Así es la casa de lujo en la que Federico y Mary de Dinamarca vivirán durante unos meses: 30 habitaciones y pista de equitación
El 5 de mayo, los reyes daneses ocuparán la Cancillería de Fredensborg, un edificio anexo al castillo que es muy especial para ellos
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Siguiendo la línea de transparencia total (o casi), la Casa Real danesa ha comunicado que, a partir del 5 de mayo, Federico y Mary vivirán unos meses en la Cancillería de Fradensborg, manteniendo así la costumbre de cada año. No es un lugar cualquiera. No solo se trata de una casa de lujo con 30 habituaciones y pistas de equitación, sino que es el primer hogar que ocupó la pareja después de casarse.
La Cancillería es un edificio anexo al castillo del mismo nombre, un lugar clave en las celebraciones oficiales de la Casa Real, rodeado de un entorno mucho más natural que el de Amalienborg, su residencia oficial, mucho más urbano. De ahí que sea el lugar escogido para pasar la primavera y el verano, alternándolo así con el palacete de Federico VIII, donde los reyes pasan el resto del año y tiene lugar el habitual trabajo de despacho.
Fredensborg tiene una historia bastante curiosa. Se construyó en el siglo XVIII bajo el reinado de Federico IV, aunque fue el rey Christian VI el que hizo las obras de ampliación, incluyendo esta Cancillería, que, dentro de unos días y durante unos meses, será la casa de los actuales reyes. El dato más curioso es que durante las guerras napoleónicas sirvió como hospital y después pasó a ser un almacén durante más de 100 años.
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Es, como decíamos, un lugar clave en el día a día de la Casa Real, también a nivel familiar. No solo es el escenario donde se recibe a mandatarios extranjeros, embajadores y demás cargos que visitan el país, sino que es una propiedad a la que la reina Margarita tiene especial cariño, pasando allí gran parte del año. De hecho, celebraba allí su cumpleaños, hace solo unos días. Además, concretamente la Cancillería sirvió como hogar para la reina Ingrid hasta su muerte, en el año 2000.
Pero si es especial para las dos reinas, no lo es menos para el actual monarca. La Cancillería de Fredensborg fue la primera casa que ocuparon Federico y Mary después de su boda, el mismo lugar donde sus dos hijos mayores, Christian e Isabella, vivieron sus primeros años. Fue en 2010 cuando, tras una costosa reforma, los entonces príncipes herederos hicieron del palacete de Federico VIII en Amalienborg su residencia oficial.
El hecho de que no esté muy lejos de Copenhague, la capital danesa, hace que el día a día institucional de la pareja no se vea afectado. Además, por sus características, necesita menos seguridad y sus hijos se sienten con más libertad. No es extraño, teniendo en cuenta el vasto terreno en el que está ubicado. Y es que, aunque pueda parecer un edificio pequeño, tiene una planta baja de 700 metros cuadrados, con otra superior de 450.
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En esas dos plantas están construídas las 30 habitaciones de las que dispone, además de varios salones y salas de estar y bibliotecas, que albergan una innumerable cantidad de libros, algunos de ellos muy especiales, no solo por la fecha en la que están, editados sino por el propio contenido.
Y si por la disposición del interior ya la podemos considerar una casa de lujo, el exterior no tiene nada que envidiarle. No solo dispone de una piscina, sino también de una pista para practicar la equitación, algo que la princesa Mary y su hija Isabella agradecen mucho y aprovechan, ya que ambas son grandes aficionadas a este deporte.
Esta pista fue renovada en 2020 a partir de la que existía originalmente, que había estado cerrada durante décadas. En el informe que la propia Casa Real publicó sobre esta renovación se detalló que los fondos para hacerlo fueron un regalo de la Agencia de Palacios y Cultura por el 50 cumpleaños del entonces príncipe Federico, en 2018, aunque la idea era pudiera utilizarla toda la familia real, como así es.
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En el recinto de Fredensborg también hay una capilla, que es el único edificio que separa la Cancillería del edificio principal. El lugar también ha sido escenario de importantes celebraciones familiares, ya que allí fue donde tuvo lugar la celebración de la confirmación del príncipe Christian, en 2021, y la de su hermana, la princesa Isabella, un año después.
Y la llegada de los reyes Federico y Mary a la que será su casa durante los próximos meses también será celebrada. El 5 de mayo a las 17:00 horas, la pareja será recibida oficialmente en Fredensborg por el Alcalde de la localidad, acompañados de banderas y cantos a cargo del coro de niñas de la iglesia del castillo y el conjunto de metales.
Siguiendo la línea de transparencia total (o casi), la Casa Real danesa ha comunicado que, a partir del 5 de mayo, Federico y Mary vivirán unos meses en la Cancillería de Fradensborg, manteniendo así la costumbre de cada año. No es un lugar cualquiera. No solo se trata de una casa de lujo con 30 habituaciones y pistas de equitación, sino que es el primer hogar que ocupó la pareja después de casarse.