Versace rememora la fiebre de los años 90 con el corsé como protagonista
La firma italiana presentaba durante la Semana de la Moda de Milán su nueva colección de mujer otoño-invierno 2022, ‘Focus’, una oda a la liberación y el misterio
Que la naturaleza regalase a nuestro país vecino una geografía con forma de bota, no fue un hecho casual. Italia no solo es la cuna de la estética y el arte clásico, sino que también se ha convertido en uno de los puntos neurálgicos y más influyentes para el mundo de la moda; gracias, en parte, a creadores magnéticos como los hermanos Versace.
La marca italiana, reconocida internacionalmente por la cara de Medusa, demostraba de nuevo sobre la pasarela de Milán el por qué de su larga historia. Su colección femenina de otoño invierno 2022, llamada ‘Focus’, reinterpretaba bajo una visión noventera la reconocida estética de la firma: diseños negros ajustados llenos de sensualidad, elaborados con materiales selectos, y piezas de colores llamativos con cortes muy cuidados, que parecen diseñadas para la propia Barbie.
El corsé, una de las prendas estrella de la próxima temporada, se convertía en el hilo conductor de la propuesta y protagonizaba numerosas de las piezas mostradas durante el show: tops, los icónicos mini vestidos, diseños lenceros largos, trajes, camisas… Potenciando así uno de los sellos de identidad de la marca: la figura femenina, consiguiendo impresionantes siluetas en forma de reloj de arena.
No era difícil trasladarnos a la fiebre del sábado noche debido a la recreación de una enorme pista de discoteca roja, bajo una estructura led laberíntica con iluminación entre cortada de efectos psicodélicos. Sin embargo, la enorme presencia de pantalones de tiro bajo y las cadenas metalizadas completaban el trabajo de devolvernos a la época del discman.
‘Focus’ representa un grito a la fantasía y la moda de calidad, que demuestra que siempre existe algo por descubrir. Donatella Versace reinterpretaba la sastrería clásica mediante modelos de trenches oversize y conjuntos dos piezas con estampado de pata de gallo, elaborados en colores vivos, para subirse al barco de la recargada estética Y2K.
Una lucha por conquistar al público más joven que también se observaba a través de la inclusión de diseños rendidos a la logomanía, mediante su monograma ‘La Greca’, una versión del patrón de clave griega similar al laberinto de Balmain, y de la presencia del escuadrón de modelos actuales más reconocidas: las hermanas Hadid, Lila Grace y Emily Ratajkowski; las cuales acumulan millones de seguidores en sus RRSS.
Sin embargo, Donatella no renunciaba a su pasado y rendía homenaje a su hermano a través de la presencia generalizada de mallas de látex como complemento a los modelos. Una recuperación de la polémica apuesta de aire bondage, que realizó Gianni en los hermanos 90 y que ensalzó a la firma italiana al olimpo de los dioses de la moda.
Además, la nueva colección otoño-invierno 2022 plasmaba a la perfección con sus modelos esa extraña simbiosis entre lo glamuroso y lo decadente tan representativa de la marca. Versace no hace ropa intocablemente elegante, sino que crea piezas artísticas destinadas a las sesiones fotográficas más gamberras.
Estrellas invitadas
Los rostros internacionales más mediáticos, que mantienen una estrecha relación con la marca, no quisieron perderse el evento y crearon un front-row de lo más variopinto.
No podía faltar la outsider de moda italiana más reconocida. Chiara Ferragni acudía acompañada de su marido Fedez, luciendo un arriesgado estilismo compuesto por un conjunto denim rematado por un top bandana y unas medias de rejilla.
Tampoco quiso ser baja la cantante Kylie Minogue que asistía enfundada en un elegantísimo vestido blazer negro de la firma.
A ella se sumaron las gemelas Spencer que mantuvieron la estética clásica, gracias a sus dos minivestidos. Amelia se decantó por modelo negro de manga corta con falda de vuelo, mientras que Eliza prefirió escoger un diseño lencero rosa más atrevido.
Por último, la mujer del momento, Julia Fox, nueva pareja de Kanye West, también hizo acto de presencia y captó la atención de los asistentes con un conjunto negro de látex de clara inspiración bondage.
Que la naturaleza regalase a nuestro país vecino una geografía con forma de bota, no fue un hecho casual. Italia no solo es la cuna de la estética y el arte clásico, sino que también se ha convertido en uno de los puntos neurálgicos y más influyentes para el mundo de la moda; gracias, en parte, a creadores magnéticos como los hermanos Versace.