Aitor Gómez, la verdad sobre el yerno de José Bono, a quien defiende con orgullo

José Bono Rodríguez y su novio, Aitor Gómez, pusieron la pasada tarde del martes 7 de abril, concetamete a las 19.50, una denuncia en una comisaría de Madrid contra diversos perfiles de Twitter que acusaban al segundo de haber ejercido de intermediario en la compra de un test para la detección del coronavirus que han sido ineficaces.

"La noticia que algunos calumniadores divulgan en las redes referidas a Aitor Gomez Mesa, imputándole conductas delictivas, es una falsedad sin fundamento alguno", decían a Vanitatis personas de su entorno minutos después, pero ayer miércoles era el propio expresidente de Castilla La Mancha y exministro de Defensa José Bono quien a través de una videoconferencia decidía dar la cara por el que va a ser su yerno próximamente.

José Bono no se andaba con paños calientes ni eufemismos: "Hemos tenido que padecer un bulo que insinúa que el novio de mi hijo José hacía negocios sucios en esta tragedia. No tengo ninguna duda de que esto es un ataque contra mí, pero un ataque homófobo, porque esta gentuza es también homófoba. Detrás de este bulo, lo que está es la homofobia. Si mi hijo en vez de novio tuviese novia, las cosas las hubieran tenido que decir de otra manera".

Manifiestamente enfadado, Bono añadió: "Para que lo sepa el facherío y las ratas de dos patas: estoy muy orgulloso de mi hijo José y de su novio Aitor. Y estoy muy orgulloso de que ayer Aitor fuese a la comisaría de Policía a denunciar a estas ratas de dos patas sebosas. Casi todo el mundo sabe ya cómo se llaman y dónde están", concluyó el exministro desde su confinamiento en la localidad albaceteña de Salobre.

Esta situación ha llegado a José y Aitor en un momento muy delicado por la pandemia, que están pasando con una amiga que en el momento del decreto de estado de alarma estaba en casa con ellos, según desveló el hijo del exministro a Europa Press y donde destacó, además, que la convivencia está resultando perfecta, cuando ya ha comenzado la cuenta atrás de su boda que, si nada lo impide, se celebrará el 20 de junio en Toledo, como ya habían anunciado el pasado mes de noviembre.

Aitor se ha caracterizado por una enorme discreción y es periodista de profesión, aunque ahora está dedicado al mundo de la joyería. Licenciado en la Universidad Carlos III de Madrid, fue becario primero en Pozuelo Radio, en 2014, al año siguiente en el periódico Madrid es noticia, y en 2016 en la agencia de noticias Europa Press. Posteriormente diversificó sus actividades al entrar como redactor y ejecutivo de cuentas en Chrysalis Social Media, donde estuvo cinco meses, antes de llegar a a la agencia Goodwill Comunicación donde estuvo durante un año en labores similares, además de como creador de contenido gráfico. Después recalaría durante año y medio en la consultora Kreab, la misma en la que trabajan el marido de Inés Arrimadas y Eduardo Madina.

Con un master en la escuela de negocios ThePowerMBA, resulta muy lógico que emprendiera su propio proyecto, que echó a andar hace un año. Se trata de Bonai Madrid, una firma de bisutería en la que están involucrados José y Aitor, de ahí su nombre, una combinación del apellido del primero y el nombre del segundo, y en el que han tenido unas perfectas mentoras, la madre de José, Ana Rodríguez, y su hermana, Amelia Bono, que gestionan varias tiendas de Tous.

Es precisamente en la página web, donde encontramos la descripción de la empresa y de Aitor, su gran impulsor: "La firma BONAI nació de la mano de Aitor Gómez, un joven emprendedor que decidió cambiar el mundo del periodismo por la joyería. Su gran sensibilidad por lo artístico y su buena relación con el universo femenino le impulsaron a crear esta firma que persigue establecer a la mujer en el centro del todo. (...) Sus grandes pasiones -viajar y pintar- han influido en la filosofía de la marca. En sus viajes descubrió la maravilla que entraña la diversidad: en sus diseños, en sus formas, en sus gentes... En el arte de pintar se descubre la fijación por el detalle: todo tiene que ser perfecto".

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