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Recorremos con David Summers de Zahara a Madrid por sus paraísos gastro
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Recorremos con David Summers de Zahara a Madrid por sus paraísos gastro

A punto de presentar el esperado concierto de Hombres G en el Teatro Real de Madrid, su líder, David Summers, nos desvela su agenda de ocio más personal

Foto: David Summers. (Mario Larrode)
David Summers. (Mario Larrode)

Los Hombres G, con algo más de 35 años de carrera musical, siguen en lo más alto llenando estadios, emocionando a sus fans, estrenando discos -'La esquina de Rowland'- y más. Al bajar del escenario, nos descubre esos paraísos gastro donde a David le gusta compartir risas y tertulias con sus amigos, lo que le divierte curiosear librerías antiguas en Madrid y su pasión por el boxeo, la poesía, James Brown y la luz espectacular de Zahara, el paraíso gaditano donde desconecta del mundo.

Foto: David Summers, en una imagen de la película 'Sufre mamón' de 1987. (Manga Films)

El desayuno más sabroso: "Suelo desayunar siempre en casa, aunque a veces voy a El Varadero, en Atlanterra, Zahara de los Atunes. No soy de mucho comer en el desayuno, a no ser que esté en un hotel, pero me encanta desayunar junto al mar. Soy de zumo, café con leche y tostada, a ser posible con aceite o manteca colorá, aunque la dieta y el colesterol me aconsejan que no debería".

Cena entre amigos: "Cuando estoy en Zahara voy a Gaspar (Alcalde Varo Valdés, 10), a La Sal (Urb. Atlanterra Playa, 73), donde preparan pescados riquísimos, a Pradillo (Pº del Pradillo, 65), el Hotel Antonio (Crtra. de Atlanterra) para ver a mis amigos y disfrutar del atún... La gastronomía en Zahara es impresionante. En Madrid voy a La Vegana (Moscatelar, 1), el bar nuestro de cada día, o a Varela Café (Preciados, 37), donde me reúno con amigos escritores, músicos y periodistas y celebramos las tertulias más interesantes y divertidas de la ciudad".

De tapas: "Por el centro de Madrid siempre, sobre todo por la Plaza Mayor, plagada de bares maravillosos donde tapear. En Zahara mi ruta pasa por La Palma (Crtra. Atlanterra, 60), La Almadraba (María Luisa, 15), La Jábega (Tomillo, 7) y El Vapor (Pérez Galdós, 7), en la parte antigua del pueblo".

Al dente: "Para tomar un buen plato de pasta voy a Numa Pompilio (Velázquez 18), en Madrid, la comida está muy rica y el sitio es encantador. En Nueva York elijo Carmine’s, en la Calle 44; siempre pido pasta con albóndigas. También me gustan los spaghettis al ajo y guindilla y a la carbonara".

En el chiringuito: "Uno de mis favoritos es El Pez Limón (Pº del Pradillo s/n), en Zahara, con buen ambiente y música en directo. Muy agradable al atardecer y por la noche".

Una bodega: "No entiendo mucho de vinos, la verdad. Siempre he sido de cerveza y ahora ya, ni eso".

PARA COMPRAR

Básicos de moda: "Compro ropa muy sencilla y no demasiado cara, nunca me ha interesado la moda. Cuando estoy en Estados Unidos aprovecho para comprar americanas y pantalones en Banana Republic pero casi todo el año voy con jeans y camisetas lisas. Me gustan las zapatillas Adidas vintage y los zapatos 'creepers', como los de los 80’s, porque me recuerdan a mi juventud".

Complementos de capricho: "Soy fiel a las gafas Ray-Ban, las he llevado toda mi vida. Los relojes me dan un poco igual, aunque tengo un Tag Heuer Mónaco, como el de Steve McQueen, que me encanta. Ahora ando con un iWatch que me regaló mi chica".

Hora de lectura: "Me encantan las librerías antiguas como San Ginés (Pasadizo de San Ginés, 2) o La Cuesta de Moyano, en Madrid. Tengo una colección muy bonita de libros antiguos, muchos de mi padre y otros que he comprado yo. Me gustan los libros de historia, las biografías de personajes interesantes y los cómics antiguos. Leo mucho a mi amigo Juan Eslava Galán, sus series para escépticos me encantan. Y siempre leo poesía, desde que era un chaval".

PARA CUIDARME

En forma: "No me gusta hacer deporte, me gusta el boxeo. Practicarlo y verlo. Voy a boxear al gimnasio de mi amigo Cristian Morales, Morales Box, en Madrid. También me divierte andar, ir caminando a cualquier sitio que esté a menos de 45 minutos en Madrid y dar larguísimos paseos (de horas) con mi madre en la finca que tenemos en Santa Olalla del Cala, en la sierra de Huelva. Tiene 85 años y nadie puede con ella".

Un spa para desconectar: "Termas Pallarés (Av. de la Constitución, 20), en Alhama de Aragón, pegado al Monasterio de Piedra. Un balneario natural con historia, un gran restaurante, masajes y aguas termales. Mucha paz y silencio. Mola mucho".

PARA VIAJAR

Hotel de ensueño: "La Bobadilla (Crta. Salinas-Villanueva de Tapia, km. 65), en Granada, perfecto para descansar, y el Capo la Gala (Via Luigi Serio, 8), en la costa amalfitana, cerca de Nápoles, aunque he estado en tantos hoteles bonitos en mi vida que me cuesta elegir uno, la verdad".

Museos top: "Mi favorito es el Prado. He ido muchas veces y siempre lo disfruto como la primera vez. ¿Mis pintores preferidos? Velázquez, por encima de todos. Después Goya, Picasso, Van Gogh, El Bosco... y mi admirado Augusto Ferrer Dalmau, pintor de batallas, con el que paso mañanas enteras embobado viéndole pintar en su casa. Un genio de nuestra época y uno de mis mejores amigos".

Sport time: "Si hay un espectáculo deportivo que se me ha quedado en la memoria es la final del Mundial de fútbol del 82 en el Santiago Bernabéu, que pude ver con mi padre hace ahora 40 años. Nunca lo olvidaré. Y algo que tengo pendiente, pero que haré, es ver un campeonato del mundo de los pesos pesados en Las Vegas, Nueva York o donde sea".

Hablando de música: "Si me preguntan a qué artista me hubiera gustado ver en directo, digo James Brown. Nunca olvidaré cuando pude ver a Frank Sinatra (tengo su autógrafo) y me fliparía ver a Billy Joel, Paul Simon, Wilco, Squeeze, Specials… antes de que desaparezcan como lágrimas en la lluvia".

Viaje pendiente: "Jamaica, por la música. La India, por los colores. Y me encantaría volver a Egipto".

Los Hombres G, con algo más de 35 años de carrera musical, siguen en lo más alto llenando estadios, emocionando a sus fans, estrenando discos -'La esquina de Rowland'- y más. Al bajar del escenario, nos descubre esos paraísos gastro donde a David le gusta compartir risas y tertulias con sus amigos, lo que le divierte curiosear librerías antiguas en Madrid y su pasión por el boxeo, la poesía, James Brown y la luz espectacular de Zahara, el paraíso gaditano donde desconecta del mundo.

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