Los dos minutos que Bruni pasó con Hemingway, Picasso y Buñuel
Se deduce de la última parte de su filmografía que a Woody Allen, como a Hitchcock, le van más las rubias. Aunque siempre se puede hacer
Se deduce de la última parte de su filmografía que a Woody Allen, como a Hitchcock, le van más las rubias. Aunque siempre se puede hacer una excepción si la morena que acude al casting es la primera dama de Francia. Contaba ayer el director neoyorquino, antes del estreno de Medianoche en París en el festival de festivales, que le hizo a Carla Bruni una proposición indecente en un desayuno en el Elíseo, con Sarkozy y la Torre Eiffel como testigos de excepción. La novia de Francia aceptó el envite interpretativo, pero le dejó plantado anoche en el altar de Cannes. No se la echó de menos y, aunque pueda parecer extraño, tampoco se la echa de más en la película.
Se deduce de la última parte de su filmografía que a Woody Allen, como a Hitchcock, le van más las rubias. Aunque siempre se puede hacer una excepción si la morena que acude al casting es la primera dama de Francia. Contaba ayer el director neoyorquino, antes del estreno de Medianoche en París en el festival de festivales, que le hizo a Carla Bruni una proposición indecente en un desayuno en el Elíseo, con Sarkozy y la Torre Eiffel como testigos de excepción. La novia de Francia aceptó el envite interpretativo, pero le dejó plantado anoche en el altar de Cannes. No se la echó de menos y, aunque pueda parecer extraño, tampoco se la echa de más en la película.