Silvia de Suecia cumple 75 haciendo frente a sus dramas y sin ganas de dejar el trono

Con una cifra tan redonda como esta, era de esperar que hubiera distintos actos de celebración del 75 cumpleaños de la reina Silvia de Suecia. Así, esta semana el Palacio Real fue el escenario de una recepción con distintas autoridades y representantes de distintas organizaciones y posteriormente se celebró un concierto navideño en la iglesia Hevig Eleonora, en el que estuvo acompañada por su marido, el rey Carlos Gustavo.

Suele decirse que el mejor regalo es tener cerca a su familia, así que en eso Silvia de Suecia puede estar contenta, pues su hija Magdalena, que vive en Miami con su marido, Chris O'Neill y sus hijos, ha vuelto a casa por Navidad con los suyos para celebrar este cumpleaños tan especial y estas tradicionales fiestas. Y, por cierto, los que sean muy monárquicos pueden acceder a la web de la familia real para hacer los pertinentes regalos a la reina, eso sí, no para ella sino para una de las distintas organizaciones benéficas a las que presta su apoyo.

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Esta semana la reina Silvia ha sido objeto de numerosos titulares, sobre todo por una sorprendente entrevista en la que ha hablado sobre el pasado nazi de su padre, Walther Sommerlath, un empresario alemán que había formado parte del partido de Adolf Hitler en 1934. Un escándalo que se destapó en 2002 y que ella no quiso creer, aunque cuando tuvo frente a frente los documentos que lo probaban no le quedó otro remedio que aceptarlo: "Cuando tuve ante mí la evidnecia negro sobre blanco tuve que aceptarlo". Eso sí, en esta entrevista ha tratado de justificarlo de alguna manera: "No quiero distanciarme del hecho de que se hizo miembro del partido, pero habría que pensar por qué lo hizo. Él y otros muchos no sabían lo que vendría después. Si lo hubiera sabido, no creo que lo hubiera hecho". Su padre, por cierto, murió el 21 de octubre de 1990, doce años antes de que la verdad viera la luz. "Han pasado ya treinta años de su muerte, así que pienso que ya es suficiente. Quiero decir al pueblo sueco que estoy relajada con este tema. Sé que mi padrfe no es la persona que otros han retratado", concluyó sobre uno de los episodios que más escándalos más grandes que tuvo que afrontar y también el dolor que supuso esta noticia.

En las declaraciones que ha concedido con motivo de su 75 cumpleaños manifestó también que no tiene intención de retirarse y que seguirá al lado de su marido, Carlos Gustavo, trabajando mientras se sienta capacitada para ello.

La entrevista, que tuvo también un marcado carácter social, mostró la preocupación de la reina por problemas como las drogas y la violencia entre la juventud. Una causa en la que ha depositado muchas de sus energías desde que se casó con el rey Carlos Gustavo en 1976, pues ha trabajado con distintas organizaciones benéficas para ayudar a los niños y a los adolescentes a encontrar su propio camino. El suyo no ha sido fácil, pues además del escándalo de su padre, tuvo que lidiar con las infidelidades de su marido, a quien, tenemos que dar por hecho, habría perdonado.