El regreso de Johnny Depp tras el escándalo: de recaudar billones de dólares a recibir el bofetón de la crítica

Hollywood lo tiene claro: Johnny Depp siempre fue un enfant terrible del que la industria recelaba mucho antes de ser una estrella. Un rarito oficial encumbrado por Tim Burton y, en el fondo, muy parecido a su Eduardo Manostijeras. En el verano de 2003, 'Piratas del Caribe' lo convirtió en un icono mainstream; la persona que hizo de lo extraño y lo diferente algo para todos los públicos.

El Johnny Depp de los últimos años ha sido una figura trágica, apartada de los medios debido al juicio por supuestos malos tratos que le interpuso la que fuese su pareja, la actriz Amber Heard. En 2016 empezó su particular vía crucis: le impusieron una orden de alejamiento a raíz de esa misma demanda. Esos mismos días, la taquilla de 'Alicia a través del espejo', secuela de la cinta de Tim Burton, fue verdaderamente desastrosa, un punto de inflexión que muchos interpretaron como una caída en picado sin vuelta atrás.

En junio de 2022, tras seis años de trifulcas en los tribunales, se emitió un veredicto y Depp salió indemne. Amber Heard fue condenada por difamación y debía pagarle a su exmarido la friolera de 15 millones de dólares por haberlo señalado. "Hace seis años, mi vida, la de mis hijos, la de mis allegados, y también la de las personas que durante muchísimos años me han apoyado y han creído en mí, cambió para siempre", dijo él tras ese veredicto. Aunque muchas dudas planean sobre la decisión final del jurado, y la actriz de 'Aquaman' quiso, durante un tiempo, que se reabriese el caso. Además, en 2018 'The Sun' le había acusado de maltratador y Heard fue una de las personas que declaró en el juicio. El juez admitió 12 de las 14 acusaciones de violencia que tuvieron lugar entre 2013 y 2016. Entre ellas figuraban agresiones en la cabeza, un intento de asfixia con una camisa durante la luna de miel de ambos e insultos del calibre de "puta" y "zorra".

Lo cierto es que, desde el mencionado 2016, Depp ha sido defenestrado de todas las formas posibles. Fue vetado por Warner Bros para la nueva entrega de 'Animales fantásticos', por ejemplo. El estudio le pidió que renunciase como se le pide a un niño que regale a sus compañeros de pupitre los caramelos que tanto le gustan sin quedarse ni uno solo. Porque de las secuencias rodadas por Depp no sobrevivió ni una sola en el montaje final. En estos últimos años ha protagonizado más documentales por su guerra abierta con Heard, más artículos como protagonista indeseado de los debates en torno al maltrato que películas. Para el público español, su regreso a las carteleras se produce este mismo viernes.

Regreso a la francesa

Quienes conozcan a su Ed Wood, a su Jack Sparrow o a su Sombrerero Loco no se sorprenderán con que ese retorno sea mediante una película de época. Solo que esta vez no es Hollywood quien lo aúpa, sino Francia, un país en el que siempre se ha sentido a gusto desde su relación con Vanessa Paradis. La película gala 'Jeanne du Barry', centrada en la legendaria cortesana de Luis XV, es la que nos devuelve a Depp por la puerta... ¿grande? "Pomposa e inapetente", escribió Luis Martínez en 'El Mundo' tras ver la película en el Festival de Cannes. En este certamen tuvo lugar la puesta de largo del regreso de Depp como protagonista de un film. Atrás quedaba el escarnio público, los juicios y los editoriales poniéndole más verde que los trajes de Willy Wonka.

Pero la película no es el retorno a Ítaca que esperaban aquellos que siguen a Johnny desde que las garras de Freddy Krueger se lo tragaron en aquella cama de 'Pesadilla en Elm Street' en 1984. Ha pasado desapercibida, ha sabido a poco... Hoy por hoy no se sabe si Hollywood volverá a confiar en el probado talento de Depp, en este Lon Chaney moderno que siempre hizo gala de ser el actor de las mil caras. El único proyecto futuro que figura en su filmografía en IMDb es 'Johnny Puff: Secret Mission', cinta de animación de nacionalidad italoespañola a la que pone voz. De la meca del cine, lugar del que una vez fue uno de sus grandes baluarte, ni rastro.

