Celia García, mujer de Saúl Craviotto: "Mi marido es tenaz, lo que quiere lo consigue"

Apenas dos horas antes de que comenzara la ceremonia inaugural de los Juegos Olímpicos entrevistamos telefónicamente a la mujer de Saúl Craviotto, abanderado español junto a Mireia Belmonte. Un momento de gran intensidad emocional que puede complementarse en los próximos días si el piragüista lograra una quinta medalla, lo que le situaría en la cúspide de los atletas españoles junto a David Cal.

Celia García es técnica en nutrición y dietética, y ha plasmado parte de sus conocimientos en el libro 'Comida sana en bowl', editado por Libros Singulares el 19 de marzo de 2020, que, en términos de la editorial, "comparte 100 recetas fit bowl elaboradas de forma rápida, sencilla y saludable; además de deliciosas y con ingredientes ricos, frescos y naturales". Es una disciplina que la apasiona y sobre la que se expresa con entusiasmo y que, como no podía ser de otra manera, aplica en casa, también con sus dos hijas, Valentina y Alejandra.

¿Cómo estás viviendo estas horas previas a la ceremonia inaugural?

Es muy emocionante, me genera también muchos nervios y mucha felicidad. Es una mezcla de todo, pero sobre todo mucha felicidad y orgullo por él.

Y además puede subir un peldaño más en la historia si gana esa quinta medalla.

La verdad es que sí, tiene esa posibilidad. Todo es muy emocionante. Cuando yo le conocí, ya tenía una medalla y he ido viendo toda la evolución. Cómo ha luchado para la segunda, para la tercera, la cuarta... Y este ciclo olímpico que ha sido tan largo con la pandemia de por medio, así que este sería el broche final perfecto.

Tú también aportaste tu granito de arena, porque le ayudaste a mejorar su alimentación.

En realidad, cambiamos todos en casa la alimentación en general. Fue a raíz de que yo en Instagram comencé a seguir cuentas de vida sana. Descubrí que me encantaba. Así que empezamos a aplicarlo en casa. Cuidar la alimentación es un punto superimportante para los deportistas. Empezamos poquito a poco y lo primero que cambiamos fue el desayuno. De repente tomábamos un zumo de brick con unas magdalenas o una tostada, que no era lo más saludable del mundo, así que empezamos a añadir avena, claras de huevo, por ejemplo.

Así que tu camino en el mundo de la nutrición comenzó de una manera casual...

Sí, llegué precisamente por eso. Como vi que me encantaba, dedicaba todo mi tiempo libre a informarme sobre nutrición, a hacer recetas saludables... Y me creé la cuenta de Instagram un poco por hobby y poco a poco fue creciendo. Así que lo que empezó como una afición se ha convertido en mi trabajo.

Sin embargo, eres arquitecta y diseñadora de interiores...

Sí. Lo que ocurre es que cuando acabé de estudiar llegó la crisis del ladrillo y me vi entre la espada y la pared. Me tenía que reinventar y no sabía muy bien qué hacer. Probé una cosa, luego otra, hice cursos... Así que acabé estudiando nutrición.

Estos hábitos saludables también se los estás inculcando a tus dos hijas, ¿cómo lo llevan?

Sí, porque la alimentación de casa es la alimentación de casa... Es verdad que a ellas lo verde les cuesta un poquito. Así que vamos poco a poco, de repente les damos un trocito para que vayan probando cosas nuevas y se vayan acostumbrando a los sabores. Ellas son niñas y, como es normal, les gustaría comer todo el día chocolate y gominolas, pero, claro, no puede ser.

Costará a veces porque es posible que en el colegio tengan estímulos que les hagan querer desviarse de ese camino nutricional que les estás trazando.

No creas, cada vez hay más gente consciente de que sus hijos tienen que comer de una manera saludable. En ese sentido no tengo grandes problemas.

Además de gestionar tu cuenta de Instagram, en la que cada vez sumas más seguidores, ¿tienes clientes a los que aconsejas?

De momento no, porque no me da la vida. Siendo madre y haciendo lo que ya estoy haciendo, no puedo más. Es algo que me gustaría lograr en el futuro, pero ahora mismo estoy haciendo malabarismos.

Cuando Saúl participó en 'MasterChef Celebrity', que acabó ganando, decía que no sabía ni freír un huevo.

¡Y es real! Bueno, igual freír un huevo sí, pero no sabía casi nada de cocina.

¿Le ayudaste tú a prepararse para el programa?

Se fue a dos restaurantes de Asturias muy famosos, Casa Gerardo y Casa Ovidio, donde fue aprendiendo cosas. Yo soy muy fan de 'MasterChef', así que le fui guiando en las pruebas que tenía que hacer. Por ejemplo, qué recetas podía hacer en función de los ingredientes, investigamos emplatados... Porque esta es una cuestión que contaba mucho, así que mirábamos emplatados bonitos en Pinterest.

Como vivís en Gijón, entiendo que la pandemia se hizo en cierta manera más llevadera al estar cerca de tu familia.

Somos superfamiliares, pero a mis padres no les pude ver mucho, porque eran personas de riesgo y nos daba un poco de miedo poder contagiarlos.

Volviendo a Saúl, quería destacar su nivel de compromiso, pues da charlas en los institutos y colegios para prevenir a los jóvenes respecto a los problemas de las drogas y el alcohol e informando de hábitos saludables de vida...

Sí, se preocupa mucho por estas cuestiones porque hay que inculcar a los chavales los mejores valores posibles. Si lo hace Saúl, que es una persona conocida, el mensaje cala más.

Una responsabilidad que trasladáis a vuestras redes sociales, porque mal utilizadas pueden tener consecuencias nocivas.

Ambos tenemos un perfil muy blanco y tenemos pocos haters. Los mensajes que recibimos de la gente son muy positivos, son muy pocos los negativos. Eso siempre ayuda.

Tener un marido deportista de élite no sé si influye en ti para que hagas ejercicio.

Tener un marido deportista de élite siempre ayuda, pero yo lo hago más por encontrarme bien, por salud mental. Si estoy estresada o tengo picos de agobio, salgo a correr a un parque que tengo cerca de casa. Ahora estoy metiendo ejercicios de fuerza, que son muy necesarios, pero me cuestan un poquito más.

¿Cómo es Saúl en la intimidad, cuando no hay una cámara delante?

Mi marido es muy tenaz, lo que quiere lo persigue y lo consigue. No abandona nunca. Si empieza una cosa, la acaba. El refrán de 'no dejes para mañana lo que puedas hacer hoy' le representa, no sabes cuánto. Es superdivertido. Con Saúl me río muchísimo. De primeras puede parecer tímido, que lo es, pero en las distancias cortas es muy divertido.

Me vas a permitir que me ponga un poco cursi... Saúl te pidió matrimonio después de los Juegos de Londres, pero su mejor medalla fuiste tú...

Fue muy bonito porque a mí ni se me pasaba por la cabeza. Estábamos con mi hermana, mi cuñado, mis primos, la mujer del entrenador de Saúl y su hija mayor. Estábamos haciendo una ruta con el bus turístico, porque no teníamos mucho tiempo para ver Londres. Ellos nos dijeron dónde estaban, paramos, bajamos, les vimos, me apartó un poco del grupo y me lo pidió.

Saúl ha dicho que le gustaría tener tres hijos, ¿os planteáis aumentar la familia?

No es una puerta del todo cerrada, pero está un poco arrimada... Con el tren de vida que llevamos, tener un bebé más no sé cómo se gestionaría. Vamos a esperar un poco a que pasen estas Olimpiadas y nos lo pensaremos.