Ada Colau: su vida cotidiana con sus hijos contada (sin cortapisas) por ella misma

Hace dos días, Ada Colau publicó una fotografía en su perfil de Instagram en la que aparece tumbada en su cama. Un simpático selfie al que añade, con humor: "Miracolo! Un ratito sola en mi habitación". Enseguida comenzó a haber reacciones de personas populares, como los actores Itziar Castro o Jan Cornet, que entendían el sentido de este post, pues la alcaldesa, unida sentimentalmente a Adrià Alemany, es madre de dos niños, Luca y Gael, de nueve y tres años, respectivamente, que, como es lógico, requieren su atención de manera continuada.

La alcaldesa de Barcelona muestra de manera habitual su vida en la mencionada red social y quizás el testimonio más emotivo es el que publicó con motivo del Día de la Madre, cuando Colau subió una fotografía del menor, con una reflexión sobre cómo están viviendo el confinamiento y sobre la conciliación familiar: "Por fin, a las 12h de la noche, como en los cuentos, se quedó dormido. Le miro y me pregunto ¿seré buena madre?".

Colau encuentra la respuesta en el mismo mensaje: "De momento durante el confinamiento no he sido capaz de enseñarle letras ni números, ni siquiera seguir un horario. Eso sí, ha sido tan creativo como para pintar con rotulador todas las paredes blancas del piso; y ha tenido ingenio suficiente para escalar varias veces los muebles de la cocina y robar el azúcar. Salta en el sofá cada día, aunque le recordamos que no está permitido, y me exige jugar a cocinitas a cualquier hora: algunas veces, si no acepto, es capaz de llorar y chillar durante 20 y 30 minutos, como si le estuvieran torturando".

Y por último, llega a una conclusión incuestionable: "No sé si soy buena madre. Pero sé que le quiero con locura y que soy mejor persona desde que él y su hermano existen. Feliz día de las madres imperfectas".

Durante estos días de confinamiento, Ada ha mostrado diversas imágenes de sus hijos haciendo manualidades en casa (muy entrañables, dibujando un arcoíris y con el mensaje 'Pau al mon', paz en el mundo, en catalán), como ella misma había subrayado, o disfrutando del primer día que los niños pudieron salir a pasear, en los momentos más duros de la pandemia en los que las normas de confinamiento eran particularmente severas.

Colau también ha publicado en estos días desde su casa, desde donde ha estado trabajando estos dos meses, una vez que salió en el BOE el decreto del estado de alarma el pasado mes de marzo. Desde la oficina de su hogar hizo las declaraciones institucionales pertinentes y se dirigió a numerosos colectivos de nuestra sociedad, entre ellos a los niños, a los que les explicaba la complejidad de la situación actual y les agradecía el esfuerzo que estaban realizando.

El 18 de marzo, ella misma ejemplificaba las dificultades que estaban viviendo con sus pequeños y afirmaba: "Después de una semana de cuarentena sin salir de casa, hoy hemos tenido una pequeña crisis. Ha sido un día difícil con los dos peques. (...) Hemos hecho asamblea general. Nos ha sentado bien y hemos planificado el día de mañana para que vaya mejor". Al lado de este mensaje veíamos un folio, en el que leíamos en catalán: "ejercicio de relax", "cómo nos sentimos", "cómo ha ido el día", "programemos el día de mañana", "nuevo horario".

Dos semanas antes, el 3 de marzo, Ada Colau cumplía 46 años y también publicaba un par de fotografías con sus hijos ante la tradicional tarta: "Por la cocina solo encontré una vela de 7, apenas 39 de diferencia", manifestaba con humor, una cualidad que demuestra en la mayoría de sus post familiares, que son muy habituales en su perfil.