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De Mario Badescu a Ziaja: las marcas de Europa del Este vienen pisando fuerte
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Sin salir del continente

De Mario Badescu a Ziaja: las marcas de Europa del Este vienen pisando fuerte

Hungría, Polonia, Rumanía… Los países de Europa del Este se han colado en los primeros puestos de la cosmética

Foto: La modelo polaca Malgosia Bela. (Imaxtree)
La modelo polaca Malgosia Bela. (Imaxtree)

¿Qué pueden tener en común Anastasia Beverly Hills y Mario Badescu? Conoces sus nombres, puede que las hayas probado, desde luego sabes dónde comprarlas y no es ningún secreto que todas las celebrities las adoran, pero ¿sabías que se trata de marcas de rumanas?

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Hasta ahora, el Olimpo de la cosmética tenía muy pocas nacionalidades. Francia y Estados Unidos dominaron durante años el mercado, mientras poco a poco Japón y la incipiente K-Beauty coreana iban escalando puestos. Tras la globalización, el mercado se abrió un poco más y con la llegada de la cosmética natural, la accesibilidad a todo tipo de cosméticos logró que dejáramos de prestar atención al ‘made in…’.

placeholder Barbara Palvin es una de las modelos húngaras de mayor proyección internacional. (Imaxtree)
Barbara Palvin es una de las modelos húngaras de mayor proyección internacional. (Imaxtree)

Pero detrás de muchas marcas de belleza que consumimos a diario hay más europeos de los que podamos imaginar. Muchos de ellos inmigrantes o hijos de inmigrantes de Rumanía o Polonia, llegaron a Estados Unidos, Australia, etc, y desarrollaron allí sus tratamientos tradicionales. La primera emprendedora fue Helena Rubinstein. Natural de Cracovia (Polonia), Helena emigró a Australia, donde levantó su imperio cosmético, sacándolo a bolsa y multiplicando su valor.

Polonia, la nueva fuente de la belleza

La cuna de este resurgimiento de la cosmética europea comenzó en Polonia. La perfecta tez de Rubinstein, debida a las cremas polacas que metió en la maleta, despertó la curiosidad de las australianas. Su mente de empresaria la llevó a comercializar la crema, traer desde Polonia a sus creadores y comenzar su imperio de la nada. Eso sí, para continuar aprendiendo y mantener intacto el core de su marca, Helena Rubinstein viajó por toda Europa para contar con el ‘savoir faire’ y la materia prima del Viejo Continente.

placeholder Crema de noche de Helena Rubinstein.
Crema de noche de Helena Rubinstein.

En la imagen, Collagenist Re-Plump Night Anti-Wrinkle Filling Care de Helena Rubinstein (116€ en Amazon)

Años más tarde, las marcas cosméticas polacas han vuelto a dar que hablar. Una de las firmas más populares no solo en Polonia, sino en toda Europa es Ziaja. Calidad y precio se ponen al servicio del consumidor. Ingredientes de moda como la leche de cabra, ceniza de la isla de Jeju o manuka se acercan a nuestra piel con fórmulas muy cómodas y a precios muy asequibles, lo que ha convertido a Ziaja en una de las marcas más vendidas y buscadas de internet.

El matrimonio de farmacéuticos Aleksandra y Zenon Ziaja desarrollaron la marca con tres premisas: 1. Elaborar cosméticos para el cuidado de la piel con fórmulas muy sencillas y basándose en las necesidades de la piel del clima de la costa polaca. 2. Que los productos se basaran en ingredientes naturales, en su mayoría de la región de Pomerania, al norte de Europa y de donde eran originarios. 3. Que sus cosméticos estuvieran renovándose constantemente, evolucionando según los avances.

placeholder Crema corporal con leche de cabra de Ziaja.
Crema corporal con leche de cabra de Ziaja.

