La baronesa Thyssen no vende el broche que perteneció a la Reina María Cristina
Aunque Christie's lo sacó en una subasta de joyas, la pieza no despertó mucho interés entre los compradores extranjeros y se quedó sin adjudicar
A Carmen Cervera no le han salido las cuentas. La viuda del barón Thyssen, que en varias ocasiones ha declarado que tiene patrimonio pero no dinero, decidió subastaruna de las piezas más especiales de su joyero y la operación ha sido un desastre.
Este miércoles, la casa de subastas Christie’srealizaba una puja de piezas de joyería muy especiales. Entre ellas se encontraba un broche que perteneció a la reina María Cristina. Tal y como informaron en el catálogo de Christie’s, se trata de un broche diseñado en 1879, montado en plata y oro y confeccionado a base de brillantes antiguos.
La pieza, que tiene un tamaño de 20 centímetros, fue un regalo de Alfonso XII a la reina el día de su boda. Tras la muerte de María Cristina, el broche pasó a manos de su hija, la infanta María Teresa.
La joya ha estado en manos de la baronesa Thyssen desde los años 80;sin embargo,Tita no ha visto otra solución para su problema de liquidez más que venderla. “Siempre da pena deshacerse de piezas especiales, ¿no?”, ha confesado en conversación telefónica con Vanitatis.“Lo vendo porque tengo mi colección prestada gratuitamente desde hace muchos años”, se ha justificado. Tal y como ha reconocido en esta conversación, los problemas de liquidez vuelven a aflorar en su vida.
65 millonesnuevos
El broche, que era una de las piezas más especiales, ha salido a subasta pasadas las nueve y media de la noche con un precio inicial de 576.000 euros. Tras varios minutos, la puja se cerró al alcanzar los 846.000 euros. Pese a que esta fue la cantidad más alta que se ofreció, la casa de subastas no ha vendido la pieza, ya que nadie mostró especial interés.
Hace tan solo cinco meses la baronesa se deshizo de Villa Favorita, la residencia suiza en la que tan buenos momentos pasó junto al barón. Con esta operación consiguió 65 millones de euros.
De esa cantidad, una parte la utilizó para comprar dos apartamentos en Andorra, donde en la actualidad tiene la residencia por cuestiones fiscales. Allí también vive su hijo Borja, aunque no lo hace su nuera, Blanca, ni sus nietos.
A Carmen Cervera no le han salido las cuentas. La viuda del barón Thyssen, que en varias ocasiones ha declarado que tiene patrimonio pero no dinero, decidió subastaruna de las piezas más especiales de su joyero y la operación ha sido un desastre.