Marisol cumple 71: los supuestos abusos y la muerte que han empañado su último año
Doña María, como todo el mundo la llamaba, murió con 95 años. Ella fue una pieza fundamental en la carrera de la niña prodigio
Pepa Flores , que este lunes ha cumplido 71 años, sigue queriendo ser Pepa Flores, no Marisol. Ni siquiera ahora, cuando los supuestos abusos que sufrió de niña han vuelto a salir a la luz de la mano de 'Vanity Fair'. Flores sigue regida por un principio que ha mantenido durante 30 años: el silencio. También con respecto a la muerte de su madre. Según pudo confirmar Vanitatis, María González Moriana, progenitora de la artista, falleció en Málaga el pasado 2 de septiembre a los 95 años. Doña María, que así la seguían llamando, fue un personaje fundamental para entender la carrera de la pequeña Marisol.
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Fue ella la que la acompañó en sus giras por todo el mundo (incluyendo una a Japón) y la que estuvo presente en rodajes como los de 'Un rayo de luz' o 'Ha llegado un ángel', primeros éxitos de una niña que se convirtió en el gran fenómeno pop de la España franquista. Tal era el amor que doña María sentía por su hija que, allá por mayo de 2015, asistió en silla de ruedas a 'El resplandor de un mito', exposición con medio centenar de retratos de Marisol. La anciana se mostró visiblemente emocionada ante las muestras de cariño hacia su hija que, una vez más, prefirió quedarse en casa. “Ella tiene la puerta abierta”, aseguraban los organizadores de la muestra.
Doña María es, precisamente, una de las razones que esgrime el entorno de Pepa Flores para poner en tela de juicio el tema de los abusos. La base de la historia está en unas conversaciones entre ella y Paco Umbral en las que la propia artista reveló detalles escabrosos de su carrera infantil. Abusos sexuales, para ser más exactos. “¿Tú crees que los padres de ella habrían consentido eso? Me resulta bastante increíble. A mí jamás me ha comentado tal cosa (…) La madre siempre estuvo junto a ella y no en una pensión de mala muerte como se ha dicho”, asegura a Vanitatis una de las personas más cercanas a la artista.
Aquella supuesta conversación entre Marisol y Paco Umbral, que hoy se guarda en la fundación que lleva el nombre del escritor, es bastante controvertida. “Me llevaban a un chalet de El Viso y allí había gente importante, gente del régimen, a verme desnuda, a mí y a otras niñas. A mi madre, cuando venía a verme, los Goyanes la ponían a comer en la cocina”, decía la artista. Años más tarde, la propia Marisol se desdijo y desmintió la historia a uno de sus biógrafos, Javier Barreiro. Y, como siempre, lo hizo indirectamente, sin abrir la boca. “Lo único que Barreiros le pidió a ella cuando escribió 'Marisol frente a Pepa Flores' es que tachase lo que no era real y ella tachó precisamente esa historia”, añaden desde su entorno.
Verdad o mentira, lo cierto es que Pepa Flores quiere olvidar aquella etapa y que alguna vez fue Marisol. Por esa razón, ni siquiera se molesta en volver a comentar aquello que una vez le pudo contar a Umbral. Lleva años siendo una persona anónima que huye de los ecos de su propio mito; una leyenda que, como todo mortal, ha vivido con tristeza la reciente muerte de su madre en los últimos meses. Al fin y al cabo, doña María era la única mujer en el mundo para la que Marisol era, simplemente, su 'niña'.
Pepa Flores , que este lunes ha cumplido 71 años, sigue queriendo ser Pepa Flores, no Marisol. Ni siquiera ahora, cuando los supuestos abusos que sufrió de niña han vuelto a salir a la luz de la mano de 'Vanity Fair'. Flores sigue regida por un principio que ha mantenido durante 30 años: el silencio. También con respecto a la muerte de su madre. Según pudo confirmar Vanitatis, María González Moriana, progenitora de la artista, falleció en Málaga el pasado 2 de septiembre a los 95 años. Doña María, que así la seguían llamando, fue un personaje fundamental para entender la carrera de la pequeña Marisol.