Rosalía en los Goya: no solo impacta en la música, también en el photocall

Que Rosalía no sigue convenciones es algo que cualquiera de sus seguidores conoce a la perfección. A la cantante le gusta reinterpretarlo todo, y esto también incluye la alfombra de los Premios Goya. Lejos de presentarse con un vestido de princesa con falda de vuelo o un diseño lleno de brillos, ella ha optado por pasar del convencionalismo plantándose una creación que ha levantado tanto amor como odio.

La cantante de 'Malamente' se ha decantado por un vestido de Juan Vidal de inspiración oriental, tal como ella misma ha relatado. Cierto es que el diseño nos recuerda a un kimono, con escote cruzada, cintura marcada con una gran cinta que acaba con un lazo y mangas abullonadas. Sin duda, una opción con la que ha roto la tónica de vestir de largo, siendo de las pocas que se ha atrevido a mostrar piernas.

Rosalía ha combinado su estilismo con unos calcetines por encima de las rodillas y unos zapatos con maxiplataforma en ante negro. Un total black look que no ha convencido a muchos, precisamente por no seguir la 'etiqueta' de los Goya que pide trajes de gala, y que ha sido amado por muchos otros que ven en la cantante una manera diferente de hacer las cosas, sin tanto artificio.

Y es que Rosalía tampoco ha querido 'arreglarse' demasiado. Ella es de la de menos es más. Guapísima, eso sí, ha optado por llevar su melena lisa y un maquillaje de lo más sencillo y natural, destacando los labios con un brillo y los ojos con sombras cálidas.

Veremos si para la actuación cambia de vestuario...