Todos los secretos de la boda de Luisa Bergel: del baile de Almeida a Tamara Falcó como DJ

Luisa Bergel se casó este fin de semana en Sotogrande con Cristian Flórez. Una boda muy esperada que resultó emotiva y divertida a partes iguales y que congregó a gran parte de la jet patria. No podían faltar íntimos amigos de los novios como Tamara Falcó e Íñigo Onieva. De hecho, fue Luisa Bergel quien presentó a su íntima amiga Tamara a Íñigo, ejerciendo así de celestina entre la pareja.

Invitados vip

La localidad gaditana de Sotogrande se vistió de gala para el enlace al que no faltaron invitados como Vicky Martín Berrocal con su hija Alba, ya que el padre de Luisa es responsable junto a otros empresarios del éxito de la firma de moda Victoria Colección, propiedad de la exmujer del Cordobés. Tampoco se quisieron perder la ceremonia y posterior celebración los empresarios hosteleros Hussi Istambuli y Chiqui Calleja; la modelo sevillana Teresa Baca, que acudió junto a su marido, Álvaro Torres; Alejandra Onieva, cuñada de Tamara Falcó; el escritor Rafa Tarradas Bultó, el actor Miguel Ángel Muñoz o el relaciones públicas José Asín. No faltaron a la cita marcada en el calendario por Luisa y Cristian, como tampoco lo hizo Blanca Osorio, hija de Ioannes Osorio, duque de Alburquerque, y de Blanca Suelves.

Entre los invitados por los padres de los novios, las periodistas Teresa de la Cierva y Marta Barroso, que fueron de las más asiduas en la pista de baile. También el aristócrata Jaime Teba, duque de Teba, junto a su mujer, la mecenas Sophie Neuendorf. Pero si alguno de los invitados levantó expectación fue el político José Luis Martínez-Almeida, quien acudió del brazo de su novia Teresa Urquijo, siendo esta la primera boda pública a la que asistían juntos como pareja.

Un vestido de alta costura 'heredado'

Uno de los secretos mejor guardados en toda boda es el vestido de la novia. Luisa Bergel lució para el día más importante de su vida un diseño de Pertegaz de los años 50 que ya habían lucido su madre y su abuela en sus bodas, celebradas en 1989 y 1959 respectivamente. Un vestido de alta costura homenaje a las mujeres de su familia, confeccionado en organdí de seda de color marfil y compuesto por un cuerpo ceñido, pequeña manga japonesa y cuello a la caja.

El vestido fue readaptado por el diseñador Jorge Vázquez, director creativo de Pertegaz. Completaban el look unos guantes de napa marfil y unos zapatos diseñados por ella misma en Silvia Lago Atelier. Luisa llevaba un ramo de rosas blancas de Pitiminí a juego con la decoración floral de la iglesia; tanto de la misma como de los adornos florales de la casa se encargó Florenea. El maquillaje corrió a cargó de Inés Castaños, quien con un look natural pero favorecedor resaltó la belleza natural de Luisa Bergel, a quien todo el mundo conoce como Mylu.

Un minivestido para brillar

La madrina de la boda, la madre de Cristian Flórez, escogió un vestido de corte camisero en azul Klein. Durante la ceremonia religiosa el novio cogió en varios momentos la mano a su madre, un bonito detalle de complicidad que despertó la emoción de gran parte de los invitados.

Para la cena, la novia se desprendió de la capa que cubría el top, convirtiendo el vestido en un favorecedor modelo palabra de honor, y utilizó joyas de Suárez. Con ese mismo look y alpargatas de cuña bailó el tradicional primer baile junto a su padre y junto a su ya marido, Cristian Flórez. Después, Luisa sorprendió con un minivestido y zapatillas de deporte. El modelo, de pedrería y corte 'baby doll', forma parte de la colección de fiesta y novias de una de las marcas australianas más deseadas del momento, Bronx and Banco. De inspiración bailarina a modo de tutú y muy cómodo, la novia no se equivocó con este look, pues tras la cena los invitados disfrutaron de una espectacular fiesta que se alargó hasta bien entrada la mañana del día siguiente.

Martínez-Almeida, en la pista de baile

Uno de los invitados que más disfrutó del baile fue el alcalde Martínez-Almeida, quien dejó a un lado su fama de tímido y se lanzó a la pista de baile dispuesto a divertirse. En un momento dado, el DJ encargado de la fiesta, Diego Gilca, vio como Tamara Falcó ocupaba su lugar en la mesa de mezclas, protagonizando una de las anécdotas más divertidas de la noche.

La cena fue servida por el catering Ciboulette, el favorito de la jet y de familias aristocráticas como los Alba. Ellos, junto a la organizadora de bodas Eva Colorín, se encargaron de convertir el espectacular jardín de la casa familiar de Sotogrande de los Bergel en un lugar mágico para la celebración de la boda. Combinando manteles blancos con otros de estampados vegetales, sillas de inspiración rústica y mesas redondas alrededor de la piscina con otras en forma de U repletas de luces y adornos vegetales, crearon una atmósfera festiva, romántica y acogedora. Antes de finalizar la cena, los miembros de Laraland ya estaban animando a los novios e invitados con su espectáculo de baile mientras los fotógrafos de Light Of Feathers no perdían detalle, realizando las mejores instantáneas de los novios y sus invitados.

Colofón final

El broche final lo pusieron los novios sorprendiendo a sus invitados con un divertido fotomontaje de Riskbox en el que realizarse divertidas fotografías durante la celebración y una espectacular explosión de fuegos artificiales que llenaron de luz y color el día más importante en la vida de Luisa y Cristian.