Miguel Marinero, el peletero que triunfa en Mónaco

La boda de Andrea Casiraghi y Tatiana Santo Domingo en Gstaad no tuvo nada que envidiar a las pasarelas de Nueva York, París o Milán. Hubo invitados que emulaban a las modelos profesionales cambiándose de estilismo varias veces al día, convirtiendo las fiestas previas y posteriores al enlace en un desfile alternativo donde las marcas de megalujo eran la seña de identidad. Y ante tanta firma internacional que gasta millones en sus campañas de publicidad, llamó la atención que la actriz española Macarena Gómez fuera la que sorprendiera en una de sus apariciones al lucir un espectacular bolero de zorro teñido de rojo creación de Miguel Marinero.

El diseñador es uno de los peleteros más innovadores y acaba de presentar con gran éxito sus propuestas para el invierno próximo en la pasarela de Madrid, a cuya puesta en escena acudieron amigas y clientas. Entre ellas, Veva Longoria, las mujeres de la familia Tablada, con Elena Moure, la matriarca del clan, a la cabeza. Días antes habían celebrado el cumpleaños de Ella, la hija que su nieta tiene con David Bisbal. Una fiesta infantil a la que no pudo acudir el cantante porque ese fin de semana iniciaba su gira americana. De ahí que decidiera no formar parte del jurado de la nueva edición de La Voz. Sus viajes y conciertos son incompatibles con el trabajo televisivo.

También estuvieron en la primera fila Rappel, con un abrigo de lince espectacular, Paca Gabaldón, María Luisa San José, Manu Fernández, José Pedro Zotano, Loles León, las empresarias Begoña Zunzunegui, Carmen Morán, el arquitecto Juan Manzanero, Álvaro Morilla, Coqui Font, Ramiro Jofre, Francis López Yanes, Raquel Oliva, Vega Herrezuelo, entre otras invitadas que después se trasladaron al taller del peletero para continuar la fiesta.

Falló Genoveva Casanova, incondicional del peletero y a la que hace cuatro años prestó varios abrigos, uno de ellos muy similar al lucido por Macarena Gómez, la actriz de La que se avecina, en la boda monegasca. Casanova los utilizó en la ceremonia de los Nobel en Suecia en 2010. La ex nuera de la duquesa de Alba era en aquel momento novia de uno de los hijos de Mario Vargas Llosa, Gonzalo, y viajó con toda la familia cuando al escritor se le concedió el Nobel de Literatura.

Massiel, amiga de Marinero y de su mujer Inés desde hace años, explicaba esa noche que no tiene intención de volver a la vida activa. “He trabajado ya mucho en mi vida. Todos mis discos están remasterizados, he interpretado grandes papeles en teatros de primera y tampoco tengo ganas de agobiarme para estar delgada. Como lo que quiero, veo a mis amigos, viajo y disfruto de mi nieto Martín. Estas son ahora mis obligaciones. Me considero una persona privilegiada en este país en el que hay demasiada gente que no puede encender la calefacción y vive a oscuras porque el dinero que tiene lo utiliza para comer. Es de tal magnitud las situaciones dramáticas de familias que antes vivían y ahora sobreviven que da miedo”, expone Massiel.

La cantante, que siempre ha dicho lo que piensa, quiso dedicar unas palabras acerca de la comparecencia de la infanta Cristina ante el juez Castro. “Me parece bochornoso que antes de que declarase, el presidente del Gobierno dijera que era inocente. Y el papelón del fiscal también es de traca. Todo es un escándalo”, asegura la intérprete del La, la, la.

La fiesta termino al filo de la medianoche y al día siguiente Marinero recibía a varias clientas monegascas. La marca España funciona.