Belén Esteban y Miguel Marcos: en la salud, en la enfermedad... pero no en los negocios

Suma y sigue. La boda de Belén Esteban volverá a estar hoy de plena actualidad, cuando las revistas revelen los detalles desconocidos de sus dos vestidos nupciales, los invitados en los que no se había reparado y otros secretos -si es que aún los hay- del mediático enlace. El color blanco parece sentarle inmejorablemente bien a Belén y, de paso, a Telecinco, que ha sabido traducir este nuevo 'belenazo' (una categoría en sí misma) en audiencia. Todos contentos.

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Además, obviando el festín mediático, el trasfondo emocional del asunto también tiene su miga. Esteban ha encontrado en Miguel Marcos, un conductor de ambulancia semidesconocido, el descanso tras un intenso viaje vital. Él, más joven que ella y un tanto abrumado ante la expectación que despierta su vida privada, permanece como puede en un segundo plano. No pertenece al universo profesional de la televisión ni lo pretende. La mejor muestra, su ausencia de la exclusiva que la colaboradora ha concedido a 'Hola'. Belén es una novia sin novio.

Tampoco hay ni rastro de él en el patrimonio público de la colaboradora televisiva. El nombre de Belén Esteban aparece vinculado a tres empresas en el Registro Mercantil. La más antigua es Beandre Patrimonial, que se constituyó en el verano del año 2000. Hace una semana se procedió al cierre de su hoja registral y no tiene actividad desde hace años.

En 2005, Esteban constituyó Producciones Bem, una sociedad limitada de la que es administradora única y que funciona como una agencia de publicidad. Tampoco parece tener demasiada actividad. Algo más viva está Bem Imaging SL, otra empresa con fines publicitarios que fundó en el año 2010. Las cuentas de esta última entidad no son espectaculares. En 2017 declaró unas ventas de 329.997 euros, pero los resultados finales se quedaron en poco más de 9.000 euros.

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En todos los casos Belén es administradora única y accionista mayoritaria. No aparecen el nombre de su marido ni de ninguno de sus familiares (solo uno de sus hermanos, Francisco José, fue administrador de Bem Imaging hasta 2015) en su patrimonio. Tampoco en las dos casas que posee en Madrid, sus únicas propiedades inmobiliarias.

Una de ellas es su casa de Paracuellos del Jarama. Con cerca de 280 metros construidos en 400 metros de parcela, el chalé cuenta con cuatro plantas, garaje, bodega y varias terrazas. Casas similares se venden en el portal inmobiliario Idealista por un precio que ronda el medio millón de euros. Su otra propiedad es una casa en la urbanización Natura, en Villanueva del Pardillo, que le 'ganó' a su exrepresentante Toño Sanchís tras la batalla legal que mantuvieron el año pasado.

El domicilio de Toño estaba embargado. La subasta pública se realizó el pasado mes de febrero y en ella también participó Esteban, en una estrategia para aumentar el valor del inmueble. Su actuación funcionó, ya que se quedó solo 1.000 euros por debajo de la ganadora de la vivienda. Sin embargo, la mujer rechazó quedarse con la casa en el último momento alegando que desconocía que pesaba sobre ella una hipoteca. Resultado: la casa se la quedó la segunda pujante, Belén Esteban.

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La colaboradora televisiva no dispone de más patrimonio, al menos que se sepa. El año pasado tuvo que vender un piso y otros enseres para saldar una deuda con la Agencia Tributaria que, según se publicó, ascendía a 700.000 euros (medio millón más la multa y los intereses). Esto, a pesar de llevar toda una vida trabajando en los medios de comunicación. Está por ver en qué invertirá lo ganado con la exclusiva de su boda.