Primicia | Tamara Falcó y su equipo buscan un diseñador internacional para su vestido de novia

Tamara Falcó ha vivido en las últimas horas lo que ninguna novia desearía vivir: quedarse sin diseñadora de vestido a 7 semanas de su boda. Con todo organizado para que el 8 de julio entone bien alto su esperado ‘sí, quiero’ junto a Íñigo Onieva en la capilla del palacio El Rincón, la marquesa de Griñón tendrá que encontrar una firma que sustituya a las españolas detrás de Sophie et Voilá al frente del proceso creativo de su vestido de novia. El tiempo, desde luego, no corre a su favor.

Según nos han confirmado personas de su entera confianza, Tamara está “tranquila” ante la idea de encontrar un nuevo diseñador. Lo que teme, realmente, es que se repita una situación como la vivida con las bilbaínas, con las que “todo parecía de color de rosa” y al final “ha terminado en drama”, continúan las fuentes consultadas.

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Patricia Izquierdo

Por tanto, lejos de buscar en el mercado nacional, donde grandes firmas se han postulado como firmes candidatas a acompañar a la hija de Isabel Preysler al altar, nos aseguran que Juan Avellaneda y Blanca Unzueta, las dos personas de confianza de Tamara en todo este proceso, ya están buscando opciones en grandes firmas internacionales. Giambattista Valli, Dior, Carolina Herrera o Valentino son, si fuera posible llegar a tiempo, firmes candidatas en sus quinielas para vestir a la aristócrata más famosa de nuestro país en la que será la boda del año.

Una misión en la que están contando con la inestimable ayuda de Isabel Preysler, quien habría puesto a disposición de su hija su preciada agenda de contactos para que todo salga según lo previsto y sea “la novia que ella desee ser”.

Tamara lo tiene claro: su inspiración desde hace años es el vestido de Chanel que forma parte del archivo del Museo Metropolitano de Nueva York del que todo el mundo habla desde que saltara la noticia del comunicado.

Un vestido sencillo, clásico y que no es de novia que Falcó habría pedido reinterpretar a las diseñadoras Sofía Arribas y Saioa Goitia y que aún tiene “entre ceja y ceja”. “Ella no quiere copiarlo, lo ha usado de inspiración en todo momento. Desde hace años guarda la foto del vestido como oro en paño en su galería de fotos del móvil y en el pasado no ha dudado en enseñarlo siempre que salía el tema de bodas y vestidos de novia”, nos comentan. “Lo guarda desde mucho antes de conocer a Íñigo”.

Ni Pronovias (por ahora) ni Avellaneda

Una elección, la de decantarse por un diseñador internacional, que dista mucho de su primera elección de un atelier pequeño y con tradición como el de Sophie et Voilá, con quienes finalmente no llegaron a un acuerdo durante las pruebas realizadas tanto en su atelier como en diferentes hoteles de lujo en Madrid.

Aunque aún no está decidido cuál será el nuevo diseñador del esperado despliegue estilístico de Tamara, lo que sí desmienten desde su entorno es que vaya a salir de los talleres de Pronovias, como se ha rumoreado en las últimas horas.

Tampoco del de su amigo y asesor durante este proceso, Juan Avellaneda, quien en multitud de ocasiones ha confirmado que nunca vestiría a su íntima amiga para un evento de tal envergadura como este. “No se lo hago por lo mismo que Givenchy nunca quiso vestir a su amiga Audrey Hepburn. Hay materias que hay que mantener separadas”, bromeaba hace unos meses en conversación con Vanitatis.