Pese a su rentabilidad (la primera entrega de 'Piratas del Caribe' recaudó más de 654 millones de dólares en todo el mundo y la cuarta superó los 1.000, convirtiendo al actor y a su Jack Sparrow en oro puro), Depp siempre fue ese grano en la frente que no se revienta por miedo a que deje marcas en la piel. Digámoslo sin metáforas: era un actor complicado en los rodajes cuyos compañeros temían lo peor en cada jornada. No hay más que recordar aquel premio que entregó borracho para intuir que no debe de ser la persona más fácil del mundo.

Un historial complicado

Diciembre de 2010. Tras las malas críticas, los productores de 'The Tourist' ven avecinarse el desastre. La cinta acaba de sufrir un gran varapalo en el Festival de Venecia y eso obliga a que la promoción por Europa sea lo más mediática posible. Depp y su coprotagonista, Angelina Jolie, recalan en Madrid. Una compañera periodista nos contaba, recordando esa visita, el airado comportamiento del actor: "Estaba dando bufidos por todo y no era la persona más simpática del mundo. Miró con mala cara a la chica que le estaba dando un vaso de agua por tardar un momento cuando yo lo entrevistaba para el junket".

Pese a la hostia de 'The Tourist', en aquella época no había ser humano que le tosiese. Acababa de triunfar con otro taquillazo, el de la 'Alicia en el país de las maravillas' de su director estrella, Tim Burton, que pese a ser la adaptación más mediocre y simplista de la obra de Lewis Carroll, había superado el billón de dólares en taquilla.

Con los años, y tras el caso Amber Heard, muchos vieron ese mal carácter materializado en los tribunales. Los que no le perdonaban por ser el 'raro' ahora tenían un motivo de peso para odiarle: era un maltratador. "Esperan que estés a la altura después de una carrera en la que resulta que ganaste accidentalmente. Desde ese primer segundo, no eres nada más que mercancía. Tienen expectativas con otros 'Piratas'... Es genial si funciona pero, tío, es tremendo. Dios, tener eso como tu sello… Soy jodidamente tímido, tío. Vivo, en cierto modo, como un fugitivo”, dijo él en una entrevista.

¿Un nuevo Brando?

En la ecuación también entraba un pasado políticamente incorrecto para un actor que, como los Brando o los Clift del pasado, nunca estuvo orientado a agradar a todos los públicos. En 1994, mientras rodaba 'Ed Wood', fue arrestado por destrozar una habitación de hotel en Nueva York. La anécdota dio la vuelta al mundo y el actor aseguró que todo había sido culpa de un armadillo que había encontrado escondido en un lugar de la habitación. Contó que el animal, antes de huir por la ventana, lo había destrozado todo. Las carcajadas de la prensa se oyeron en todo el planeta.

No fue la única polémica a la que tuvo que hacer frente. En el 99, mientras 'Sleepy Hollow' se convertía en su título más taquillero hasta entonces, fue detenido por estar involucrado en una pelea con 'paparazzi' en la puerta de un restaurante en Londres. Por aquel entonces parecía encontrar la estabilidad sentimental en los brazos de Vanessa Paradis, que ese día en el que casi se pega con los fotógrafos cenaba con él en la capital londinense. Tras un matrimonio fallido con Lori Anne Allison, una relación exprés con Winona Ryder que le dejó un tatuaje en el hombro ('Winona Forever', rezaba) y un noviazgo de cuatro años con Kate Moss, la francesa Paradis supuso un breve remanso de paz para la estrella. Además, le dio dos hijos: Lily-Rose y John Christopher. Después llegó Amber Heard y con ella un escándalo mayúsculo que parece haber marcado para siempre su carrera.

A la vista de los discretos resultados de 'Jeanne du Barry' no parece que la estrella de Johnny Depp vuelva a brillar como antes, pero nunca se sabe. Como comentaba su esperanzada encarnación de Ed Wood, siempre pueden llegar tiempos mejores: “¿La peor película que ha visto? Bueno, la próxima será mejor”.