La dieta de la piña y el pollo: ¿es posible perder 4 kilos en una semana y cómo puede afectar?

Cada cierto tiempo resurgen y llegan a nuestros oídos algunas dietas que nos prometen que podemos cumplir nuestros objetivos de perder peso en un tiempo exprés. Estas dietas milagro no suelen ser las más recomendables cuando lo que queremos es cuidar nuestra salud.

En general, los expertos recomiendan un enfoque más global y no solo centrado en la alimentación. El ejercicio físico es una de las actividades que conviene incorporar a nuestras rutinas si queremos llevar una vida más activa y saludable y no son pocas las ocasiones en las que la salud mental juega un papel determinante.

La dieta de la piña y el pollo

Este tipo de planes alimenticios nos invitan a probar la eficacia de algunos alimentos a la hora de perder peso, en concreto la dieta de la piña y el pollo asegura que se pueden perder 4 kilos en una semana a base de estos dos alimentos en múltiples versiones.

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En general, la piña se convertiría en el elemento estrella de esta dieta, que elimina por completo los hidratos de carbono y que nos invita a tomarla para desayunar, comer y cenar, en el caso de las dos últimas ingestas, en compañía de pollo, que en ocasiones puede ser sustituido por otro tipo de proteína, como pescado blanco.

Tanto a media mañana como a media tarde estaría disponible un tentempié, en ocasiones acompañado de un yogur, ya sean rodajas de piña o una cocción elaborada con la piel de esta fruta. Es cierto que pasado el tiempo estipulado es muy probable que se haya alcanzado la pérdida de peso deseada, pero no es nada recomendable dejarnos seducir por este tipo de dietas.

Aun en el caso de seguir teniendo ganas de volver a comer alguno de estos alimentos en el futuro, esta no es una dieta que podamos prolongar en el tiempo, se ingieren muy pocas calorías y hay una notable ausencia de nutrientes, lo que podría llegar a poner en riesgo la salud de quien la hace (incluso por breves periodos de tiempo).

La piña es diurética, por lo que conviene señalar que la mayor parte del peso perdido será líquido, no grasa, que sería lo ideal. Este líquido se recuperará de forma bastante rápida en cuanto volvamos a ampliar el rango de ingredientes. Este tipo de dietas pueden llegar a hacernos perder masa muscular, lo que ralentizaría nuestro metabolismo y hay muy pocas posibilidades de no recuperar el peso perdido e incluso, ganar algo extra, el famoso efecto rebote.

Ponernos en manos de profesionales y expertos será la mejor manera de perder peso (si es lo que se quiere) de una manera saludable y efectiva, con un plan completo y personalizado que favorezca lograrlo sin poner en riesgo la salud.