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Los caterings de la jet, en apuros: así se han reinventado para capear el covid-19
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Los caterings de la jet, en apuros: así se han reinventado para capear el covid-19

Cristina Oria, Samantha Vallejo-Nágera y Cari Goyanes han tenido que enfrentarse al peor año de sus negocios con el cuchillo entre los dientes: renovarse o morir, que diría Unamuno

Foto: Samantha Vallejo-Nágera. (Olga Moreno)
Samantha Vallejo-Nágera. (Olga Moreno)

El año 2020 no está siendo fácil para nadie, pero si hablamos de la hostelería, el drama roza picos épicos. Cierres, ERTE, despidos e incertidumbre han marcado un año en el que la reinvención ha sido clave para la supervivencia de muchos negocios que parecían solventes a más no poder. Restaurantes en los que era imposible conseguir mesa o caterings para los que había que estar rápido para encontrar disponibilidad el día que querías que sirvieran tu boda o un gran evento se han visto obligados a encontrar nuevas fórmulas, y los favoritos de la jet no han quedado exentos.

Caterings como el de Cristina Oria, Samantha Vallejo-Nágera y Cari Goyanes han tenido que enfrentarse al peor año de sus negocios con el cuchillo entre los dientes: renovarse o morir, que diría Unamuno. Lo mismo con otros emergentes, como Plantarse, el negocio healthy de Isabel Entrecanales y Pino Gil de Biedma.

Así es como han afrontado todas ellas la hecatombe consecuencia de la pandemia (y como nos lo han relatado a Vanitatis).

Cari Goyanes

Cari Goyanes ha pasado una cuarentena complicada. “Eventos cancelados, bodas pospuestas, miedo, incertidumbre... El covid ha afectado muchísimo al sector”, nos explica. Especializada en bodas y grandes eventos, las limitaciones de aforo y las cancelaciones durante este año se han comido la mayor parte de los beneficios de la temporada de su catering Six Sens. Y es que, como también le ha pasado a Samantha, aunque se han celebrado bodas, no han sido como antes.

No obstante, lo tiene claro: “Hay que tirar pa'lante”. Así que como algunas de sus compañeras de profesión se lanzó hace unas semanas a los brazos del envío a domicilio. “Hemos empezado con deliveries para hacer cenas especiales en casas y ahora estamos también con deliveries para producciones y para oficinas”. Un mercado de lo más solvente de cara a una Navidad en la que los eventos familiares, con amigos y sobre todo los de las grandes empresas han tenido que buscar nuevas fórmulas para brindar por el año que empieza.

“Aparte vamos a sacar una línea de productos gourmet llamada la Despensa de Cari para hacer regalos o para comprar para cada uno”. Una reinvención en la línea de la de sus principales competidoras, que también han visto en este sistema una auténtica ventana para salir de la crisis que asola al sector desde hace meses.

Samantha Vallejo-Nágera

“Para el catering este año es un año perdido. Hay muchas empresas como nosotros”, nos confiesa Samantha Vallejo-Nágera. Considerado uno de los favoritos de la jet, su catering Samantha de España tampoco se ha librado de las cancelaciones y le ha tocado como a tantos otros reinventarse adaptándose a la nueva normalidad, que ya se alarga desde hace seis meses.

“Teníamos que actualizarnos y adaptarnos a lo que está pasando, y ya que los eventos presenciales prácticamente han desaparecido, hemos creado este nuevo concepto para poder entregar a grandes grupos de personas nuestros productos”, continúa. Y es que, tras varios meses dándole vueltas, la chef y jurado de ‘MasterChef’ ha dado un paso al frente y ha lanzado Lunchbox, un nuevo proyecto enmarcado dentro del catering que busca llevar los eventos ahora digitales a casa (al menos, la parte gastro) y que ya ha lanzado en su versión navideña, que incluye desde menús tradicionales de pularda rellena y consomé a su riquísimo roscón.

