Alimentos que engordan (y que sueles incluir en tu dieta)
Antes de ponerte a hacer tu próxima compra, deberías tener en cuenta ciertas cosas para evitar algunos alimentos o productos que parecen sanos pero que en realidad no lo son
Tras regresar de vacaciones, lo primero que solemos pensar es: “Este año voy a apuntarme al gimnasio y voy a comer sano para llegar a tiempo a la operación bikini del año que viene… ¡Sí o sí!”. Es muy importante que aprendas a leer el etiquetado de los productos que compras y que no te fíes de todo lo 'light' o 'bajo en grasas'.
Los edulcorantes artificiales
Este punto está muy relacionado con el anterior, dado que muchos productos 'light' o '0%' contienen grandes cantidades de edulcorantes artificiales.
Además, según varios estudios, los edulcorantes artificiales como el aspartamo, la sucralosa y la sacarina pueden aumentar el apetito e ¡incluso los antojos!, contribuyendo así al aumento de peso o a la alteración de la salud intestinal. Así que para endulzar tus preparaciones, opta mejor por fruta fresca, dátiles, estevia, miel sin refinar o sirope natural de arce, por ejemplo. Le darán un toque de sabor a tus platos dulces y calmarán tus antojos de azúcar sin tener que meterte en el cuerpo los aditivos químicos que llevan los edulcorantes artificiales.
El pan 'integral'
¿Cuántas veces hemos escuchado decir que el pan integral es más saludable que el pan blanco? Y así es, por su alto contenido en fibra, entre otras cosas. Sin embargo, hay panes integrales que están hechos con ingredientes que no lo hacen saludable; se elaboran a partir de granos refinados.
Por ello, lo mejor en tu dieta es optar por un pan que se haya hecho con el grano entero, dado que contiene todas las partes esenciales de su semilla (el salvado, el germen y el endospermo). Al no tratar el grano, estos componentes se mantienen intactos, proporcionando más proteínas, fibras, vitaminas y minerales esenciales. ¿Cómo puedes estar seguro de que estás recibiendo los granos enteros? Muy fácil: lee cuidadosamente las etiquetas. Si el primer elemento de la lista de ingredientes es 'harina refinada' o 'harina de trigo', no estás obteniendo pan 100% integral. Ese primer ingrediente debería ser harina integral y el resto de harinas o cereales también deberían incluir la denominación “integral'.
El muesli de bolsa
¿Sabías que el muesli que encontramos en los supermercados suele tener una enorme cantidad de azúcar y de calorías vacías? Una porción tradicional de 1 taza puede contener cerca de 600 calorías y 20 gramos de azúcar… Y lo malo es que darle al cuerpo tanto azúcar por la mañana puede tener efectos perjudiciales para la salud… Si no puedes vivir sin el crujir de tu muesli favorito por las mañanas, te recomendamos que te hagas tu propia mezcla en casa con ingredientes nutritivos como los copos de avena, los frutos secos, las semillas y la fruta seca, por ejemplo.
¡Te dejamos nuestra receta para que la prepares en casa: es mucho más sencilla de lo que creías!
Los zumos de fruta
¿Eres de los que necesita tener un zumo de frutas en tu mesa para sentir que tu desayuno está completo? Pues cuidado con los que se venden en los supermercados, suelen tener una lista tan larga de ingredientes añadidos que pierden sus beneficios. Por otro lado, suelen estar repletos de azúcares y pierden la fibra de la fruta entera, que ayuda a reducir la absorción de azúcar en la sangre. Opta mejor por la fruta entera como las naranjas, las manzanas y las uvas, por ejemplo, porque no solo aportan muchísimas vitaminas y minerales, sino que son ricos en fibra. Y si eres de los que prefiere 'beberse la fruta', mejor prepárate un zumo natural en casa.
Los productos 'light'
Cuando empezamos a cuidarnos o estamos haciendo una dieta baja en grasas, lo primero hacia lo que se nos va la mirada es hacia los alimentos '0%' o 'light'. Pero, ¡ojo!, porque los que no contienen grasa no son saludables por definición. De hecho, como a menudo carecen de sabor, las compañías de alimentos emplean otros ingredientes como el azúcar, espesantes y sodio, para darles ese toque que tanto nos engancha.
Por ello, debes SIEMPRE mirar las etiquetas y tener en cuenta que cuando hablamos de grasas, no todas son iguales: las grasas 'buenas' como las grasas monoinsaturadas y poliinsaturadas mejoran el colesterol en sangre y aumentan la sensación de saciedad.
Así que, en lugar de comprarte una bolsa de 'patatas light', prueba a hacerte unos chips de verdura en casa con zanahorias, calabacines o berenjena.
Tras regresar de vacaciones, lo primero que solemos pensar es: “Este año voy a apuntarme al gimnasio y voy a comer sano para llegar a tiempo a la operación bikini del año que viene… ¡Sí o sí!”. Es muy importante que aprendas a leer el etiquetado de los productos que compras y que no te fíes de todo lo 'light' o 'bajo en grasas'.