Borja no quiere saber nada de Tita
La incomunicación entre Borja Thyssen y su madre sigue dando que hablar. Tras los últimos acontecimientos, parece que el primogénito de Tita no está dispuesto a
La incomunicación entre Borja Thyssen y su madre sigue dando que hablar. Tras los últimos acontecimientos, parece que el primogénito de Tita no está dispuesto a dar su brazo a torcer. El joven matrimonio Thyssen habría comentado a sus más allegados que “nunca más”, refiriéndose a las relaciones con mamá Carmen.
Tras el aborto espontáneo sufrido por Blanca, la pareja se recupera en su domicilio de Barcelona, ajena a los ruegos de la baronesa. Parece que ni el órdago lanzado por la aristócrata en su revista de cabecera pueden cambiar la actitud de su retoño.
Aunque hay que decir que en esta familia todo es posible y la añoranza de los 'abrazos rotos' al más puro estilo Almodóvar pueden ablandar el corazón de Borja. A día de hoy, madre e hijo hace muchas semanas que no se cruzan ni una sola palabra y, según ellos, eso duele.
Así, Borja y Blanca hacen responsable a la baronesa de los recientes "bulos" que circulan sobre ellos. Desde las dudas de cómo su nuera volvió a quedarse embarazada, hasta si el joven Thyssen podría ser el padre de una de la gemelas de Tita. Ante todo, la pareja deja claro a sus amistades que pasado el periodo pertinente quieren volver a intentar quedarse ‘embarazados’.
Blanca Cuesta pasó meses atrás momentos muy difíciles a raíz de la pericarditis vírica sufrida. La mujer de Borja se ha cuidado mucho. Ha evitado exponerse a los aires acondicionados, siendo su recuperación óptima. La pareja no se cansa de repetir que su embarazo, frustrado al final, fue producto del amor sin trampas de laboratorio.
Así las cosas, cuando todo vuelva a su sitio, el feliz matrimonio retomará el camino de la paternidad. Si bien el segundo embarazo les pilló por sorpresa, Borja y Blanca querían aumentar la familia, pero todo se precipitó y estado de gestación llegó antes de lo previsto.
Ambos dicen que ahora será todo distinto. Quieren ir a por el hermanito para Sacha desde el minuto uno. Según cuentan ellos a sus allegados, el pequeño de la casa ha sido el artífice de que todos los problemas generados con Tita quedaran en un segundo plano.
Tras pasar el verano en Ibiza y su traslado forzoso a Barcelona, no tienen intención de moverse más. Su marcha a Madrid se ha paralizado por una cuestión logística. Si en un principio habían visto una casa en la capital que les gustaba, alguien se les adelantó en la compra.
Respecto a su trabajo en el museo, hoy por hoy parece difícil que Borja vuelva a pisar el Thyssen, a pesar de su preparación y sus cursos de arte impartidos recientemente. El tiempo dirá si madre e hijo vuelven a unirse, mientras el corazón de Tita está ‘partío’ como el de Alejandro Sanz.
La incomunicación entre Borja Thyssen y su madre sigue dando que hablar. Tras los últimos acontecimientos, parece que el primogénito de Tita no está dispuesto a dar su brazo a torcer. El joven matrimonio Thyssen habría comentado a sus más allegados que “nunca más”, refiriéndose a las relaciones con mamá Carmen.