En la imagen, Leche de Cabra Emulsión Corporal de Ziaja (4,90€)

Otra marca polaca, en este caso de maquillaje, es Inglot. Antes de que Cristina Pedroche se convirtiera en su embajadora, Inglot ya era utilizada por profesionales y aficionados por sus buenos resultados. Sus paletas con imanes que tú mismo puedes personalizar, ofrecen la oportunidad de no tener que cargar con cientos de cosméticos encima, de nuevo la belleza al servicio del consumidor. Y Cracovia fue el origen de todo. El fundador de Inglot, Wojciech Inglot, estudió química en su universidad y tras la caída del comunismo en Polonia, comenzó a desarrollar su marca. En la imagen, sombra de ojos de Inglot (21€).

placeholder Sombra de ojos en pigmento de Inglot.
Sombra de ojos en pigmento de Inglot.

Hungría, el lujo de Hollywood

Pero, además de Polonia, otro país ha comenzado a dar que hablar en el mundo de la cosmética, sobre todo en Hollywood, donde las celebrities no se cansan en presumir de sus cosméticos húngaros.

En los últimos años, seguro que has visto cómo Instagram se llenaban de profesionales del cuidado de la piel y estrellas del celuloide mostraban sus tocadores repletos de Omorovicza. El secreto del éxito de esta marca reside en los baños termales de Rácz en Budapest, manantial de agua rica en minerales, cuyas propiedades curativas se han utilizado desde hace 2.000 años.

Margaret y Stephen de Heinrich de Omorovicza visitaron los baños termales y encontraron en su agua la esencia de su marca. Tras trabajar con un laboratorio húngaro de dermatología galardonado con el premio Nobel, Margaret y Stephen fueron pioneros y patentaron el sistema Hydro Mineral Transference™, que reconfigura la estructura molecular de los minerales en las aguas curativas y favorece que los minerales penetren en las capas más profundas de la piel… El resto es historia.

placeholder Mascarilla limpiadora de Omorovicza.
Mascarilla limpiadora de Omorovicza.

En la imagen, Deep Cleansing Mask de Omorovicza (80€).

Casi partiendo de la misma base del agua termal, aparecen en el mercado los jabones de Zador, creadores por dos amigos húngaros en una fábrica familiar. El origen de todo está en la Meseta de Balaton, de la que se extraen los ingredientes vegetales y el agua termal que sus creadores denominan “el tesoro nacional húngaro”. Siguiendo el mismo proceso con el que se hacían los jabones franceses en 1700, pero añadiendo un último paso para adaptar la pastilla de jabón, Zador aúna en cada uno de sus jabones manteca de karité y vitamina E para asegurar la correcta hidratación de la piel.

Por supuesto, la esencia de cada pastilla es el agua termal del lago Hévíz, Patrimonio de la Humanidad y el mayor lago de agua caliente curativa de Europa, cuyas bondades van desde “la cura de las articulaciones y los músculos doloridos a aliviar la piel irritada o afectada por el eccema y fortalecer las uñas y el cabello”, explican desde Zador.

placeholder Pastilla de jabón de Zador.
Pastilla de jabón de Zador.

En la imagen, pastilla Pure de Zador (12€).

Los nombres propios vienen de Rumanía

Continuando al este de Europa, llegamos a Rumanía, país al cual las Kardashian le deben mucho. Y es que si a Albania le deben a su maquillador estrella, Mario Dedivanovic (nacido en Bronx pero de ascendencia albana), a Rumanía su marca estrella para el control del acné, Mario Badescu, y el mejor diseño de cejas que se puedan hacer en casa, Anastasia Beverly Hills.

De nuevo la historia se repite. Mario Badescu llegaba a Nueva York con todo su expertise europeo para desarrollar sus cosméticos para el cuidado de la piel. Su salón de belleza comenzó a ser frecuentado por la élite neoyorquina, lo que se transformó en una exitosa marca de cosméticos de 1967 que continúa de moda en la actualidad.

placeholder Bruma hidratante de rosas de Mario Badescu.
Bruma hidratante de rosas de Mario Badescu.

En la imagen, spray facial de aloe vera, plantas aromáticas y agua de rosas de Mario Badescu (8,95€).

