Jordi Pujol Dolcet: el 'payés' al que descubrió Carla Simón en una manifestación

A Carla Simón la técnica para encontrar sus actores en 'Alcarrás' le ha funcionado. Solo hay que ver este dato: tres de sus actores no profesionales han sido nominados para ganar el Goya a la Mejor Actuación Revelación. En la categoría femenina, Anna Otín, que era profesora de educación infantil en el momento de grabar la película. En categoría masculina, Albert Bosch, al que descubrieron en unas fiestas patronales, se medirá con su compañero de reparto Jordi Pujol Dolcet.

Y si, como ya hemos mencionado, las circunstancias en las que Carla Simón y su equipo encontraron a Otín y Bosch no son las más comunes, tampoco se queda atrás Dolcet, que interpreta a Quimet en el film.

“Yo fui a una manifestación para salvar la payesía de Lleida y allí estaban ellos, buscando gente para hacer de Quimet –dice Pujol–. Me grabaron diciendo cuatro cosas y les debí de hacer gracia”, recogía la publicación 'Ara'.

En un principio, el actor se pensó si actuar, puesto que le preocupaba poder perjudicar a la payesía o agricultura en castellano, pero finalmente fue su mujer la que le acabó dando el empujón definitivo a Jordi, y con mucha gracia, lo reconocía el actor: “Me obligaron. La mujer me dijo que fuera y ya, que no me quería oír más”. Una buena decisión por parte de su esposa a juzgar de los resultados: la nominación a los Goya.

El método de Carla Simón, así como el de otras directoras como Pilar Palomero, que se lanzó animada por su padre a dirigir, en 'La maternal', consiste en trabajar con actores no profesionales que entiendan los personajes de sus historias por ser como ellos, es decir, vivir en la misma zona y contexto, tener la misma edad. Perro la realidad es que para Dolcet algunas escenas supusieron un reto interpretativo mayor que otras.

La escena en que el personaje de Jordi llora fue de lo más complicado para él: “¿Cómo llorar de repente, si estábamos todos allí tan bien? Y también está lo que nos han dicho siempre a los hombres, que no tenemos que llorar. Era una lucha con mi cerebro”, recordaba en ‘Ara’ el actor.

En ese punto el equipo no dudó en utilizar algunos trucos habituales a la hora de hacer saltar las lágrimas a los actores: pelar cebollas, Vicks VapoRub... Pero nada hacía efecto hasta que al final se consiguió: “Cuando al final salieron, fueron de verdad. Ahora bien, no sé ni cómo lo hice. Supongo que por las emociones. Lo pasé fatal”, recuerda.

Sin embargo, aunque en algún momento concreto le costara mostrar las emociones del personaje, el hecho de que la vida de Dolcet se parezca a la de su personaje le ha facilitado meterse en su piel. Jordi, que antes se dedicaba a la agricultura, acabó dejándolo hace 14 años porque sabe lo duro que es que tu trabajo no sea recompensado con la retribución que merece: “Fue duro, muy jodido, como pasar una enfermedad, pero no me arrepiento porque ahora la cosa está peor, sobre todo para la juventud", decía en la publicación antes mencionada.

Por suerte para Pujol Dolcet, del campo y de esa etapa de payés le queda para el recuerdo la grabación de 'Alcarrás' y un trozo de tierra que sigue trabajando a día de hoy como hobby. Veremos si también le permite llevarse el Goya a casa.