Llega la Revolución Limo: mobiliario de diseño de plástico reciclado y mucho corazón eco

Sostenible se ha convertido en el mantra de la mayoría. Reclamo de grandes marcas, requisito ineludible para que empresas y gobiernos avancen hacia una sociedad más amable, más verde y respetuosa con el entorno. Todo es —o debe ser— sostenible. Pero ¿corremos el riesgo de que lo loable de la causa se pierda por puro agotamiento?

Puede. Nos movemos por oleadas, por modas efímeras que asumimos con tanta pasión como las dejamos pasar, pero la sostenibilidad no atiende a temporalidades, sino a la urgencia por buscar nuevas fórmulas que le devuelvan al planeta lo mucho que le hemos quitado. Y aquí, en medio de esta lucha entre el deber y el ser, nace Revolución Limo, tras la reflexión de su fundadora, Marta Foncillas, sobre si merecía la pena seguir consumiendo recursos naturales pudiendo utilizar material recuperado.

Marta, abogada antitrust de formación, ofrece con Revolución Limo una nueva forma de entender el diseño y el interiorismo. La empresa ha tenido tan buena acogida que, pese a ser una marca joven, se ha colado en proyectos muy top. La hemos visto en ARCO 2021, en Madrid Design Festival 2022 a través de la exposición 'El diseño, o es sostenible o no es diseño', o en su colaboración con Mercedes-Benz para decorar su emblemático stand en la MBFW Madrid de este año. Y, ojo, también decorando uno de los videoclips de C. Tangana.

Hablamos con la alma mater de la firma sobre conciencia medioambiental y economía circular, y de cómo su propuesta —tan poco común en el mundo del interiorismo y la arquitectura— lleva ya transformadas toneladas de plástico. Ética, estética y un claro mensaje verde.

Cómo empezó todo

Marta confiesa que la chispa se encendió durante un viaje. “Estaba observando unas hamacas en un hotel premiado por su sostenibilidad. Me extrañaba que hubieran elegido hamacas de plástico, y no de madera, hasta que me di cuenta de que era reciclado. Entonces entendí que no hay nada más sostenible que esta alternativa”. Cayó en la cuenta de que reutilizar plástico para mobiliario urbano y de exterior era algo que ya se hacía, pero, sin embargo, no había nada en muebles de interior. “Ahí surgió la idea. ¿Por qué no crear muebles de diseño de plástico reciclado?”.

Principales obstáculos

“¡Muchísimos! —confiesa nuestra protagonista—. Crear una empresa desde cero es, de por sí, un gran reto. Además de esto, Revolución Limo plantea una nueva forma de hacer las cosas, como recurrir a plástico reciclado como materia prima, una opción poco habitual al principio en el mundo del diseño y el interiorismo”. Foncillas siempre se había considerado una pionera en el sector, lo que podría entenderse como una ventaja, hasta que se dio cuenta de que en realidad lo que tenía por delante era un inmenso reto.

"La mayoría de personas no quieren innovar, prefieren opciones más conservadoras"

Tus errores

“¡Muchísimos también! Cuando miro atrás, me doy cuenta de que decidí invertir en algunas iniciativas innecesarias. Podría haber aprovechado esos fondos para otras iniciativas que nos habrían venido muy bien. Pero es inevitable aprender por el camino. Además, siempre pienso que las cosas van a ser más fáciles y rápidas de lo que luego son. Es una especie de optimismo incurable del que adolezco que, al fin y al cabo, viene bien para emprender”.

Tus aciertos

Marta está convencida de que está apostando por el material del futuro. “Tengo clarísimo que en unos años el plástico reciclado será una de las principales opciones a la hora de elegir material para mobiliario, revestimiento o cualquier otra aplicación”. Cada año se producen 13 millones de toneladas de plástico y, según el informe Global Plastics Outlook de la OCDE, solo se recicla el 9%. “Tenemos mucho camino por recorrer hasta alcanzar una economía plenamente circular, y un paso absolutamente necesario es recurrir al plástico reciclado en lugar de seguir consumiendo recursos naturales al poner en marcha nuevos proyectos”, sentencia la fundadora de la firma. Junto a Foncillas encontramos la llamada Comunidad Limo, "compuesta por una serie de diseñadores, interioristas y expertos en medioambiente absolutamente comprometidos con la búsqueda de alternativas sostenibles para el sector", añade.

Una anécdota

Para historia, la de la mesa de centro Bloque, nacida para ser protagonista de cualquier espacio, incluso comparte pantalla con C. Tangana en el videoclip ‘La culpa’. “Es una pieza que se compone de dos módulos y ha tenido un gran éxito desde su lanzamiento, debido a su estilo innovador”. Lo curioso es que el diseño surgió por las limitaciones que presentaba el material. “Por aquel entonces, los paneles de plástico reciclado con los que trabajábamos eran de 1 metro por 1 metro –ahora afortunadamente ya contamos con paneles de gran formato que facilitan mucho los diseños–. Como queríamos hacer una mesa de centro de mayor dimensión, creamos una pieza ‘partida en dos’, y resultó ser un gran acierto. ¡Gusta muchísimo!”.

La clave de tu éxito

La pasión y compromiso de Marta resulta contagioso y se puede palpar en cada pieza que expone. “La ilusión, sin duda, es la clave de nuestro éxito. Tras muchos años de trayectoria profesional en otro sector, un día decidí trabajar únicamente en proyectos cuyo propósito y valores pudiera compartir. De eso trata todo”.

Tu día empieza con…

“Biberones, ladridos de perros, correos electrónicos y llamadas de trabajo, todo junto y sin orden aparente. Mi trabajo y mi vida personal están muy mezclados, no son compartimentos estancos. Nuestro showroom está cerca de casa y eso facilita las cosas”.

Y acaba con…

“Aunque sigue habiendo biberones, paseos a los perros y correos electrónicos, mi marido y yo siempre nos reservamos un ratito para cenar juntos y charlar sobre cómo nos ha ido el día”.

Consejo para emprendedores

La sostenibilidad está en el ADN de Marta y de Revolución Limo, como corroboran sus palabras: “Los proyectos que merecen la pena tienen un propósito, además de ser viables económicamente. Les recomendaría que se dedicaran a algo que aporte su pequeño granito de arena para hacer de este mundo un lugar mejor”.

¿Ha merecido la pena luchar por tu sueño?

"¡Por supuesto! Revolución Limo es un proyecto por el que he luchado mucho, pero que también he disfrutado desde el primer momento. Mi mantra es: ¡hay que seguir! Y así será", sentencia nuestra emprendedora eco.