Las (múltiples) razones del agosto separados de Bigote Arrocet y María Teresa Campos

Muchos kilómetros. Esa ha sido una de las razones fundamentales de que María Teresa Campos no haya acompañado a Edmundo Arrocet a Grecia, país al que ha viajado el cómico para conocer a su nuevo nieto. Desde que volvió de Honduras, Bigote ha tenido pocas semanas para estar con su pareja, que continúa recuperándose del ictus que sufrió este mismo año. La presentadora no solo estaría descansando de cara a estar bien de salud sino también preparándose para volver por todo lo alto a Telecinco, cadena con la que ya tiene confirmado un nuevo programa tras el adiós, hace unos meses, de '¡Qué tiempo tan feliz!'.

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Este miércoles, Pilar Eyre adelantaba en su columna que la veterana periodista regresará a su televisión de confianza en octubre con una mesa de debate, algo nada ajeno a su trayectoria profesional, ya que en la época en la que dirigía y presentaba 'Día a día' fue pionera a la hora de ofrecer un debate político en un magazine matinal, fórmula que después calcaron muchos otros programas. Bigote, por su parte, lleva varios días en Grecia visitando a su hijo Maximiliano y su pareja Natalia, que han sido padres de un niño y lo han hecho abuelo.

El breve lapso de tiempo que Campos y Bigote han estado juntos tras la época 'Supervivientes' ha sido bien aprovechado. Tal y como publicó 'Vanitatis', Campos visitó el piso de soltero de Bigote y apareció con él públicamente en varios actos. El primero de ellos fue la presentación del libro de Terelu Campos, 'Frente al espejo', que se ha convertido en el éxito editorial del verano para alegría de la matriarca del clan. Bigote también estuvo al lado de Campos cuando le entregaron, a finales del mes de julio, la Medalla de Oro al Mérito en el trabajo.

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J. Díaz

Sin embargo, parece que este mes de agosto la pareja tiene que conformarse con comunicarse de manera virtual por cuestiones bien distintas. Al contrario de lo que rezaba la famosa canción del Dúo Dinámico, el final del verano significará, para ellos, un magnífico reencuentro.