La presentación de los mellizos de Alberto y Charlène vuelve a unir a los Grimaldi

La presentación oficial de los mellizos de Alberto y Charlène, los príncipes Jacques y Gabriella, ha servido para escenificar que los Grimaldi vuelven a ser una familia feliz y unida. Atrás quedan aquellos años en los que la relación entre la princesa Carolina y su hermana Estefanía era inexistente o en los que los primos Casiraghi y Ducruet apenas se hablaban. La calma ha vuelto a reinar en el pequeño principado de Mónaco y la cordialidad entre su familia real vuelve a ser notable.

A las 11:55 horas de la mañana, los soberanos aparecían en el balcón llevando a sus hijos en brazos. Alberto cargaba a Jacques, el heredero, y Charlène a Gabriella, quien, a pesar de haber nacido dos minutos antes que su hermano, es la segunda en la línea de sucesión al trono a causa de la vigencia de la ley agnaticia.

Hace ya unas semanas, los soberanos realizaron un posado fotográfico en el que mostraban a sus hijos pero ha sido este acto en Palacio el que se ha considerado como la presentación oficial de los mellizos. En Mónaco este acontecimiento se ha vivido como si se tratase de un día de Fiesta Nacional. Y es que cientos de monegascos han querido estar presentes en este histórico acontecimiento que será recordado durante años por las gentes del Principado. Algo así ocurrió con la presentación del príncipe Alberto, pues han pasado ya 56 años y la imagen de Rainiero y Grace con su heredero todavía sigue viva en la memoria de algunos ciudadanos.

Tras la presentación en el balcón, Alberto y Charlène han recibido a sus familiares en Palacio. Entre ellos se encontraba Carlota Casiraghi, quien ha asistido acompañada por su pareja, el actor Gad Elmaleh, en una clara muestra de que su relación se va consolidando. También ha estado presente los tres hijo de la princesa Estefanía, Paulina, Luis y Camilla. Ha llamado la atención que no estuvieran presentes Andrea Casiraghi y su esposa, Tatiana Santo Domingo, pues guardan una estrechísima relación con Alberto, aunque es posible que su ausencia se haya debido al segundo embarazo de la multimillonaria.

Los soberanos también han podido recibir el cariño de su pueblo en primera persona, pues por deseo expreso del príncipe Alberto, han bajado a las puertas de palacio y han saludado a sus conciudadanos. Allí les esperaban varias sorpresas como el baile un grupo de folclore monegasco y el cantar de un coro que ha dedicado varias canciones a los recién nacidos.