Casilda Finat, más allá de su amistad con Tamara: su éxito como empresaria

Casilda Finat acaba de ser madre. La diseñadora de joyas, amiga íntima de Tamara Falcó, ha dado a luz a su tercer hijo. Ha sido ella misma la encargada de anunciarlo a través de sus redes sociales con una tierna imagen en la que se la puede ver sonriente abrazando a su bebé y junto a la que escribe: "Mi Juan, cómo puedo quererte tantísimo en tan poco tiempo. Gracias Dios mío por este regalo, ayer fue uno de los mejores días de mi vida". Solo habían pasado unos minutos desde que publicara la fotografía y su muro ya estaba lleno de mensajes de cariño, llegando a recibir más de mil, entre familia, amigos y seguidores.

La joven empresaria suma ya en sus cuentas de Instagram más de trescientos mil seguidores. Y es que, además de mostrar las piezas que diseña, nos hace partícipes de su vida, de su día a día como madre, ahora de tres niños, y como mujer trabajadora. Aunque su ocupación como diseñadora de joyas y complementos pasará, al menos un tiempo, a un segundo plano, ya que, según ella misma ha confesado, quiere centrarse en esta tercera maternidad. En sus propias redes comentaba que espera poder tener un poco de tranquilidad para disfrutar del pequeño, algo que, dado el éxito de su negocio, seguro que se puede permitir con facilidad.

Y es que, aunque solo hace cinco años que dio de alta la sociedad a través de la que gestiona las ventas de sus diseños, ya hace más de diez que comenzó esta aventura. Ha crecido tanto que ya cuenta con diez tiendas repartidas entre Madrid, Sevilla, Oviedo, Málaga, Zaragoza, Valencia y San Sebastián. Casilda Finat SL se dio de alta en 2018 y desde entonces la curva que marca su progreso no ha dejado de ascender. De hecho, contra todo pronóstico, entre el 2020 y 2021 experimentó su pico de mayor crecimiento, en un año en que la situación sanitaria no favoreció a casi ningún sector.

En 2021, que es el último ejercicio que es posible consultar, la facturación fue de 2,9 millones de euros y el total activo registrado de la empresa, siempre según datos del Registro Mercantil, fue de 2,3 millones. El objeto social de la sociedad es muy concreto: "La importación y compraventa, tanto en establecimiento especializado como por internet, de toda clase de complementos, regalos y moda, objetos de plata y bisutería, complementos textiles, elementos decorativos y accesorios para el hogar", y desde su nacimiento ha sido ella la única accionista y administradora.

Un negocio de éxito con su hermana como aliada

Pero eso no quiere decir que maneje todos sus activos sola. Ana Finat, su hermana melliza, es una de sus grandes aliadas a la hora de gestionar su negocio, y por ello es una pieza clave en este momento en que acaba de ser mamá. Y siempre es una gran ayuda a la hora de ponerse las joyas y lucirlas, algo para lo que cuentan con un amplio grupo de amigas encabezado por Tamara Falcó. Ellas son su mejor escaparate, pues todo lo que se ponen se analiza al dedillo, y las joyas diseñadas por su amiga son acordes a un estilo que en mayor o menor medida todas comparten.

Su negocio, aunque exitoso, no es la única fuente de ingresos de Casilda. Desde hace unos años acepta algunas colaboraciones a través de las redes, para las que pone su imagen y crea contenido para promocionar productos de diferentes firmas. Lo cierto es que no es algo que haga muy a menudo, ni se presta a todo tipo de marcas, pero sí hay algunas, sobre todo de cosmética, con las que ha logrado tener una relación muy sólida que se mantiene en el tiempo.

Además, cuenta con una vivienda en propiedad, que nada tiene que ver con la casa en la que reside ahora en Madrid, ni con la de Sevilla, que es en la que vivía antes de mudarse a la capital en 2021. Se trata de un pequeño apartamento de cincuenta y siete metros cuadrados, ubicado en el centro de la ciudad andaluza, y del que es la única propietaria desde noviembre de 2017, momento en que firmó la compraventa.

Los últimos años han sido decisivos para la vizcondesa de Rías, título que su padre, Rafael Finat y Riva, le cedió en 2018 y que, según sus propias palabras, solo sirve "para honrar los servicios prestados por un antepasado", aunque se siente orgullosa de llevarlo. Su proyecto como diseñadora fue algo que llegó casi por casualidad, aunque ha ido bien desde el principio. Prácticamente desde ese momento en que simplemente creó por gusto un par de anillos para ella misma y sus amigas.

Ahora ya es una empresa que genera cifras millonarias, lo que le permite un alto nivel de vida junto a su marido, Álvaro Martínez-Conradi, y sus tres hijos, en los que ahora, según ella misma ha explicado, está centrada al cien por cien. Aunque no dejaremos de verla por la pantalla del móvil, a través de la que nos muestra cada una de sus piezas con mucho orgullo y a la vez con mucha naturalidad, algo que la caracteriza y que alaban mucho sus trescientos mil seguidores.