La infanta Elena da la 'levantá' del Cristo de los Alabarderos al grito de "por España"

De nuevo la infanta Elena rompe con el hermetismo que gira en torno a la Familia Real en época de vacaciones. Si el martes pasado viajaba a Toledo con Froilán, Victoria Federica y su tía, la infanta Margarita, para visitar la exposición ‘El Griego de Toledo’ en dos de sus espacios, el Museo de la Santa Cruz y la Capilla de San José, este Viernes Santo la duquesa de Lugo aparecía en la madrileña procesión del Cristo de los Alabarderos.

Vestida de manera informal con vaqueros oscuros, camisa blanca, bléiser de color beige y un jersey verde sobre los hombros, doña Elena fue la encargada de dar la segunda ‘levantá’ de dicho paso, que custodia la Guardia Real, al grito de “por España”, tal y como aseguran a Vanitatis personas que estuvieron en el interior del Palacio Real de Madrid. Sin embargo, la duquesa no es la única de la familia que siente devoción por el Cristo de los Alabarderos. Muy cerca de la puerta del Príncipe del Palacio se encontraba la hermana del Rey, doña Margarita, apoyada en una de las columnas y acompañada, además de su sobrina, por dos amigas.

El año pasado, y después de esquiar con sus hijos y la infanta Cristina en Baqueira Beret, Elena también fue la encargada, como madrina del paso del Cristo, del realizar la primera ‘levantá’. En aquella ocasión acudió acompañada de Rita Allendesalazar, condesa de Ventosa, íntima amiga y una de las personas que más le apoyó durante los meses posteriores a su separación de Jaime de Marichalar. Casada con José María Álvarez de Toledo, coronel de la Guardia Real, la condesa de Ventosa fue su vecina cuando doña Elena vivía en la madrileña calle Ortega y Gasset cuando aún estaba casada y quien le ayudó en su mudanza a un chalé en la Colonia Fuente del Berro.

En 2012, y cuando muchos la hacían disfrutando de la nieve en los Pirineos, la infanta volvió a sorprender acudiendo, de nuevo, a dar la ‘levantá’ mientras el Rey se encontraba de viaje oficial a Kuwait para impulsar las relaciones económicas de España, su madre en Palma junto a su hermana Irene y se desconocía el paradero de los príncipes de Asturias.

Esa misma situación es un calco de la actualidad. Dos años después, doña Sofía se encuentra en Mallorca desde el pasado fin de semana acompañada únicamente por su hermana Irene, el Rey regresó a España el miércoles de una gira internacional que le ha llevado, durante cuatro días, a Emiratos Árabes y Kuwait y se desconoce si está en Zarzuela o el Palacio de Marivent, y Felipe y Letizia aún no han hecho acto de presencia desde el pasado 10 de abril, cuando el príncipe de Asturias tuvo su último acto oficial.

Según confirmaron fuentes de Casa Real a Vanitatis, sólo la presencia de los reyes está confirmada en la Misa de Pascua que tendrá lugar este domingo en la Catedral de Palma. A pesar de que no se atreven a aventurar quién más estará en la fotografía oficial, es muy posible que los príncipes, sus hijas y la infanta Elena estén al lado de los monarcas escenificando cuál es el auténtico ‘núcleo duro’ de la Familia Real.