La cara y la cruz de María Pombo en 'El hormiguero': 30.000 seguidores más y dos retos

María Pombo arrasó anoche en ‘El hormiguero’. Una noche en la que debutaba en la pequeña pantalla tras un año en el que las noticias que ha recibido han sido o extraordinarias o terribles. Esta, sin duda, iba en la columna de las buenas; eso sí, con pros y contras.

Hizo récord de audiencia para el programa que conduce Pablo Motos (un “sueño” para ella) y, como era de esperar, ganó seguidores (más de lo que seguro pensaba). Pero también se mostró más expuesta que nunca (en televisión no hay filtros ni cortes en directo) ante su público: la inmensa legión de seguidores de 1,6 millones que tiene en su cuenta de Instagram.

Un medio de vida difícil de comprender para todos aquellos mayores de 30 años que ayer como cada noche encendieron sus televisores para descubrir a quién entrevistaría Pablo Motos. Tenemos el dato: 2.704.000 espectadores. El cuádruple de personas que cada día consume frenéticamente los stories de Pombo (700.000).

Unas cifras astronómicas que provocaron, según las estadísticas a las que ha tenido acceso Vanitatis, un aluvión de solicitudes de seguimiento en el perfil de la influencer: 30.000 desde que comenzó la emisión hasta la medianoche. Cifras que han seguido aumentando a lo largo del día de hoy tras protagonizar titulares en la mayor parte de los medios de comunicación de este país. La estrategia era redonda. Todo el mundo quería saber quién es la chica del momento.

Su entrevista, en la que mostró una faceta más cercana, transparente y naif que la que muestra a diario en sus redes, le sirvió para reinar en una noche en la que la televisión se posicionaba como su mejor aliado para el futuro. Un futuro lleno de oportunidades en el que se enfrentará a dos retos: ampliar su público a nuevos perfiles y franjas de edad sin caer por la constante exposición de su privacidad en ser 'carne de cuore'. Complicado equilibrio.

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Objetivo: ganar seguidores

“Para que su conocimiento crezca, necesita de medios mucho más masivos para darse a conocer que su propia red social. Da igual los millones de seguidores que ella tenga, el problema radica en los cientos de personas que cada persona sigue en Instagram y los cientos de miles de personas que quieren ser influencers. Si a través de tu Instagram sigues a más de 400 cuentas, es muy complicado que llegues a conocer realmente a quién estás siguiendo”, explica Santiago de Mollinedo, general manager Iberia & Latam de Personality Media.

Un conocimiento en profundidad que resulta complicado cuando todo lo que publicas pasa por una edición permanente y cuidada, un cuidado imposible en un medio como la televisión, sobre todo si hablamos de programas emitidos en riguroso directo. María Pombo sin filtro. Eso es lo que la audiencia quería y lo que ella les dio.

“Tiene que llegar a otros medios, para que su notoriedad crezca y llegue a ser un personaje realmente relevante. Ayer, gracias a los 40 minutos y 15,8% de share de Maria Pombo en ‘El hormiguero', tuvo un impacto mayor que todas sus redes sociales en lo que va de año y muy posiblemente ha conseguido levantar su notoriedad e interés, al darse a conocer a una audiencia que desconocía quien era”, continúa el experto en análisis de la percepción que tenemos de rostros conocidos. Y es que, como todas las influencers, María también tiene sus propias limitaciones.

“Su imagen destaca en las categorías ‘marcar tendencia’ con un 7,13 sobre 10 y por ‘atractivo’ con un 7,01”, asegura Mollinedo. Eso sí, muestra debilidades en algunas de las categorías que más mostró anoche: naturalidad y modelo a seguir. “En ambas no alcanza el aprobado, fruto sin duda de esa falta de reconocimiento a su actividad entre el conjunto de la sociedad”, añade.

Young queen

Pero ¿quién era su público hasta anoche? “Hemos analizado la imagen de María Pombo desde el 2016 hasta hoy. Cada seis meses ha sido incluida en nuestro estudio al igual que otros muchos influencers, dentro de los más de 2.600 personajes que incluye el estudio de mercado”, expone Mollinedo. Y es que, tal y como confiesan, de un tiempo a esta parte, “el influencer es una figura que tenemos que saber entender”.

Pero vamos al detalle. En 2016, cuando Instagram comenzaba a despegar, la conocía el 12% de las mujeres. Un dato que no ha parado de mejorar. En 2017, entre las mujeres menores de 30 años, su conocimiento llegaba al 30%, siendo a finales de 2019 y principios de 2020 cuando su notoriedad se mantiene en torno al 50%. Un crecimiento que la convierte en uno de los referentes de las jóvenes patrias (entre las mujeres de 31-45 o mayores de 46 años, no logra subir del 35%).

"Un dato bajo por el momento pero con expectativas de crecer este año, sobre todo tras su paso anoche por un programa tan familiar como ‘EH", afirma el experto.

Su vida personal en el foco

El crecimiento es su reto más “dulce”, y la sobreexposición como personaje del corazón, el más “amargo”. Si bien anoche defendió la profesión de los influencers como algo más que un hobbie o una moda, lo cierto es que la mayor parte de la entrevista corrió por otros derroteros más personales. Su embarazo, su enfermedad (que también padece su madre) o su marido fueron temas recurrentes en la entrevista.

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“A medida que los medios ponen el foco en tu vida privada sin nada más que contar, su marca es más atractiva para medios del corazón que buscan siempre nuevos filones, pero menos valorada por el consumidor. Le ha pasado a Paula Echevarría, que cuando ha dejado de poder ocupar papel por su éxito de actriz y ha trasladado el foco a su matrimonio o su tiempo libre, su imagen se ha debilitado un 20% los últimos dos años”, comentan desde Personality Media.

La televisión es, sin duda, un arma de doble filo en esta carrera que no para de crecer cada día.

Su carrera como empresaria

De hecho, al margen de su imagen, desde un punto de vista empresarial, hay que aplaudir a María Pombo. Con ayuda de su equipo (de 16 personas, tal y como confesó en directo), ha sabido enfocar su carrera no solo para arrasar en Instagram, sino para monetizar su tirón más allá de sus posts en redes sociales. ¿Cómo? Creando empresas de diferentes tipos de lo más rentables. “María ha sabido aprovechar esta ola y somos un país muy necesitado de ejemplos empresariales jóvenes a día de hoy”, destaca Mollinedo.

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Además de la colección de joyas en Agatha Paris que arrasa en ventas cada temporada, la influencer puede presumir de encabezar dos marcas de ropa. Una más informal dirigida a su público más joven (Tipi Tent), creada junto a su hermana Marta, su cuñado Luis y su marido, Pablo Castellano, y otra más 'adulta', para mujeres entre 25 y 35 años y que creó hace poco más de un año junto a su amiga Ichi Aragón (hija de Emilio Aragón), entre otros: Name The Brand.

No obstante, sus pinitos como empresaria no acaban aquí. El pasado marzo, consciente del boom de los festivales, puso en marcha su propio festival de varios días, Suavefest, con un éxito arrollador. Agotó las entradas para todos los días y consiguió reunir a los artistas del momento para locura de sus seguidores.

No hay duda de que María ha sabido potenciar y capitalizar al máximo su imagen y quién sabe si dentro de unos años es toda una estrella de la televisión patria.