Paco Arango nos habla de su nueva película con cameo de Rajoy: "Fue muy divertido y generoso"

El próximo 20 de octubre, Paco Arango estrenará su cuarta película, titulada ‘Mi otro Jon’. Una historia loca, divertida y tierna que, en sus inicios, tuvo un origen familiar. Concretamente, una conversación nocturna con su madre fue la génesis de este nuevo proyecto. Al igual que sus anteriores cintas, la recaudación irá destinada para la fundación Aladina, la cual creó en 2005 para ayudar al Hospital Oncológico de la isla de La Palma, donde se rodó la película y que a día de hoy es un referente en lo relativo a la lucha contra el cáncer infantil.

Bajo tal objetivo, son numerosos los profesionales de primera fila que han querido sumarse al mismo. Entre ellos destacan Carmen Maura, Aitana Sánchez Gijón, María Luisa Merlo, María José Alfonso, Marisol Ayuso u Olivia Molina más los cameos de Ana Obregón y Mariano Rajoy. Días antes de su lanzamiento, Vanitatis se reúne con el guionista para intentar descubrir algunos detalles sobre el rodaje y el propio film.

¿Qué nos puedes contar de ‘Mi otro Jon’?

Es muy divertida y para todas las edades. A Carmen Maura le dicen que le queda poco tiempo de vida, entonces comenta a sus tres amigas viudas que lo que quiere es viajar a La Palma y ver por última vez el mar. Sin embargo, su salud es tan delicada que hay que buscar una solución. Así, una científica le ofrece introducir su alma dentro del cuerpo de un recién fallecido.

Has conseguido ponerla en marcha con un proyecto de cuatro millones de euros…

Es una constante en mi vida y me sale bien, porque tengo un gran paraguas que me protege. Es difícil conseguir dinero, pero hay que confiar…

La película está protagonizada por figuras de nivel como Carmen Maura, Aitana Sánchez Gijón, Fernando Albizu... ¿Cómo logras convencerlas?

Para el actor lo principal es el guion y es de lo que se fía. Es el esqueleto de cada película y si no es bueno no hay nada que hacer. Lo digo yo y lo dice todo el mundo de la industria; esto lo que le hace decidir en primera instancia. Después ya llega el encuentro con el director.

En tu caso, eres una especie de hombre orquesta. Has escrito el guion, diriges, interpretas…

Lo hago en todas mis películas. Para bien y para mal no hago nada que yo no conciba. Me involucro en todas las parcelas. Siempre tengo el mismo compositor, pero en esta también he hecho algún tema. Es una extensión mía.

Están cuatro viudas (María José Alfonso, Carmen Maura, Marisol Ayuso y María Luisa Merlo), que son tus “Cuatro Chicas de oro”. Cuentan que a ellas les han pasado cosas inexplicables cuando rodaban.

Son mágicas. Mira, te voy a contar alguna anécdota. En un momento crítico de la película salgo del rodaje para respirar y me encuentro con una señora y un chico al que se le veía que estaba mal. Me acerqué a ellos y comenzamos a hablar. Cuando le pregunté cómo se llamaba me dijo: “Jon”. Son señales que te van animando.

Mariano Rajoy hace un cameo. ¿De qué manera lo hiciste posible?

En el guion aparecía que María José Alfonso tenía un sueño, se encontraba en una casa maravillosa en Hollywood y en vez de estar casada con un actor pibón, su marido era Rajoy. Y pensé... ¿y si se lo pido al ser una tema solidario? A través de un amigo recibí una llamada suya diciéndome que sí, que estaría encantado.

¿Cómo fue su intervención?

Es un rol corto. Fue muy divertido, generoso y cómico. He dirigido a muchos actores, pero nunca a un expresidente de España.

Además, contigo Ana Obregón rompió su luto.

La conozco de siempre. Ana ve la vida distinta por lo que le ha pasado. Ahora lo que quiere es brindar alegría. Y lo quiso hacer por su hijo, por los niños de Aladina. Es sensacional. Creo que le vino muy bien.

