Primicia | La propiedad que le embargaron a Arévalo se vende hoy por 2,4 millones de euros

Francisco Rodríguez Iglesias, Paco Arévalo, como se le conocía en el mundo del espectáculo, falleció el miércoles 3 de enero a los 76 años de edad. El cómico, de quien no habían trascendido problemas graves de salud, perdió la vida en su domicilio de Valencia a consecuencia de complicaciones derivadas de la gripe que padecía desde algunos días antes.

Una enfermedad común que le hizo permanecer en su casa los últimos días, que lejos de ser la gran mansión que tantas veces mostró en Valencia, era en la actualidad un céntrico apartamento en la ciudad del Turia, cerca de la plaza de toros. “Lo compró gracias a los ingresos que facturó tras su gira con Bertín. Un piso mucho más cómodo para él y para su hija, más manejable y céntrico”, asegura una íntima amiga de Arévalo en conversación con Vanitatis.

Más pequeño y ubicado en un bloque de apartamentos, nada tenía que ver con la imponente villa familiar que el artista compró a finales de los 90 para acoger a su familia numerosa. Arévalo y su mujer se mudaron allí tras vivir una larga temporada en el famoso piso de la calle Colón. Una vez que su fama empezó a crecer al mismo ritmo que su fortuna, se mudaron a esta casa en Rocafort (Moncada).

En esta localidad ubicada a las afueras de la capital valenciana, concretamente en la urbanización de Santa Bárbara, el célebre cómico encontró esta propiedad con espacio más que de sobra para albergar a su familia: casi 600 metros cuadrados de vivienda divididos en dos plantas con 5 habitaciones y 5 baños y una parcela de 1.500 metros con piscina, jardín y trastero, según se extrae de los documentos a los que ha tenido acceso Vanitatis.

Construida en los años 60, la vivienda ubicada a pocos minutos en coche del Real Club Náutico de Valencia dejó de ser suya hace años. Aunque varios medios de comunicación publicaron entre 2016 y 2018 su intención de ponerla a la venta, lo cierto es que hasta ahora no había trascendido qué pasó finalmente con ella y si formaba parte o no de la herencia que ha dejado a sus hijos.

Pues bien, tal y como han confirmado fuentes del sector a Vanitatis, la propiedad, que llegó a tener un precio de venta de 650.000 euros, fue vendida en noviembre de 2020. Muchas eran las cargas que acumulaba. “Hubo muy mala administración”, asegura una persona del entorno del artista, “y finalmente la casa terminó embargada”.

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Según consta en la nota simple del momento de la venta, Arévalo hizo muchas ampliaciones de hipoteca y al final terminó perdiendo la propiedad. “Fue vendida libre de cargas”, aseguran los expertos consultados. “Una vez que pagó las deudas, posiblemente, no ganó nada de aquello. Puede que incluso perdiera dinero en aquella operación”, continúan.

La casa pertenecía a una de las pocas empresas que aparecen a su nombre en el registro mercantil, Gestión Mediterránea de Inmuebles y Obras SL, registrada hace 26 años (un año antes de la compra de la casa de Rocafort) y cuyo objeto social es “la compra, venta y arrendamiento no financiero de fincas urbanas y rústicas, y la promoción y realización de obras de naturaleza urbana”.

Esta empresa, que no presentaba cuentas desde el año 2019, fue administrada hasta 2004 por su hijo Paquito (durante unos años, también por su hijo Enrique, tristemente fallecido) y desde esa fecha por Arévalo. Su activo total entonces era de 345.475 euros.

De nuevo a la venta

Pues bien, tras su venta en noviembre de 2020 a una promotora inmobiliaria con sede en Valencia, tal y como ha podido comprobar Vanitatis, esa misma parcela vuelve a estar disponible en el mercado. Eso sí, ligeramente cambiada.

La casa que acogió a la familia de Arévalo fue derruida y la parcela está presidida por una vivienda de nueva construcción cuya obra terminó en mayo del año pasado, tal y como han confirmado personas involucradas en el proyecto a este medio.

La antigua construcción de los 60, rematada con mortero amarillo y ventanas del tamaño de la época, ha sido sustituida por una arquitectura vanguardista en la que el blanco y el gris son los protagonistas junto con los grandes ventanales.

Dividida en dos plantas y sótano, este se ilumina parcialmente a través de un patio inglés, tiene una superficie útil de 192 m2 y se distribuye en dos plazas de aparcamiento, lavadero, trastero y sala polivalente. La planta baja en L tiene una superficie útil de unos 225 m2, con la habitación principal con su baño en suite, el vestidor y terraza privada, además de un estudio, un aseo de cortesía y el lavadero. También dispone de un gran salón muy luminoso con bonitas vistas a la zona ajardinada de la parcela, la piscina y el cenador cubierto por el voladizo. Todas las habitaciones de la planta superior (otras cuatro) cuentan con terraza privada.

Una casa con todas las comodidades disponibles cuyo precio, según nos confirman desde la inmobiliaria, es de 2,4 millones de euros.