Algo parecido es el caso de Anatasia Soare, rumana a la que probablemente conozcas por su millonaria marca Anastasia Beverly Hills. Inmigrante en los Estados Unidos desde 1989, tras años como maquilladora profesional, le pasó como a muchos estilistas, no encontraba los cosméticos que se adaptaran a sus necesidades, por lo que los desarrolló ella misma. Su éxito y fama llegaron con sus personalizables diseños de cejas que se basaban en la estructura ósea de cada una de sus clientas, lo que le valió la popularidad entre las mejores modelos de los 90. En la actualidad, sus paletas de sombras de ojos son las que vuelan de los escaparates y, según Forbes, se estima que al año venda alrededor de 375 millones de dólares.

placeholder Lápiz de cejas de Anastasia Beverly Hills.
Lápiz de cejas de Anastasia Beverly Hills.

En la imagen, el lápiz de cejas Brow Wiz de Anastasia Beverly Hills (29,95€)

Ucrania y Bulgaria, pasión por lo natural

Tras descubrir lo buena que es el agua termal húngara o a los visionarios residentes de Cracovia, hay que hablar de la cosmética natural, donde la firma ucraniana Yaka y las búlgaras Wooden Spoon y Alteya comienzan a hacer mucho ruido. Yaka recupera los ingredientes que se utilizaban para cuidar piel y cuerpo en Ucrania en la antigüedad.

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Productos elaborados con ingredientes 100% naturales y orgánicos, cuyas propiedades se adaptan a las necesidades del adverso clima ucraniano. “Desde la antigüedad, nuestros antepasados usaban manzanilla, celidonia, tomillo, caléndula y aloe con fines terapéuticos y cosméticos”, a los que han incorporado las innovaciones de la industria cosmética.

placeholder Acondicionador para el cabello de Yaca.
Acondicionador para el cabello de Yaca.

En la imagen, acondicionador reparador con aloe vera de Yaka (no disponible en nuestro país).

Para hablar de la cosmética búlgara hay que hablar de su ingrediente más conocido de forma internacional: la rosa de Bulgaria. De su esencia y de su agua se desprenden prácticamente los mejores cosméticos del país. Wooden Spoon solo utiliza ingredientes sin procesar, extractos herbales, semillas y, por supuesto, aceite de rosas.

placeholder Protector solar de Wooden Spoon.
Protector solar de Wooden Spoon.

En la imagen, protector solar familiar con SPF50 de Wooden Spoon (a partir de 14€).

Por otro lado, Alteya Organics cultiva sus propias rosas y lavandas para elaborar su propio aceite de rosas orgánico que supone la base de todos sus cosméticos. En la imagen, Bio Damascena Rose Otto Night Moisturizer de Alteya (40,99€), hidratante con aceite de rosa damascena y aceite de Pracaxi para mantener la correcta humectación de la piel y repararla durante la noche.

placeholder Aceite nocturno de rosas de Alteya.
Aceite nocturno de rosas de Alteya.

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El sureste también tiene mucho que decir

Como si hubiéramos trazado una línea vertical en el mapa de Europa, tampoco nos olvidamos de Grecia, cuna de Apivita, una de las marcas más respetadas por los consumidores y los profesionales.

Se sustenta en la miel como fuente de vida y de salud, de ahí su nombre y fue creada en los 70 por dos farmacéuticos griegos, Nikos and Niki Koutsiana, que siguiendo las enseñanzas de la filosofía griega, comenzaron a desarrollar jabones con propóleos y extractos de hierbas, y hoy venden cosméticos para rostro, cuerpo y cabello en todo el mundo. En la imagen, champú de menta y própolis para requilibrar los cabellos grasos, Oil Balance Shampoo de Apivita (13€).

placeholder Champú reequilibrante de Apivita.
Champú reequilibrante de Apivita.

El futuro de la cosmética también está en Europa, ha llegado el momento de que los cuidados de nuestra piel viajen por todo el continente.

¿Qué pueden tener en común Anastasia Beverly Hills y Mario Badescu? Conoces sus nombres, puede que las hayas probado, desde luego sabes dónde comprarlas y no es ningún secreto que todas las celebrities las adoran, pero ¿sabías que se trata de marcas de rumanas?

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