Los 5 bolsos de lujo en los que sí merece la pena invertir
Descubre qué complementos han hecho historia en el mundo de la moda
El universo de la moda nos trae cada temporada (e incluso mucho más a menudo) tendencias y novedades que hacen que el sector esté en un constante movimiento. Una evolución que vemos sobre las pasarelas, en las tiendas, las redes sociales y nuestra vida cotidiana. Lo que antes era un básico, hoy ya no se lleva.
Sin embargo, existen piezas que de una manera natural van subiendo escalones en la historia hasta convertirse en dioses del Olimpo de la moda. No importa la generación, década o ciudad en la que vivas, estos iconos atemporales perdurarán.
Por desgracia, en la mayoría de casos no se trata de piezas de precios asequibles, sino de todo lo contrario. Se trata de diseños que no están dentro del rango de precios habitual de nuestras compras, pero para los que quizás quieras ahorrar o sumar varios regalos.
Así, si estás pensando en invertir en un bolso de lujo, te vamos a dar cinco ideas maravillosas para comprar clásicos que nunca pasarán de moda (ni bajarán su precio). Por ejemplo, como ocurre en el caso del modelo Puzzle de Loewe diseñado por Jonathan Anderson.
La firma española cuenta con un éxito irrefutable como el Amazona, pero esta otra propuesta ha ido ganando poco a poco su condición de bolso icónico. A la venta desde 1.400 euros, según modelo y color, seguirá triunfando en los armarios más estilosos del futuro.
Bottega Veneta, casa de moda italiana fundada en 1966, también cuenta con un diseño en el que merece la pena invertir. Nos referimos, cómo no, al modelo The Knot, que está disponible en una amplia variedad de colores y tejidos desde 1.550 euros (el modelo strech).
Una cartera de mano con un característico trenzado que hemos visto lucir a numerosas royals como a Kate Middleton, la princesa Mary Donaldson de Dinamarca, la reina Letizia o Máxima de Holanda.
Pasamos ahora a Le Pliage, el bolso creado por Longchamp inspirándose en el origami. Una propuesta plegable y ligera que se ha convertido en un objeto de culto en todo el mundo.
Disponible desde los 100 euros, aunque si es una edición limitada o de cuero su precio aumenta, es una opción perfecta para lucir un clásico de la moda en nuestro día a día de forma cómoda y versátil.
No podía faltar en una selección de este tipo el bolso Kelly de Hermès. Si hablamos del Olimpo de los accesorios, nos atreveríamos a situar este diseño entre los grandes dioses del estilo.
Creado en 1930, su auténtico boom llegó en la década de los 50 gracias a Grace Kelly (por la que rebautizaron el nombre de forma oficial en 1977). Su exclusividad va más allá del dinero: si consigues reunir los 10.000 euros de media que puede costar, tendrás que apuntarte a la lista de espera que hay para adquirirlo.
Solo entonces podrás ir a París, donde se realizan los encargos dos veces al año, tras lo que tendrás que esperar casi otro año entero para que esté listo. Eso sí, es toda una inversión, porque algunos modelos han superado los 200.000 euros en reventas de segunda mano.
Por último, no podíamos despedir esta lista sin hablar del modelo 2.55 de Chanel, disponible desde 3.000 euros. Una creación que más que un bolso es parte de la historia de la moda que ahora ha dado un paso más allá.
Así lo demuestra la firma francesa al lanzar Chanel 19. Una línea, a partir de 4.000 euros, donde se rinde homenaje a su predecesor. Demostrando que el 2.55, creado en 1955, es fuente de inspiración continua.
Sabemos que no son compras que podamos hacer todos los días, al menos en nuestro caso, pero si puedes o te apetece hacer este desembolso, no creas que es solo un capricho fashion.
Si eliges adquirir los modelos adecuados, como los que te hemos propuesto, el mercado de bolsos de lujo es un valor seguro tanto en tiendas oficiales como de segunda mano.
La mayoría de diseños no solo no pierde valor, sino que incluso pueden aumentarlo muchísimo al convertirse en joyas vintage. Una razón más para rendirse a los encantos de estas piezas tan especiales.
El universo de la moda nos trae cada temporada (e incluso mucho más a menudo) tendencias y novedades que hacen que el sector esté en un constante movimiento. Una evolución que vemos sobre las pasarelas, en las tiendas, las redes sociales y nuestra vida cotidiana. Lo que antes era un básico, hoy ya no se lleva.