La fecha de significado especial que Carlos Felipe y Sofía de Suecia han elegido para el bautizo de su hija, la princesa Inés

Se celebra este 2025 el décimo aniversario de la boda de los príncipes Carlos Felipe y Sofía de Suecia. Y no ha sido desde luego casualidad que la fecha, con un significado tan especial, haya sido la misma que han elegido para el bautizo de su hija, la princesa Inés. Así, la Casa Real ha anunciado que el sacramento tendrá lugar el día 13 de junio, justo diez años después de aquel romántico 'sí quiero'.

Como sucedió con el décimo aniversario de boda de la princesa Victoria y Daniel Westling, esperábamos que desde palacio se festejara la jornada de alguna forma especial. Quizá con alguna sesión de fotos o unas palabras de la pareja protagonista. Pero lo que nos espera es mucho mejor.

Ese día, 13 de junio, volveremos a ver de nuevo a toda la familia real. Será en la capilla del Palacio de Drottningholm, el mismo lugar que suele acoger los bautizos de los miembros del clan Bernadotte. Los felices padres de la criatura, a la que daban la bienvenida el pasado febrero, tendrán un día grande por partida doble, ya que no solo estarán cumpliendo diez años como marido y mujer, sino que también estarán celebrando el sacramento de su hija pequeña.

Tal y como ha informado la Casa Real, el bautizo correrá a cargo del lo realizan el predicador principal de la corte, el obispo Johan Dalman, y el pastor de la Iglesia Real, además del predicador regular de la corte Michael Bjerkhagen. Después de la ceremonia, habrá una recepción para los invitados seguida de un almuerzo privado, también en palacio. Eso sí, se esperan fotografías tanto de la llegada de asistentes como del propio servicio religioso, como es habitual.

Para hacernos una pequeña idea sobre cómo será el bautizo, tenemos que tomar como referencia el último que se ha celebrado dentro de la familia real, el del príncipe Julian, tercer hijo de Carlos Felipe y Sofía. Aquel fue el primero que tenía lugar tras la decisión de su abuelo, el rey Carlos Gustavo, de reducir el núcleo duro de la Casa Real. De ahí que fuera también el primero en el que el bautizado no recibía el tratamiento de Alteza Real.

También se decidió que no fuera retransmitido por televisión, a diferencia de los del resto de sus nietos, y será lo mismo que pasará con el de la pequeña Inés, el próximo 13 de junio: no habrá señal en directo de la ceremonia.

Es posible que sí encontremos algunas diferencias entre uno y otro, puesto que el del príncipe Julian tuvo lugar en el verano de 2021, en plena pandemia. Y aunque Suecia no fue un país que se caracterizara precisamente por sus restricciones sanitarias, sí se notó en el número de invitados, algo que el próximo 13 de junio podría ser muy superior.

Como siempre, los padrinos se desvelarán horas antes de la ceremonia. Es tradición que el pequeño que recibe las aguas bautismales tenga cinco, siempre elegidos por sus padres, por lo que nada hace pensar que el caso de la princesa Inés será diferente. Como sus hermanos y sus primos, lucirá el mismo faldón de cristianar que los Bernadotte llevan luciendo desde hace más de 100 años, con su nombre y la fecha del bautizo grabados

Como siempre, el look de Sofía de Suecia será uno de los puntos en los que fijarse. Siempre impecable, no dudó en lucir para el bautizo de Gabriel, su segundo hijo, el traje tradicional de Dalarna, del ducado que el rey Carlos Gustavo otorgó al niño al nacer. Y aunque en los otros dos bautismos optó por ropa civil, no se descarta que elija para esta nueva cita el traje tradicional de Västerbotten, el ducado que ostenta la pequeña desde su nacimiento.

Así, como decíamos, el próximo 13 de junio será una fecha muy especial para Carlos Felipe y Sofía de Suecia. Además del bautizo de su hija, también celebrarán los dos años de aquel día en el que se dieron el 'sí quiero', no solo de palabra, sino también con unas miradas de amor que todos los presentes aún recuerdan.