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El discreto millonario español que hay detrás de la polémica Cabify
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CONFLICTO GREMIAL

El discreto millonario español que hay detrás de la polémica Cabify

Fundó la empresa que ha sido objeto de la ira de los taxistas cuando tenía 32 años. Vive en un piso de poco más de 70 metros cuadrados del barrio de Tetuán, en Madrid, y está recién casado

Foto: Juan de Antonio Rubio, fundador de Cabify. (EFE)
Juan de Antonio Rubio, fundador de Cabify. (EFE)

No es más que un tipo normal y corriente, aseguran. Brillante, sí, pero "normal". Juan de Antonio Rubio (39) es el nombre anónimo que está detrás de Cabify. Fundó la empresa en 2011, hoy está valorada en 1.400 millones de euros. Un chaval procedente de una familia de clase media de La Velilla, cerca de Pedraza (Segovia), donde su familia regenta un hotel rural. Él no está en el imaginario colectivo, a pesar de ser uno de los protagonistas de la huelga de taxis que viven estos días las ciudades españolas.

[LEER MÁS: Los taxistas mantienen la huelga indefinida tras no llegar a un acuerdo con Fomento]

De Antonio se casó en enero de 2018 con su novia mexicana, pero no fue noticia. Vive una existencia semianónima en un barrio popular de Madrid. Ni siquiera llega al millar de seguidores en Twitter, donde su actividad es reducidísima. La última vez que colgó algo fue el 22 de junio del año pasado, cuando quiso 'hablar' con Pablo Iglesias a través de un comunicado: "Me llamo Juan y no vivo en San Francisco ni en Galapagar, vivo en Tetuán. Sí, estudié dos años cerca de San Francisco apoyado por una beca Fulbright y un crédito del Ministerio de Educación que todavía estoy pagando. Como no podía ser de otra forma, siendo alguien que viene de la enseñanza pública y ama a su país, Cabify paga en España el 100% de los impuestos de su actividad económica y mantenemos aquí la propiedad intelectual de la tecnología que desarrollamos".

placeholder Juan de Antonio, en una charla en Argentina. (EFE)
Juan de Antonio, en una charla en Argentina. (EFE)

Juan de Antonio compaginó trabajos esporádicos como repartidor o camarero con sus estudios de Telecomunicaciones en la Politécnica de Madrid. Después de trabajar en consultoría y de la beca Fulbright se lanzó al emprendimiento. Primero exploró el campo de los vehículos eléctricos, pero aquello terminó en un fracaso, tal y como explicó en 'El Español' en una de las escasas entrevistas que ha dado. Por fin, en 2011 dio a luz a una 'startup' que iba a revolucionar el sector del transporte privado, Cabify.

Por la Dehesa de la Villa

Hoy operan en casi toda América Latina, pero Juan de Antonio sigue viviendo en un piso cercano al metro Alvarado (Madrid) de poco más de 70 metros cuadrados. Ha vivido también en Vallecas y en Chamberí, pero volvió a Tetuán, un barrio que conoce bien porque de pequeño residió allí con sus padres. Ahora lo comparte con su mujer, una mexicana que intenta seguir su endiablado ritmo de vida, que incluye viajes continuos a Latinoamérica. Con ella cría dos perros, a los que pasean por la Dehesa de la Villa.

Ni siquiera su alianza con uno de los inversores con más olfato y más conocidos de la prensa rosa (y salmón) ha sacado a Juan de Antonio de su habitual anonimato. A finales de 2017, Rosauro Varo (propietario de la firma GAT Inversiones) y Cabify estrecharon lazos, y hoy el marido de Amaia Salamanca y Juan de Antonio controlan de forma conjunta una filial llamada Vector Ronda Teleport, destinada a la gestión de licencias de arrendamiento de vehículos con conductor (VTC). De Antonio ejerce como presidente, Varo como vicepresidente y Juan Ignacio García como consejero delegado.

El otro millonario

El caso de De Antonio se sale mucho del guion de los millonarios relacionados con las polémicas licencias VTC. Por poner un ejemplo, hablaremos del fundador de Uber, Travis Kalanick. El millonario (vendió parte de sus acciones de la empresa, obteniendo 1.160 millones de euros) tuvo que dimitir como CEO en 2016 en medio de un escándalo por su tóxica forma de llevar las riendas de la empresa. Pero eso es otra historia...

No es más que un tipo normal y corriente, aseguran. Brillante, sí, pero "normal". Juan de Antonio Rubio (39) es el nombre anónimo que está detrás de Cabify. Fundó la empresa en 2011, hoy está valorada en 1.400 millones de euros. Un chaval procedente de una familia de clase media de La Velilla, cerca de Pedraza (Segovia), donde su familia regenta un hotel rural. Él no está en el imaginario colectivo, a pesar de ser uno de los protagonistas de la huelga de taxis que viven estos días las ciudades españolas.

Rosauro Varo