Muere Francisco de Borbón y Escasany, duque de Sevilla y primo del rey Juan Carlos, a los 81 años y diez días después del fallecimiento de su hermano Alfonso

Francisco de Borbón y Escasany, duque de Sevilla y primo del rey Juan Carlos I, ha fallecido este martes 20 de mayo a los 81 años de edad en su domicilio de Madrid. Así lo ha confirmado su propio yerno, Julián Porras Figueroa, a través de un pequeño escrito publicado en su cuenta personal de Instagram.

“Con inmensa pena os comunico que esta noche ha fallecido en Madrid mi suegro Francisco de Borbón y Escasany. Gracias a Dios pudimos estar con él hasta el último momento. Mañana a partir de las 12:00 estaremos en el Tanatorio de San Isidro y a las 18:30 se celebrará allí mismo una misa por su alma. El entierro será el jueves a las 12:00 en el cementerio de la Sacramental de San Justo”, ha explicado sobre los detalles del último adiós del aristócrata.

Dicha noticia ha golpeado de nuevo a la familia Borbón y Escasany tan solo diez días después de la muerte del hermano pequeño del duque de Sevilla, Alfonso; fallecido el pasado 11 de mayo.

Precisamente, durante su íntima despedida acontecida en el tanatorio de La Paz se producía la última aparición pública de don Francisco, quien, con rostro serio, era fotografiado a las puertas del mencionado lugar acompañado por uno de sus hijos, Francisco de Borbón von Hardenberg. Tras él, su pequeña, Olivia de Borbón, y su yerno, Julián Porras Figueroa, responsable de anunciar su fallecimiento hace escasos minutos.

Un hombre de negocios

Más allá de las múltiples condecoraciones que ostenta, entre ellas la de Grande de España, si por algo era conocido el primo de don Juan Carlos I, lejos de su linaje, era por ser un importante hombre de negocios. Licenciado en Económicas en Madrid, también en Historia por la Sorbona, Alfonso de Borbón y Escasany desarrolló gran parte de su trayectoria profesional en la banca, llegando a ser durante 30 años director del banco de negocios londinense Hill Samuel and Co. Limited e incluso presidente y director general del Miami National Bank y presidente del Cannon Group Iberoamérica.

Posteriormente, junto a su hermano Alfonso, se lanzó a la creación de diversas compañías, entre ellas destacan la Sociedad Internacional de Equipos Clínicos, la cual participa en la American Liberty de Equipos Clínicos, en los Estados Unidos, o ‘Vapor S.A.’, dedicada al comercio de maquinaria y equipos industriales.

Una vida que, tal y como relata en sus memorias ‘Cuasi memorias’, publicadas en el año 2021, le permitió no solo vivir largas temporadas en países como Francia, Inglaterra, Alemania y Estados Unidos, sino también conocer a personajes clave de la historia mundial, como Saddam Hussein y Muamar el Gadafi.

Tres bodas y tres hijos

No obstante, lejos de las finanzas, la prensa social siempre puso su foco sobre su figura, debido a su intensa vida sentimental. No es para manos, Alfonso de Borbón Escasany tuvo un total de tres mujeres (boda incluida) a lo largo de su vida. La primera de ellas en 1973 con la condesa Beatrice Wilhelmine Paula von Hardenberg-Fürstenberg, de quien se divorció en 1989 y con quien tuvo a sus tres hijos: Francisco, Olivia y Cristina.

En 1991 volvió a contraer matrimonio con Isabelle Eugénie Karanitsch; esta vez en Viena. Sin embargo, dos años más tarde solicitaron el divorcio de mutuo acuerdo y sin descendencia. La tercera oportunidad para el amor llegó en el año 2000 con María de los Ángeles de Vargas-Zúñiga y Juanes, nieta paterna del conde de la Oliva de Plasencia. Tampoco funcionó.

La mayor tragedia de su vida

Sin embargo, si existe un hito que marque la biografía del sexto duque de Sevilla es sin lugar a dudas la inesperada muerte de su hija Cristina Elena de Borbón a los 44 años el 13 de febrero de 2020 a causa de un accidente de coche en la capital. Un hecho que jamás pudo superar.

Ahora, es momento de velarle a él. Tal y como ha avanzado su yerno, Julián Porras, su último adiós se producirá a partir de las 12:00 de mañana, miércoles 21 de mayo, en el Tanatorio de San Isidro; al que está previsto que asistan multitud de personalidades.