Francisco de Borbón cuenta cómo trucaron su foto con Kasia, la jequesa fallecida

Francisco de Borbón está contrariado por las informaciones que están apareciendo en los últimos días en distintos medios, vinculándolo sentimentalmente en el pasado con la jequesa Kasia Gallanio, encontrada muerta en su vivienda marbellí en circunstancias aún no esclarecidas.

El aristócrata ha explicado a Vanitatis: “Nada más lejos de la realidad lo que han publicado. En 2019 apareció una foto de nosotros juntos en la gala de San Lázaro en Los Monteros. Pero se da el caso de que yo no estaba solo. A mi lado estaba mi mujer, que entonces era mi novia, y los fotógrafos cortaron la foto y me sacaron con esta señora. La publicó ‘¡Hola!’ y se habló hasta de un romance. Esto es imperdonable. Y yo quiero decir que la muerte de esta jequesa, que la conocía, me da mucha pena, pero quiero dejar muy claro que nunca he estado vinculado a ella sentimentalmente”.

Francisco de Borbón, el segundo hijo de Francisco de Paula de Borbón y Escasany (duque de Sevilla, grande de España y primo segundo del rey don Juan Carlos) y de la princesa Beatrice von Hardenberg, explica: “Han dicho textualmente que incluso se llegó a hablar de compromiso entre Kasia Gallanio y yo, y es una barbaridad”.

La imagen en la que aparecen Francisco y Kasia, entre las fotos de la jequesa de Marbella en redes sociales que estos días han sido examinadas con lupa, ha vuelto de nuevo a dar que hablar sobre la noticia que salió en su día. Ahora, Francisco de Borbón, que se encuentra felizmente casado con Sophie Elizabeth Karoly, con la que tiene un hijo, quiere dejar zanjado el tema para que no especulen más con su vida.

Llega a Marbella la hija de la jequesa

Mientras las autoridades forenses determinan las causas de la muerte de Kasia, Marbella sigue llorando la pérdida de la jequesa. Su familia ya ha llegado a la ciudad y se ha personado en las Playas del Duque, donde residía en un ático de la lujosa urbanización del edificio Málaga. Yasmin, su hija, no quiso hablar con la prensa. Apareció bajando del edificio con un short vaquero muy corto y con la cabeza tapada con una pashmina, tal como muestra en exclusiva Vanitatis en una de las imágenes que ilustran este artículo, mientras unos amigos de la familia la introducían en la parte de atrás del coche porque estaba muy afectada.

Precisamente en este ático del que se la ve saliendo, Yasmin había residido con su madre y su hermana gemela, Malak, hasta que este mes de mayo la corte francesa decidió retirarle la custodia a su progenitora. De las dos gemelas, según nos cuenta una de las amigas de la jequesa, Yasmin era la “más pegada a ella”. Su madre le decía que era como la princesa de 'Aladdin' y la niña siempre revoloteaba a su alrededor. Ahora las gemelas, a punto de cumplir la mayoría de edad, tendrán que decidir el tipo de vida que quieren seguir.

En el documental que Kasia grabó en una lujosa villa de la Zagaleta para explicarle al mundo lo que sentía, relató: “Vivo en una jaula de oro, controlada por mi exmarido a través de mis hijas. No solo lucho por mí, lucho porque no quiero ver a mis hijas, que son libres, en Catar, un país donde Amnistía Internacional saca cada día informes donde se vulneran los derechos de las mujeres. Yo no quiero eso para mis hijas”.

La familia está esperando los resultados del examen del cuerpo de Kasia en el Instituto de Toxicología de Sevilla, que será decisivo para determinar la causa de su muerte. Kasia Al Thani se había convertido a la religión musulmana cuando contrajo matrimonio con el tío del emir de Catar, Sheikh Tamim bin Hamad Al Thani. Los familiares con los que ha hablado este medio son conscientes de que tal vez pase tiempo hasta que puedan enterrar a la jequesa debido a una investigación que por ahora sigue abierta.