No importa que sea una presentación online o una cena benéfica, el catering prepara una caja adaptada a los deseos y necesidades del cliente para que así sus invitados puedan disfrutar de la experiencia sin salir de casa y, sobre todo, sin exponerse al contagio. “Desde marzo los eventos en Madrid están parados y, como comprenderás, las empresas de catering se tienen que reinventar”. Dicho y hecho. “Es un poco el concepto de la cesta de Navidad durante todo el año, orientada a un cliente. ¿A quién no le gusta recibir una caja de comida en casa?”.

Plantarse

“La cuarentena yo creo que la hemos vivido un poco como todos... con miedo, angustia, tristeza e incertidumbre. Nos ha servido a valorar las cosas más simples que dábamos por hecho, a echar de menos, a ser cariñosos con los que nos rodean y sobre todo nuestras familias”, nos explican, en conversación con Vanitatis, Isabel Entrecanales y Pino Gil de Biedma, fundadoras de este restaurante healthy a domicilio que se colaba cada día en cientos de puestos de trabajo.

Y es que, a pesar de estar enfocados 100% en el delivery, esta crisis sanitaria ha tenido también un gran impacto en Plantarse. Los primeros meses de confinamiento (marzo y abril) el volumen de pedidos disminuyó considerablemente. “La gente tenía miedo, el virus era un gran desconocido y, lógicamente, muchos eligieron no meter comida de fuera en casa” apuntan.

“Este tiempo de reflexión, como nos gusta llamarlo a nosotras (intentando sacar el lado positivo) nos ha ayudado también a aprender que hay que ser más consciente de uno mismo, escucharse más y por lo tanto intentar conocerse más cada día. También ha puesto en valor que la salud es lo primero y que hay que cuidarse día a día para fortalecer el sistema inmunológico para poder hacer frente a enfermedades. Nuestros platos son saludables, equilibrados y están repletos de nutrientes, son la mejor opción para llevar una alimentación sana y consciente. Siete meses más tarde, seguimos aprendiendo y adaptándonos a la nueva realidad que estamos viviendo”.

Cristina Oria

Para Cristina Oria, la pandemia tampoco ha sido fácil. Con tres restaurantes en Madrid, cada uno con su tienda gourmet correspondiente, el obrador, la finca de eventos y el delivery, los equilibrios para mantener su imperio a flote no han sido sencillos.

Unos equilibrios en los que, por cierto, hay que incluir su impresionante labor durante el covid llevando comida y material sanitario a los hospitales de Madrid, todo ello, embarazadísima de su tercer hijo que nació hace apenas unas semanas.

Foto: Cristina Oria, en su restaurante de Conde de Aranda, en Madrid. (Cortesía)

“La verdad es que vivimos un poco el día a día. Lo que me ha enseñado el covid es que no se pueden hacer planes a largo plazo. Las circunstancias cambian todo tanto en un momento que ahora estamos viviendo el día a día e intentando reinventarnos todos los días”, nos dice Cristina. ¿Su fórmula? “Enviar cenas individuales que sustituyan las cenas de Navidad, que están en el aire. Fórmulas para compensar lo que está pasando”. Y que poco a poco están ayudando a tantos en su misma situación a salir de esta crisis sanitaria para la que aún no vemos salida.

El año 2020 no está siendo fácil para nadie, pero si hablamos de la hostelería, el drama roza picos épicos. Cierres, ERTE, despidos e incertidumbre han marcado un año en el que la reinvención ha sido clave para la supervivencia de muchos negocios que parecían solventes a más no poder. Restaurantes en los que era imposible conseguir mesa o caterings para los que había que estar rápido para encontrar disponibilidad el día que querías que sirvieran tu boda o un gran evento se han visto obligados a encontrar nuevas fórmulas, y los favoritos de la jet no han quedado exentos.

Samantha Vallejo Nágera Negocios de famosos