Estos son los errores más comunes que cometemos tras una ruptura: no romper el contacto es uno de ellos

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Una ruptura amorosa puede ser uno de los procesos más desafiantes, y cada persona lo enfrenta a su manera. Sin embargo, algunos comportamientos y decisiones pueden obstaculizar el avance hacia una nueva etapa, provocando que el dolor se prolongue más de lo necesario. Identificar y evitar ciertos errores puede ser clave para superar la pérdida con mayor serenidad.

Uno de los más habituales es evitar enfrentarse a las emociones que surgen tras una separación. Algunos prefieren distraerse constantemente para no pensar en la situación, pero reprimir el dolor solo acumula frustración y tristeza. Permitirse sentir, llorar si es necesario y buscar formas saludables de procesar estas emociones ayuda a liberar y dar paso a una recuperación más estable. Por otra parte, es importante evitar mantener el contacto constante con la expareja. Aunque puede resultar tentador seguir teniendo relación con la persona con quien hemos compartido tanto, esta cercanía suele entorpecer el proceso de superación, ya que puede reabrir heridas, generar expectativas poco realistas y dificultar la aceptación de la separación. Es importante dar un espacio de distancia para permitir que cada uno reconstruya su vida de manera individual.

Asimismo, aunque es positivo mantener una vida activa, llenarse de actividades para evitar el dolor es contraproducente. Este comportamiento suele llevar al agotamiento y no permite abordar las emociones genuinas que surgen en estos momentos. Reservar un tiempo para uno mismo, reflexionar y comprender lo que ha sucedido es fundamental para sanar y avanzar. Por otro lado, resulta un error idealizar la relación pasada. Durante el proceso de duelo, es fácil caer en la trampa de recordar únicamente los momentos felices y olvidar los problemas que llevaron a la ruptura. Esta idealización puede crear un sentimiento de nostalgia que obstaculiza la sanación. En lugar de ello, es útil recordar tanto los buenos como los malos momentos, comprendiendo que la decisión de separarse tuvo una razón válida.

De este mismo modo, no debemos evitar el apoyo emocional durante este proceso. Muchas personas intentan superar solos el duelo amoroso, siendo esta decisión un error. Hablar con amigos, familiares o incluso un profesional puede ofrecer una perspectiva valiosa y permitir que el proceso sea menos solitario. El apoyo externo brinda un espacio para expresarse y recibir comprensión en un momento de vulnerabilidad.

Superar una ruptura amorosa no es un camino fácil, pero reconocer y evitar estos errores permite transitar el proceso de una manera más saludable. Cada paso que tomamos nos acerca a un estado de bienestar y autocomprensión, y aunque el proceso sea doloroso, es posible avanzar hacia una nueva etapa de crecimiento personal