La historia de tu película tiene un origen familiar…

Así es. En el 2021 mi madre me decía que tenía muchos dolores, que no lo podía soportar y que no entendía porque Dios no se la llevaba. Una noche viendo lo triste que estaba me inventé una historia. Le dije: “Mira, mamá, he encontrado un sitio que te alquilan cuerpos y durante unos días no te duele nada. Lamentablemente, estás en lista de espera porque solo quedan camioneros vascos”. Mi madre era de Santurce y comenzó a reírse a carcajadas. Cada noche lo que hacía era continuar con el cuento. Después, mi madre falleció dos meses antes de comenzar a rodar.

Ella también aparece en la película. Le haces un gran homenaje

Aitana Sánchez-Gijón se encuentra en el laboratorio donde tiene que hacer el cambio del alma de Carmen Maura en otro cuerpo. Hay un avatar muy espectacular que es ella, mi madre. Es mi manera de brindarle este homenaje, que va a ver todo el mundo.

Estabas muy unido a tus padres…

Se divorciaron cuando yo era muy pequeño. Entre ellos siempre tuvieron una relación cordial y hemos sido una familia unida. Tengo un gran cariño y respeto por ambos.

Tu padre, Plácido Arango, era un hombre muy querido.

Fue un gran filántropo, un caballero que hizo grandes cosas. Y mi madre, un ser de luz.

En su funeral todo el mundo que asistió tenía un recuerdo bonito de él y coincidían en que fue un hombre bueno.

Sí, lo era. Mi padre era ateo y, por lo tanto, no creía en otra vida. A él lo que le preocupaba era de lo que yo me iba a preocupar cuando él se muriera. Yo le dije: “Mira, papá, estate tranquilo porque lo tengo todo arreglado. Estas enchufadísimo. Tú tienes una suite en el cielo”. Se habrá pegado un susto cuando se dio cuenta que la cosa seguía allá arriba… Estará muy contento.

En cambio, tú eres lo contrario. Crees en Dios solo porque has visto mucho sufrimiento con los niños que se mueren de cáncer.

Yo he visto milagros. Tuve el don de la fe y solo así he podido abarcar estos veintidós años trabajando con niños con cáncer. La fundación Aladina cumple dieciocho años dentro de una semana. He perdido a muchos niños, pero la tranquilidad que tengo es que he visto milagros; no me los han contado.

¿Cómo se procesa tener una vida aparentemente feliz y lidiar con el dolor derivado de tu fundación?

Es aterrador. Es la mayor injusticia. A mí alguien me lo tendrá que explicar cuando me muera y lo he repetido muchas veces. Yo he visto al Míster, como llamo yo a Dios, llorando en las esquinas de los hospitales cuando fallece un niño. ¿Por qué no lo impide? No lo sé. El 20% de los niños que trato fallecen y me marcan de por vida, aunque intento quedarme con que el 80% que sale adelante en Aladina. Cuidamos de los padres durante unos años y les acompañamos en ese duelo.

¿No te planteas tener tu propia familia? ¿No te sientes solo?

Si hubiera tenido una familia te aseguro que no habría sido posible hacer lo que he hecho. No es una excusa, mirando atrás sería imposible. He pasado la mayoría de mis últimos 22 años en el hospital con niños, Mi gran familia en Aladina.

¿Eres feliz?

Soy el más feliz. Verdaderamente tengo una butaca en primera fila del mayor espectáculo del amor. Tengo el corazón roto en demasiados pedazos y no lo cambio por nada. Estoy escribiendo un libro que me da miedo publicar porque van a pensar que estoy fumado. La realidad es que todo lo que me ha ocurrido es verdadero aunque sea difícil de creer.

¿Y qué otros proyectos tienes?

Tengo dos cosas. Una serie que se llama ‘Te quieres conocer’, con Olivia Molina y Alex González, y una película que aún estoy escribiendo y me gustaría que fuera dirigida por Paco León. Por supuesto, seguir con el vino Maktub (su primera película) de bodegas Marqués Riscal, 100% benéfico. Habrá vinos mejores, pero este tiene el mejor karma del mundo.