Ecclestone persigue sus millones

Con unas pocas libras. Así piensa vivir Bernie Ecclestone tras su millonaria separación. A pocos días de comenzar el campeonato de Fórmula Uno, el gurú del motor afronta uno de los momentos más delicados: divorciarse de su esposa sin que su fortuna se resienta. Más de dos billones y medio de euros, con propiedades y aviones privados incluidos, están en juego, aunque a Bernie parece no importarle mucho la pérdida, por lo menos bromea con ella. ¿O quizás sea una argucia legal para recuperar algo que ya ha empezado a perder?

Los tabloides británicos ya se frotan las manos ante el llamado divorcio del siglo. Y no es para menos por las cifras que se barajan y la peculiaridad del tema. Gran parte de la fortuna de Ecclestone está en paraísos fiscales a nombre de su ex Slavica, una modelo balcánica a la que estuvo unido más de veinticuatro años. Parece que esta mujer, 28 años menor que él y 25 centímetros más alta, no está por la labor de devolver el dinero.

El empresario ha declarado en la prensa británica que está contento por su mujer y que no le importa ella se quede con el dinero. Si esos euros, que se cree que están repartidos entre Jersey y Liechtenstein, regresaran a Gran Bretaña, la pareja tendría que pagar impuestos. Quizás por ello, Ecclestone, pese a sus palabras, se ha buscado un prestigioso abogado para llegar a un acuerdo amistoso con su todavía esposa.

“No he hecho nada sobre esto. Espero que ella sea lo suficientemente sensible para saber que necesitaría unas pocas libras para vivir como estoy acostumbrado”, ha dicho con algo de gracia. “Nosotros no vamos a discutir por quién se queda la custodia de los perros y cosas como esas. Ellas se los puede quedar”, añade. Sin embargo, si ella le pidiera retomar su relación no se lo pensaría dos veces: regresaría de cabeza a los brazos de su mujer.

Slavica, una modelo nacida en Croacia, abandonó al empresario el pasado mes de noviembre. Según alegó en su demanda de divorcio, la adicción al trabajo de su marido le creaban ansiedad y estrés. La pareja se conoció en Italia en 1982 durante la celebración de un Gran Premio. Tres años más tarde se casaron. En la actualidad tienen dos hijas, Tamara, de 24 años, y Petra, de 19 años, dos de las jóvenes más cotizadas de todo Londres.