Lágrimas de la madre de David Delfín en un homenaje en Marbella al modisto

David Delfín ha sido reconocido con la medalla de Marbella a título póstumo, a cinco meses de cumplirse el primer aniversario de su muerte. Un galardón que se une al de hijo predilecto de la provincia de Málaga, tras la aprobación por unanimidad de todos los grupos políticos, menos Costa del Sol Sí Puede (CSSP), representación de Podemos, en el pleno que se ha celebrado este viernes por la mañana en el consistorio.

La nota de emoción la puso doña María, madre del diseñador, que no pudo evitar las lágrimas que hicieron vibrar a políticos y asistentes. El salón de plenos solo tuvo palabras de elogio para el modisto. Las más emotivas fueron las del exalcalde José Bernal​, que puntualizó: “David era mi amigo y, como muchos entonces, no quería quedarse en Marbella y se fue a hacer posibles sus años fuera de las paredes del pueblo. Y lo hizo bien, muy bien, porque que hizo su nombre internacional”.

Aunque Delfín, Premio Nacional de Diseño de Moda, nació en Ronda, vivió desde muy niño en Marbella. “Él llevaba el nombre de Marbella por donde viajara. El buen nombre de nuestra ciudad", significó el político socialista. En el acto estuvieron los familiares del diseñador y sus hermanos.

Audaz y valiente

Fue la alcaldesa de Marbella, Ángeles Muñoz, la que propuso al pleno la concesión de la Medalla de la Ciudad oficialmente. La edil resaltó la "audacia, valentía y compromiso social" de la obra de Delfín. Definiéndole como un "artista innovador" que destacó en campos como la moda, la fotografía, el vídeo y la música, y cuyo trabajo "debe quedar en la memoria de todos".

En su discurso durante el pleno, la regidora tuvo palabras para subrayar los dones del modisto: “Tenía una estética contemporánea en todo lo que tocaba, con una identidad española mezclada con su propio estilo vanguardista”. La edil recordó su trato con David: “En el 2008 vivimos su trabajo en el Centro Cultural Miraflores de Marbella y le vimos disfrutar personalmente. Nos dejó huella, porque conocimos al artista y la persona. Durante el corto tiempo a nuestro lado ha dejado un gran legado. Con esta medalla premiamos singularidad y esfuerzo. Por derecho, es su premio para honra de él y sus amigos”.

Doña María le puso su primer dedal

María González, la madre del diseñador, fue la que le enseñó tanto con los primeros dedales en el mundo de la costura y ahora es feliz con los reconocimientos que le están haciendo a su hijo.

Desde su fallecimiento el pasado mes de junio, el dolor que le acompaña su pérdida se compensa con que el diseñador no haya dejado de recibir honores y distinciones. Ahora podrá guardar en su salón un galardón más del pequeño de sus hijos. La calle del Sol lucirá con más brillo ahora con otra medalla para el sastrecillo Delfín.

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