Clara Chía y Gerard Piqué, Victoria Federica y Albert Arenas: noche de parejas vip en el concierto de Coldplay

El concierto de Coldplay en Barcelona fue recibido con gran alegría por parte de sus seguidores, que agotaron las entradas. Por suerte, para Gerard Piqué y su pareja, no lo hicieron antes de que ellos pudieran adquirir la suya, por lo que fueron una de las afortunadas parejas que pudieron presenciar el concierto de la banda en directo.

Piqué es un gran admirador de la banda de Chris Martin. Este no es el primer concierto en el que le vemos disfrutar de su música, pero sí que es el primero desde que se comenzó a rumorear que podría tener planes de boda con Clara, la mujer con la que comparte su vida desde su separación de Shakira, con quien estuvo más de diez años.

Una visita a una joyería hacía saltar todas las alarmas, pero la pareja ha preferido no hacer comentarios al respecto, y ha optado por mantener su silencio habitual, dejando que sea su lenguaje corporal el que hable por ellos. Se encontraban con las cámaras y no reducían el paso, pero sí esbozaban una pequeña sonrisa.

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Ambos llegaban con ropa cómoda y muy a la moda, con vaqueros y camiseta, decididos a disfrutar de la velada, a pesar de saber que todas las miradas estarían puestas en ellos, por lo menos hasta encontrar a la siguiente pareja entre el público.

Porque nadie quiso perderse el concierto de Coldplay y gracias a eso se pudo ver entre los invitados vip también a Victoria Federica, que se rumorea que podría estar viviendo los primeros pasos de una relación con el piloto Albert Arenas. Junto a él acudió a disfrutar de la música, aunque entraron por separado, lo que pone de manifiesto que entre ellos la relación es estupenda.

No fueron las únicas parejas que se dejaron ver entre el público, aunque sí fueron las que más interés despertaron. Messi y Antonela llevan toda la vida juntos y son muy queridos, pero no sorprende verles a pesar de que el estadio coreó el nombre del jugador de fútbol cuando descubrieron que estaba allí.

Acudió junto a su gran amigo Cesc Fàbregas y la esposa de este, con quien la pareja mantiene una gran amistad desde hace años. La música de Coldplay acompañó a los jugadores del Barça durante una de las mejores etapas del club, cuando Guardiola era entrenador del equipo y se la ponía para motivarles. Una gran noche, llena de música y de amor, que nadie se quiso perder.