Las 4 lecciones de estilo que hemos aprendido de las danesas para este otoño
Las expertas escandinavas se han vuelto a lanzar a las calles y de sus looks hemos desgranado las que serán las cuatro tendencias esenciales de la temporada
Había ganas de moda y se ha notado en el street style. En la última edición de la Copenhague Fashion Week no solo hemos visto como algunas de las firmas autóctonas más internacionales, casos notables como Gestuz, Rodebjer o Rabens Saloner, presentaban sus nuevas propuestas de temporada en unos espectaculares (y esperadísimos) desfiles al aire libre; en las calles de la capital danesa, sus prescriptoras de moda lo han dado todo.
Tras el parón por la pandemia y sus consecuentes ediciones digitales, estas dictadoras de tendencias natas han salido dispuestas a triunfar y solo tenemos que echar un vistazo a la multitud de muestras recogidas para verificar que lo han logrado. Sus increíbles looks han alcanzado la calificación de sobresaliente en el acto y en ellos se esconden cuatro de las grandes corrientes para este otoño de 2021. Vamos a desgranártelas una por una. Toma nota, estas son las 4 nuevas lecciones de estilo que hemos aprendido de las danesas.
El regreso de la bomber
Ellas con sus outfits no han hecho nada más que constatar lo que era un secreto a voces en la industria de la moda: la bomber ha vuelto. Como bien sabes, hablamos de esa cazadora de estilo aviador, corte bombacho, tejido brillante y fit amplio que era imprescindible en la década de los 90 y que recuperó su estatus a mitad del nuevo milenio. Olvidada en el cajón de sastre, toca recuperarla y actualizarla con el resto de prendas.
Con sus señas de identidad inalteradas y, por ende, su patrón original, este otoño las danesas han confirmado su regreso y hoy la bomber es ese diseño esencial que emplean para rematar los looks de entretiempo.
¿La única novedad? Viene dada por su tamaño. En las calles de Copenhague, la bomber básica que visten sus prescriptoras es de corte oversize; esto es, se lleva la chaqueta en una versión que tiende a las medidas propias del vestidor masculino.
El pañuelo a la cabeza
Si este último verano hemos sido testigos de cómo las influencers se las ingeniaban una y otra vez para enseñarnos nuevos y revolucionarios usos del pañuelo más allá de su función como accesorio decorativo, con el cambio de estación su práctica se limita a un único menester: anudado en la cabeza y a modo pirata, palabra de las danesas.
Recogiendo parte de la cabeza, en concreto la frente y el nacimiento del cabello, el pañuelo se remata con un nudo en la parte posterior. Un modus operandi que aporta un soplo de aire fresco capaz de romper con la formalidad de los outfits más regios, o poner el toque cool a estilismos minimalistas.
Dos parecen ser sus requisitos obligatorios. Uno, el pañuelo debe ser de seda o al menos en un material satinado similar, y dos, ese tejido tiene que presentar un motivo estampado. Los prints de flores, gráficos y con logos son los más comunes y habituales en el street style de Copenhague.
El cárdigan XS como top
Otra lección que las editoras de moda nos han avanzado durante los meses estivales y que con la llegada del otoño queda probada como una de las grandes triunfadoras sobre el asfalto: llevar el cárdigan en tamaño XS a modo de top, toma nota, prescindiendo por completo de la ropa interior.
Una práctica que se mantiene y cobra un mayor protagonismo con faldas de largo midi o pantalones anchos de tiro alto como piezas compañeras en el look.
Esta chaqueta de punto diminuta puede ser monocolor o fusionar varios tonos, de manga larga o abullonada al codo y estar confeccionada con tejidos livianos o gruesos, pero lo que parece inalterado es su escote en pico, su fit ajustado y su largo cropped, tres detalles impepinables en su diseño.
La americana en tamaño descomunal
Novedad, novedad como tal no es, pero de las primeras americanas XL que precisamente pusieron de moda las danesas y que poco tardaron en extender su dominio por el resto del mundo a adquirir una dimensión descomunal nunca vista como son las que lucen ahora.
Revalidando el título como su chaqueta predilecta, lo cierto es que su puesta en práctica más sencilla no puede ser: es la blazer de siempre con un patrón clásico y una estructura rígida y armada en un tamaño superior, vamos, en una talla más a la que ya llevabas habitualmente.
Aparte del rollazo evidente que le damos a nuestro outfit, la americana gigantesca resulta muy práctica y cómoda, y gracias a ella nos olvidamos de un plumazo del tedioso asunto de ir ceñidas sin ningún motivo aparente. Gracias, danesas.
Había ganas de moda y se ha notado en el street style. En la última edición de la Copenhague Fashion Week no solo hemos visto como algunas de las firmas autóctonas más internacionales, casos notables como Gestuz, Rodebjer o Rabens Saloner, presentaban sus nuevas propuestas de temporada en unos espectaculares (y esperadísimos) desfiles al aire libre; en las calles de la capital danesa, sus prescriptoras de moda lo han dado todo.