entre montañas, e incluso como “el fiordo más meridional de Europa”. Así que, imagínatelo: Kotor está rodeada de magníficos acantilados y una impresionante muralla que la hace aún más deseable. Fue refugio de barcos desde la antigüedad y hoy lo es de viajeros de pro.

La medieval Kotor, plagadita de edificios históricos y con una estampa de las de guardar, es patrimonio de la humanidad según la Unesco desde 1979. No hay más que verla. Hay callejones intrincados en los que perderse, cafés como encantados, una vida tradicional que aún pervive y una isla con iglesia, la de Nuestra Señora de las Rocas, que termina de redondear su belleza. Un Santorini aunque no tan azul y aún por descubrir, eso sí. ¿Irás de camino a Croacia o será tu destino final? ¿La verás antes o después de Dubrovnik?

Plan: encontrarás vuelos en Rumbo Barcelona-Pogdorica, la capital montenegrina, desde 196 euros. A Tivat, a cinco kilómetros de Kotor, desde 336 euros. Te puedes alojar en el hotel Casa del Mare-Amfora.

Qué traerte: prepárate para hacer acopio de encajes mediterráneos y alfombras de los Balcanes.

Botsuana: sin matar elefantes y como reyes

En efecto, no hace falta ir a Botsuana a matar elefantes. ¡No! Ni tampoco ser rey para pisar esta desconocida tierra africana, aunque nadie le puede negar a Don Juan Carlos su papel de promotor turístico oficial. Botsuana no tiene salida al mar, pero en cambio tiene una naturaleza apabullante, empezando por el delta del Okavango, que nace en Angola, y el desierto del Kalahari, que lo cubre en un 70% y por el que pasa hasta hacerse arena este río mágico, y siguiendo por el Parque Nacional de Chobe, famoso por sus manadas de elefantes, los rebaños de búfalos y cebras, y sus fabulosas puestas de sol. Es tierra de safari. Pisarás por fin la sabana, montarás en canoa, cómo no, y te hartarás de ver también antílopes, cocodrilos, jirafas e hipopótamos. Bienvenido al África soñada.

Plan: puedes viajar con Club Marco Polo, Tuareg Viatges o Catai Tours. Precio: en torno a 2.000 euros. Echa un vistazo al Xudum Okavango Delta Lodge. Te querrás quedar a dormir. Desde 760 euros.

Qué traerte: qué podemos decirte a estas alturas de la artesanía africana. Si acaso, que no te pierdas la cestería.

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